LA MARCHA DE LA PANDEMIA
Análisis preliminar del impacto de las medidas contra el COVID-19 dio que hubo "poca efectividad" en las medidas adoptadas días atrás para reducir los contagios.
Aunque aún faltan seis días para la fecha señalada, el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) reunió a varios de sus integrantes el jueves y realizó un análisis preliminar de la efectividad de las medidas que anunció el presidente Luis Lacalle Pou el 1° de diciembre.
Y el panorama está lejos de ser auspicioso.
Algunos indicadores, como el de movilidad, permanecieron incambiados. Los datos de georreferenciación, que permiten visualizar la distribución de los casos territorialmente, muestran que “no hubo ninguna evolución favorable” en Montevideo, epicentro de la epidemia, contaron desde el GACH.
El grupo espera por estas horas conocer si se modificó la cantidad de contactos por cada contagio, un dato clave que hasta el momento no se ha podido dilucidar debido al “desborde” que hay en el equipo de rastreadores. El último dato muestra, en promedio, 25 contactos por positivo.
“No necesariamente la movilidad va acoplada a la cantidad de contactos”, advirtieron las fuentes. A ese análisis se le incorporarán otros indicadores, como la evolución del índice de reproducción del virus y el estado de los CTI, que ya preocupa.
A priori, dicen a El País desde el GACH, “las medidas no parecen haber tenido eficacia”. Entre otras cosas, el grupo percibe que las oficinas del Estado no parecen haberse acoplado alteletrabajo todo lo que se esperaba, aunque aún no disponen de todos los datos al respecto.
Es posible que las medidas hayan sido “demasiado livianas”, pero también que el nivel de acatamiento haya sido insuficiente. Y este segundo elemento sería parte del problema. Sin embargo, en el GACH sostienen que ya no tendría sentido insistir y exigir más acatamiento de esas mismas medidas. Entienden que “la ventana de oportunidad” se está cerrando y que “ya no hay tiempo para experimentar”.
“Estamos preocupados. Queremos mostrar la proyección de la epidemia con los datos que tenemos ahora. Parecería que el tiempo de duplicación en Montevideo se había alargado un poquito, pero después de los datos de anoche (por el jueves, cuando hubo 390 casos nuevos), hay que revisar todo”, dijo a El País uno de los científicos.
Lo cierto es que varios indicadores hablan hoy de un escenario general de “zona naranja”: más de 300 casos, 25% de casos sin nexo epidemiológico, y más de 4% de positivos en el total de exámenes realizados. Esto, conceptualmente, implica la necesidad de tomar medidas restrictivas. Pero eso, claro, es decisión del gobierno.
En el GACH dicen que si bien tienen “muchas ideas”, aún están en la fase de análisis, que esperan culminar este fin de semana para trasladarle el diagnóstico a las autoridades.
“Todo parece indicar que la estrategia Tetris (Test, Trace and Isolate, o Testear, Rastrear y Aislar) estaría llegando a un límite”, concluyó uno de los consultados. “Algunos creen que ese límite está sobrepasado. Sin un cambio comportamental, el modelo no perdura”.
Más medidas.
Este martes se cumplen 14 días de las medidas que se tomaron para aplanar la curva de casos. En el gobierno se propusieron evaluar el panorama el viernes 18, pero informalmente admiten que en los primeros días de la semana ya tendrán claro si es necesario ir hacia más restricciones. Para eso, esperan la voz del GACH.
Sin embargo, ya hay varias posibles medidas sobre la mesa. Si en algo hay consenso entre los distintos involucrados es en que no habrá cuarentena obligatoria. Una de las posibilidades, sí, es exhortar a un confinamiento voluntario que pueda establecerse después de determinada hora del día, que según supo El País podría ser a las 18 o las 21 horas.
Otra de las opciones es establecer el teletrabajo obligatorio para los privados. Fuentes de la salud creen que puede ser “muy oportuno”. En Presidencia se estudia cuál sería su forma más viable, y si sería necesario aprobar una ley o si podría agregarse a la ley de emergencia sanitaria que rige actualmente.
A su vez, la Oficina Nacional de Servicio Civil prepara un informe respecto al cumplimiento del trabajo remoto en el Estado. “Estamos apretando para que se cumpla a rajatabla”, afirmaron desde Presidencia. El Congreso de Intendentes tiene también la directiva de incorporar la disposición a nivel departamental.
Ayer el Codicen definió eliminar la obligatoriedad de las clases en los departamentos con más casos y el miércoles el Ministerio de Salud (MSP) ordenó postergar las consultas de salud presenciales no urgentes. Con estas medidas adicionales a las del 1° de diciembre se pretende seguir restringiendo la movilidad y salvaguardar el sistema de salud.
Desde el MSP indicaron que será vital el comportamiento durante este fin de semana. Por eso apelan a la “cautela” antes de decidir si ajustar o no las perillas sanitarias.
Por su parte, la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, anunció esta semana el cierre de teatros y casinos que dependen de la comuna. Fuentes del Ministerio de Educación y Cultura consideran que esas fueron medidas “para la tribuna”, bajo el entendido de que la programación en los teatros municipales ya estaba acabando por tratarse de fin de año.
De todas formas, tanto el gobierno departamental como el nacional están evaluando la suspensión del concurso de Carnaval de febrero. Los desfiles inaugurales y de Llamadas ya habían sido cancelados, y esta semana Cosse exhortó a suspender los ensayos. Ahora analizan los riesgos de los tablados y del Teatro de Verano.
(Producción: Nicolás González y Tomer Urwicz)
Entre dirigentes de Cabildo Abierto sorprendió que la semana pasada Presidencia no haya hecho lugar a ninguna de las propuestas que presentó el ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, para mitigar los efectos de la pandemia.
El líder del partido, Guido Manini Ríos, dijo ayer en conferencia de prensa que si fuera por el secretario de Estado él “sería mucho más restrictivo y hubiera cerrado distintas perillas” en el manejo de la pandemia del coronavirus. “Permanentemente está proponiendo, pero desde la óptica de su ministerio. El gobierno en general, el presidente y el equipo de gobierno, tiene que decidir mirando el tablero completo”, añadió el senador.
El País informó en su edición del sábado pasado que Salinas presentó una serie de medidas por escrito al presidente Lacalle Pou, justo cuando el mandatario se aprestaba a anunciar nuevas disposiciones para disminuir los casos.
En una de ellas, el secretario de Estado proponía adelantar el fin de cursos en el primer ciclo de Secundaria dado que las clases allí terminarían en una semana. En Presidencia, sin embargo, se informó a El País que la medida propuesta alcanzaría a las escuelas. En principio la iniciativa tenía el visto bueno del presidente, pero no de las autoridades de la enseñanza ni del GACH. Finalmente, el gobierno definió dar otros pasos.
Ayer, Manini dijo sobre el cierre de bares a la medianoche y la prohibición de deportes en espacios cerrados, anunciados el 1° de diciembre, que “está estudiado” por qué esas medidas rigen, en principio, hasta el 18. “Las autoridades de la salud actúan en base a asesores y especialistas que están en el tema. Con el ministro simplemente intercambiamos opiniones”, agregó.