Redacción El País
Cabildo Abierto fracasó en su intento de hacer un plebiscito para cambiar el sistema de las tasas de interés en los préstamos, multas y tarifas. Después de meses de campaña —que coincidieron en parte con las nacionales—, recorridas por el país en un ómnibus ploteado con el slogan “Por una deuda justa y contra la usura” y una instancia de ratificación de firmas —que habilitó la Corte Electoral a pedido del partido— con poca convocatoria, se determinó que no habrá una consulta popular para cambiar aspectos clave del sistema financiero.

La instancia de ratificación de firma se realizó entre ayer y hoy después de que Cabildo Abierto no alcanzara el mínimo necesario de rúbricas válidas para habilitar la consulta popular. Las personas debían concurrir a ciertos puntos del país para convalidar su adhesión.

Para poder hacer la consulta popular, el partido precisaba 272.288 voluntades, que es el 10% del padrón electoral. En una primera instancia, ingresó 320.758 firmas, pero la Corte Electoral rechazó 75.624, de las cuales 45.610 fueron descartadas por no coincidir la rúbrica con la de la credencial. De estas, precisaban que se le reconozcan 27.154 para que se haga la convocatoria.

Para el proceso de ratificación de firmas, la Corte Electoral publicó el listado de personas a las que no le coincidía la firma en el papel con la de la credencial para que reafirme su voluntad en ciertos puntos del país. Hubo dos jornadas: la primera el domingo de 8:00 a 19:30, y la segunda el lunes 10:00 a 18:00.

Para las 16:00 de lunes, se habían presentando menos de 500 personas de las 27.154 necesarias.

La Corte Electoral se pronunciará el martes de manera oficial.

Para el presidente de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, es "lamentable que el sistema político se haya puesto del lado de los usureros" y los "haya dejado solos" en la campaña de recolección de firmas.

Por su parte, el diputado Álvaro Perrone comentó a El País que "duele" el no haber alcanzado el mínimo de firmas "porque hubo gente que le metió muchas horas" que "terminan quedando por el camino". En esa línea, el cabildante llamó "a no olvidar todo ese trabajo que se hizo".

"Está el dolor de tantas horas dejadas en la calle y no llegar", enfatizó.

También indicó que deberán hacer un "análisis" de cómo llegaron a no lograr aprobar la realización del plebiscito. Ante la consulta de qué se podría haber hecho diferente, respondió: "Un poco tiene que ver con la comunicación, además de que hubo algún tema con la papeleta por la fecha que se le puso".

La mención a la fecha refiere a que la papeleta tenía un efecto retroactivo de aprobarse en mayo por la redacción que se le dio.

Pero, además, el diputado consideró que "por ahí se tendría que haber organizado de otra manera" la campaña y que "hubo confianza en que las firmas se iban a alcanzar cuando no es tan sencillo". En ese sentido, recordó que le "cuesta a organizaciones grandes que tienen años en recolección de firmas".

El partido llegó solo a la campaña para la recolección de firmas pese a pedir el apoyo en el sistema político. En los meses anteriores a lanzarse no logró impulsar en el Parlamento una ley que generara cambios en el sistema financiero. Ahora, sin representación en el Senado y con solo dos diputados, deberá realizar arduas negociaciones para volver a impulsar un proyecto de ley.

Antes de que se conociera el resultado del impulso del plebiscito, Manini Ríos había adelantado a El País que, de no lograrlo, volverían a intentar por el Parlamento.

En esa línea, Perrone indicó que, en una primera instancia, comenzará a conversar con el resto de las bancadas para "intentar llevar" el tema a la negociación por la Ley de Presupuesto. Tienen el "antecedente", además, del plan de la reestructura de deuda que presentó en 2024 la banca privada con el Banco Central, añadió.