Por la calle Lucas Obes, en la entrada a la Rural del Prado, hay un tradicional puesto con banderas y pancartas que invitan a ya pensar en las urnas. Cae la tarde del viernes, la Expo Prado 2023 tuvo su inauguración con la presencia del presidente Luis Lacalle Pou, y afuera, en torno a esta carpa, militantes del sector blanco Por la Patria están pidiendo el voto por quien será uno de los precandidatos del Partido Nacional, el senador Jorge Gandini.

El texto que se reparte se cuida de usar la expresión “precandidato” que tanto eluden -aunque es obvia-, y en cambio, luego de resumir sucintamente la biografía del legislador, se apela a un concepto que desde hace meses está extendido entre los sectores que se los suele agrupar bajo lo que se entiende como “afinidad wilsonista”. “Hoy (Gandini) se ha propuesto recrear una corriente wilsonista que ensanche la base del Partido, para ayudarlo a ganar y continuar con los cambios”, afirman en el folleto, que a su vez invita a la asistencia del congreso de Por la Patria para el 10 de octubre, cuando se espera la proclamación de una precandidatura cuyo involucrado no se cansa de afirmar que ha construido “de a pie”.

La campaña electoral no comenzó si se toma como punto de partida las fechas de esos actos solemnes en que los precandidatos dicen aceptar el reto de ir por la Presidencia, pero los blancos, y en especial los que dicen vibrar con el legado de Wilson Ferreira Aldunate, tienen marcado octubre en el calendario como una fecha de salida y desembarco territorial.

¿Quiénes son estos grupos? La mención siempre trae problemas, porque no hay nacionalista que reniegue de Wilson, y hay algunos, como los que integran el sector Alianza Nacional que hoy acompaña el proyecto de la futura precandidatura Laura Raffo, que también se definen de esta manera.

Pero nadie niega que la alianza que se produjo entre el Espacio 40 y Mejor País en diciembre de 2022, D Centro -la nueva agrupación creada semanas atrás para integrarse al proyecto político del también futuro precandidato nacionalista Álvaro Delgado-, más quienes siguen al senador Gandini, conforman ese tejido disperso que los blancos identifican como polo wilsonista.

Pero tienen eso común: que, con estrategias distintas y opciones diferentes -unos ya tienen candidato definido, otros no-, saldrán a la cancha en octubre.

Los primeros, cuyo nombre no está definido pero hay quienes comenzaron a llamarse “Espacio País”, empezarán por Canelones y la zona metropolitana, luego de una primera gira que hicieron por todo el país. Canelones, se sabe, es un bastión difícil para los nacionalistas, sobre todo en las grandes ciudades y en la costa, en donde es mayoría el Frente Amplio.

“Vamos a ir desde el sur hacia el norte, porque el norte nos preocupa menos, ya que lo tenemos más cubierto”, dijo a El País el senador Sebastián Da Silva, partiendo también de la base de que en el sur está el 67% del electorado.

La propuesta será visitar todas las localidades canarias, y el mensaje político de fondo es, según señaló el ministro Javier García -referente de esta agrupación- dar cuenta de “un dato” que “interpela” a los nacionalistas y es que “a casi un año de la elección nacional, el 43% de los blancos no se siente identificado” por ninguna de las tres precandidaturas ya instaladas, como arrojó la última encuesta de la consulta Cifra (que da un 30% de preferencias para Delgado, un 13% para Raffo y un 10% que mencionan otras figuras).

“Es un dato -insistió García- que hay que analizar con mucha atención, porque significa que casi la mitad del partido no se siente representado, y lo ideal para el Partido Nacional sería tener una expresión que reúna a todos los que compartimos esa misma sensibilidad wilsonista”.

D Centro, mientras tanto, tendrá en estos días su presentación oficial ante el Directorio nacionalista, y a su mesa directiva trabajando para comenzar las recorridas en octubre, señalaron fuentes partidarias.

Y Gandini, lo dicho: afirma ya estar “corriendo” en la llanura, esperando por el congreso de su sector.

A medida que el calendario corre, las negociaciones entre los dirigentes empiezan a acelerarse y a cristalizar en acuerdos, cuando los hay.

En esto están todos estos grupos del polo wilsonista. La vicepresidenta Beatriz Argimón, por ejemplo, está muy próxima a cerrar su incorporación al proyecto que está armando Delgado, dijeron a El País fuentes políticas. Las señales de acercamiento, en particular al grupo D Centro, han abundado últimamente, por lo que la posibilidad firme es que la referente de Futuro Nacional se integre en ese lugar, tal como informó Búsqueda.

La 40 y Mejor País, por su parte, celebran el crecimiento en tres diputados que han tenido de un tiempo a esta parte (que se suman a los dos senadores que ya tienen), entre los que está Álvaro Dastugue, considerado un puntal en Canelones y clave en el entramado de este proyecto. Y a su vez están en conversaciones con el intendente de Paysandú, Nicolás Olivera, exintegrante de Alianza Nacional que hoy es independiente, así como otros dirigentes del interior “que andan sueltos”, indicaron dirigentes de este espacio. Pero Olivera también es codiciado por D Centro; de hecho, se mostró en la inauguración de esta agrupación y mantiene fluido diálogo con sus dirigentes.

Jorge Gandini repite desde hace tiempo que su proyecto político no tiene las facilidades de otros. Sabe también que las encuestas hoy no lo posicionan entre los primeros lugares ni mucho menos, pero no obstante está enfocado en ofrecer una real “alternativa” a la que entiende como “oficialista” que componen quienes serán los otros dos precandidatos del Partido Nacional: el secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, y la economista y excandidata a intendenta de Montevideo, Laura Raffo. Porque para él, ambos provienen del “polo herrerista”, con lo cual se hace necesario una precandidatura verdaderamente wilsonista que logre “ensanchar” las bases del Partido Nacional.

Sobre el resto, dice que “se han amontonado en la Torre Ejecutiva, al lado del fogón, del maravilloso calor del poder”, mientras que él construye su precandidatura desde el llano. “Nosotros seguimos estando de a pie, corriendo y atravesando la llanura, que es en donde está la gente”, señaló en diálogo con El País.

Por lo pronto, y también consciente que las chances de contar con el apoyo de dirigentes pesados -pues la mayoría ya ha tomado su camino en la interna nacionalista- son bajas, espera con ansias el congreso de Por la Patria del próximo 10 de octubre, porque supondrá un mojón importante en su trayectoria, además del lanzamiento de su carrera hacia junio de 2024.

“A partir de ese momento iré hacia algo más estable, más permanente, y después de esa fecha, con la Rendición de Cuentas ya aprobada, voy a estar más presente” y en modo campaña electoral, agregó. Ese día, a las 19 horas en el Cine Teatro Metro, Por la Patria también anunciará una “estrategia de comunicación” que hoy se está diseñando.

Mientras, busca mostrarse crítico con lo que no le gusta del gobierno y ser enfático cuando se corrigen errores -como con la renuncia de Carlos Albisu de su cargo en Salto Grande-, y duro en la confrontación con el Frente Amplio.