Antía salió al cruce del Sunca por paros en Maldonado que demoran el realojo del Kennedy: "Se están zarpando"

Según el intendente fernandino, la semana pasada los obreros "trabajaron un día y medio" pese a que "hay una expectativa muy grande de las familias" que esperan mudarse.

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Enrique Antía, intendente de Maldonado. Foto: Ricardo Figueredo
Enrique Antía, intendente de Maldonado.
Foto: Ricardo Figueredo

Redacción El País
El intendente de Maldonado, Enrique Antía, declaró en las últimas horas que los obreros de la construcción que adhieren a los paros del Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) en el departamento "se están zarpando" y que provocaron la demora en el realojo de cientos de familias del barrio Kennedy.

Tras recorrer las obras del barrio en donde serán realojadas, dijo que los obreros "pararon el cordón cuneta que se estaba haciendo", y por ende "la terminación final de todo el fraccionamiento". Esto demora los "ajustes de jardinería", que son "la presentación del barrio". "Todavía faltan 2.000 metros de cordón", lamentó.

"La empresa paró la obra en la tarde de ayer" porque los obreros "no permitieron hacer más hormigón", lo que para Antía es "una señal más de lo difícil que es trabajar en estas condiciones".

"La semana pasada pararon todas las empresas, la de sanitaria, la eléctrica, las dos empresas constructoras, creo que en la semana trabajaron un día y medio", deslizó.

Antía lamentó que haya que "correr la fecha de inicio de realojo del Kennedy" porque "hay una expectativa muy grande de las familias".

Obras para el realojo del asentamiento Kennedy. Foto: Intendencia de Maldonado.
Obras para el realojo del asentamiento Kennedy.
Foto: Intendencia de Maldonado.

Días atrás, Daniel Diverio, presidente del Sunca, explicó a El País el porqué de las medidas que han tomado, y desligó a su sindicato del atraso en las obras. Según dijo, el problema surgió en una empresa dedicada a la fabricación de materiales de premoldeado en Pan de Azúcar, donde se hizo una “reestructura” y “de 45 trabajadores que había, se despide a 17 sin previo aviso”.

Para el sindicalista, se trata de “un despido abusivo”, porque además “la empresa despidió a todos los trabajadores que se habían organizado y habían hecho reclamos”. Según dijo, pese a las negociaciones “no hubo avances” porque “la empresa lo que hace es ofrecer plata” y lo que el sindicato quiere es “sostener los puestos de trabajo”.

Tras las negociaciones fallidas, la agrupación se declaró en preconflicto y “se empezaron a tomar medidas” sindicales en toda la rama del hormigón, como paralizaciones para asambleas, y como contrapartida las empresas “tomaron la definición de enviar a los trabajadores al seguro de paro”.

Para Diverio, es esa resolución de las empresas la que afecta a las obras en Maldonado y no las medidas sindicales, entre otros motivos porque a raíz de la falta de personal las construcciones “no tienen suministro de hormigón”.

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