Para todos en el Partido Nacional es un hecho que el senador Juan Sartori va a ser nuevamente candidato a presidente. Lo asumen desde todas las tiendas blancas en función de conversaciones mantenidas con el empresario en las últimas semanas, pero también por otras señales, como los contactos que ha establecido con dirigentes de todo el país para volver a armar una estructura política que le permita sostener su candidatura; o sencillamente por el video publicado días atrás en las redes sociales -en el que, mediante inteligencia artificial, aparecen líderes históricos pidiendo su postulación.
La inminencia del anuncio genera inquietud incluso en el propio gobierno de Luis Lacalle Pou, desde donde han realizado consultas a dirigentes blancos en las últimas horas para saber si ya podía “confirmarse” la candidatura del empresario, según supo El País. Y también en los equipos de los tres principales precandidatos blancos que están en carrera -Álvaro Delgado, Laura Raffo y Jorge Gandini-, aunque los cálculos electorales que hacen los nacionalistas, a partir del efecto proyectado sobre estas tres figuras, varía en cada caso ya que son tres situaciones políticas diferentes.
Pero todos asumen que el factor Sartori no será inocuo y esperan ansiosos el anuncio.
En donde menos inquietud hay, como podría esperarse, es en el comando de Delgado, hoy el favorito a ganar las elecciones internas a juzgar por todas las encuestas. El exsecretario de la Presidencia, además, cuenta con una estructura partidaria -conformada por 13 intendentes blancos y los sectores Aire Fresco, D Centro, Espacio País y la vicepresidenta Beatriz Argimón- que le da la tranquilidad necesaria a la hora de afrontar un escenario con un nuevo competidor blanco.
El que va tercero en las encuestas, el precandidato Jorge Gandini, señaló a El País que tampoco tiene mayor preocupación por los desequilibrios que pueda causar la entrada de un nuevo jugador en la interna nacionalista.
En torno a Raffo es que se generan más cálculos entre los nacionalistas, todos ellos referidos al eventual efecto perjudicial que pueda tener la nueva incursión de Sartori. Pese a esto, los dirigentes de Sumar -la plataforma política que apoya a la economista- entienden que no se deberían ver perjudicados. Y que en todo caso el empresario podrá restarle caudal a quien va primero, que es Delgado.
“En el Herrerismo estamos muy tranquilos con nuestra candidata y nuestra estrategia”, dijo a El País el diputado Juan Martín Rodríguez, quien está a favor de que los blancos cuenten con “un menú electoral” lo más amplio posible. “Es como decía el viejo Herrera -agregó-: «El que tenga miedo que se compre un perro»”.
Sea como fuere, quienes acompañan a Sartori entienden que, más allá de las especulaciones, Raffo -segunda hoy por hoy en las preferencias de los blancos, de acuerdo a todas las mediciones- es la primera rival a vencer. “Con los números que manejamos nosotros, ya estamos segundos, dentro del margen de error”, dijo por su parte el diputado suplente Martín Elgue, uno de los sartoristas que, junto con el senador Juan Straneo, viene impulsando la precandidatura de Sartori desde abril del año pasado.
Campaña “disruptiva”
El escenario que proyectan en el sartorismo es diferente al de fines de 2018, cuando el hoy senador sorprendió al sistema político al desembarcar en Montevideo con la decisión de competir en la interna del Partido Nacional con aquella recordada campaña que comenzó con la omnipresente pregunta: “¿Conocés a Juan Sartori?”.
Los allegados al empresario adelantan que, aunque no tendrá la novedad de hace cinco años, la campaña buscará diferenciarse de las demás por lo menos en su brevedad, ya que su lanzamiento se estima para entre fines de marzo e inicios de abril -cuando las elecciones serán el último domingo de junio.
Asimismo, esperan una campaña “disruptiva, tal como fue la de 2019”. “Sartori es un candidato que está 10 años adelantado a su tiempo. Hay gente que no lo comprende, pero tiene una cabeza de primer mundo, cuando en Uruguay se avanza en slow motion”, agregó Elgue.
Gandini: “A mí no me genera estrés” una nueva candidatura
El senador Jorge Gandini ha sido uno de los dirigentes del Partido Nacional más críticos con Juan Sartori, sobre todo por sus varias y largas ausencias al Parlamento durante este período. Sartori también ha sido duro con el precandidato de Por la Patria, y algunos blancos avizoran que en la campaña el empresario volverá a la carga contra él.
El senador wilsonista, sin embargo, entiende que es bienvenida la candidatura de Sartori, ya que será “un jugador más que raspará” en beneficio de los nacionalistas. En ese sentido, dijo que prefería que confirme una precandidatura propia en lugar de “sumarse a las ya existentes”. “A mí no me molesta y no me genera estrés alguno. Si yo me animé a largarme contra los grupos más poderosos del partido, se imaginarán que Sartori no es mi preocupación”, dijo Gandini, que concluyó: “Si le va bien, es porque hay una parte de la población que quiere eso”.
El temor en el PN por “planteos disparatados”
El paso de Juan Sartori por la política y, especialmente, como precandidato a presidente por el Partido Nacional, dejó también en el recuerdo de varios sus polémicas propuestas programáticas, como cuando planteó repartir una tarjeta a jubilados (llamada MedicFarma) que sirviera para acceder “sin costo” a todo tipo de medicamentos.
Ahora, ante la firme posibilidad de tener que confrontar de nuevo con Sartori, algunos dirigentes blancos que supieron enfrentarse a esa clase de ideas en 2019 temen que, nuevamente, “planteos disparatados” vuelvan a “marcar la agenda”.
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