El expresidente José Mujica dio por cerrada la vieja polémica que mantiene desde hace años con el que fue su vicepresidente, Danilo Astori, en torno a las inversiones que el Estado realizó durante su gobierno, entre 2010 y 2015. Una polémica que resurgió en los últimos días, cuando el exministro de Economía reafirmó su convencimiento de que en esa administración "se gastó mucho y se gastó mal".

Astori fue el protagonista del último podcast Nominal, de la Universidad Católica del Uruguay, que es conducido por el economista Javier De Haedo. Uno de los temas de discusión fue la famosa existencia de dos equipos económicos "paralelos" durante la época, uno que respondía a Mujica y otro que respondía al entonces vicepresidente.

"Yo no creo que haya llegado al nivel de dos equipos económicos, pero sí creo que tuvimos diferencias que entorpecieron nuestra labor", señaló Astori para aclarar que se refería a la línea económica oficial, encabezada durante la mayor parte del tiempo por Fernando Lorenzo. "Encontramos dificultades, contradicciones", agregó.

Según Astori, desde el punto de vista fiscal en ese gobierno algunas empresas públicas llegaron a "niveles insostenibles de gasto" y "dejaron una situación que al país le costó recuperar, y que se reflejó en el tercer gobierno del Frente Amplio, con los resultados fiscales que tuvimos".

Consultado este martes por El País, Mujica optó por cerrar ese viejo diferendo. "No lucho por hacer historia", aclaró. "Lo que me quede, lucharé por el destino del país y de mi fuerza política". El expresidente sostuvo que no estaba dispuesto a discutir "con el compañero", como definió a Astori. La razón: "como soy viejo, sé que es mejor rascar para adentro que para afuera. Allá él", concluyó.

El gasto efectuado durante la administración de Mujica fue señalado repetidas veces en forma crítica por Astori en los últimos años, incluso cuando el Frente Amplio era gobierno. En una entrevista que Búsqueda publicó en agosto de 2017 Astori, en ese momento ministro de Economía durante la segunda gestión de Tabaré Vázquez, sostuvo que el período anterior había culminado con un déficit fiscal en ascenso ya que hubo una decisión de adelantar tiempos electorales. "Muchas veces, queriendo obtener ventajas desde el punto de vista político, electoral, partidario, sectorial o personal, se toman decisiones que perjudican al país y particularmente en el terreno fiscal", había expresado.

“Nosotros, con los que estaban en el Ministerio de Economía incluidos, advertíamos sobre el efecto negativo, que luego se verificó, del manejo que tenían algunas empresas públicas”, pero esa advertencia “no se tradujo en medidas concretas por parte de quienes tenían la posibilidad de tomarlas”, explicó.

El punto central de las discusiones en la época estuvo en un cúmulo de inversiones realizadas por Ancap y sus empresas colaterales.