Cabildo Abierto tiene la tarea de definir quién será el vicepresidente que acompañará en la fórmula a Guido Manini Ríos. Esto no es sencillo, ya que cada sector nacional tiene su propia propuesta, y la decisión se tomará con los números en vista de los votos que consiguió ayer cada uno. Algo que ya sabían (aunque esperaban una mayor concurrencia), motivo por el cual en los últimos días los dirigentes sacaron toda su artillería para mover a la militancia, e incluso hubo duras acusaciones cruzadas entre los principales referentes.

Lo cierto es que el líder del partido, Manini, aseguró ayer a la noche que ya tienen “dos o tres nombres muy interesantes” -dentro de los que hay hombres y mujeres-, y que la definición se comenzará a “manejar en pocos días”. Pero se negó a decir cuáles son, para no “manosear”, y adelantó que estas opciones “van a ser consideradas” en vista de “qué es lo que más fortalece a Cabildo Abierto” de cara a las elecciones de octubre, que son “fundamentales” para el partido.

Así lo comunicó en una conferencia de prensa en la sede de Cabildo Abierto con poca concurrencia de la militancia. A lo largo de la noche se acercaron unos pocos, dentro de los que estuvieron el presidente del partido -y también ministro de Vivienda- Raúl Lozano; el senador y dirigente principal del sector Columna Unidad y Lealtad, Guillermo Domenech; y la ministra Karina Rando. También se hicieron presentes por un rato los diputados Silvana Pérez Bonavita y Álvaro Perrone -ambos de Uruguay en Orden- y Martín Sodano -de Uruguay Primero.

Pero hubo una ausencia: el presidente del Espacio de los Pueblos Libres, Eduardo Radaelli. Algo que no debería llamar la atención, dado que en los últimos días hubo fuego cruzado entre él y Manini y Domenech, en una escalada de conflictos que vienen desde hace meses. El militar retirado no se asomó por la sede y esperó los resultados con su militancia. Y sobre la medianoche dijo a El País que son la “primera fuerza a nivel nacional” del partido -según los datos que manejaban- y que, incluso, en algunos departamentos tuvieron un “desempeño muy bueno”.

Radaelli se negó a dar los nombres que manejan para la vice. También se negó Domenech, pero aseguró que tiene “varios” porque “siempre hay que tener alternativas”.

El congreso de Cabildo Abierto, donde se definirá de manera oficial el vicepresidente -así como la junta nacional y el programa-, se realizará la primera semana de agosto en algún lugar que aún no se definió.

Que Radaelli dijera representar a la primera fuerza dentro del partido, ayer a la noche, no es un dato menor, ya que, básicamente (al no tener competencia por precandidatos), las elecciones sirvieron para medir peso entre los sectores.

Para entender la interna de Cabildo Abierto cabe recordar que en las elecciones de 2019 todos se presentaron bajo el sublema Movimiento Social Artiguista (MSA), el que ahora resolvieron no utilizar. Aunque había afinidades, no había mucha competencia y la energía se concentró en alzar la figura de Manini. Pero esto cambió, sobre todo por el fraccionamiento de la dirigencia en seis sectores nacionales. Y sobre todo por cuestionamientos a la conducción del partido por Radaelli; lo que después generó que Domenech acusara al Espacio de los Pueblos Libres -sin nombrarlo- de “querer cambiar el liderazgo del partido”.

Pero Manini siempre intenta poner paños fríos en la interna a la hora de hablar con la prensa, y ayer no fue la excepción. El líder del partido indicó que “puede haber alguna fricción” entre las agrupaciones de un “proceso electoral”, y que esto “no hay que magnificarlo”. Y repitió una frase que se convirtió en muletilla: “Cabildo es el partido más coherente de todos”.

Además de los sectores de Radaelli y Domenech, están Primero Uruguay, Uruguay en Orden y Encuentro Nacional Cristiano.

Foto: Estefanía Leal

Cabildo Abierto no cumplió su propia expectativa de alcanzar la misma cantidad de votos que en las elecciones internas de 2019. A pesar de los intentos al recorrer y recorrer -incluso el líder Manini Ríos tuvo una agenda atomizada- y la búsqueda de mover la militancia con la apertura de varias sedes, al cierre de esta edición tenía 16.480 voluntades en las urnas (con el 96,83% escrutado), cuando en las internas de 2019 alcanzó las 49.485.

Tal vez, previendo la poca concurrencia de los cabildantes a las urnas -e incluso ya con el dato de que se trató de la elección con menor porcentaje de concurrencia-, Manini comenzó su discurso sobre las 21:45 diciendo que su partido “no ha hecho inversión en propaganda” y recordando que definían “más que nada” el peso de cada agrupación.

También se refirió a un hecho histórico que sucedió el domingo: se dio el menor porcentaje de participación electoral, ya que no se alcanzó el 36% del padrón habilitado. Para Manini, esto tiene que “llamar a la reflexión”, dado que hay un “desencanto o un desentendimiento de muchísima gente con la política”. En ese sentido, indicó: “Pienso que eso no es bueno, (y) que los partidos que usualmente convocaban a la gente a la votación -por alguna razón u otra- ya no lo hacen de la misma manera”.