"Llegó la hora de que Uruguay tenga una presidenta mujer”. El lema resonó fuerte ayer en el Club Cordón, y todo indica que será una de las banderas de la campaña de Carolina Cosse, que finalmente “aceptó” ser precandidata presidencial por el Frente Amplio.

La intendenta de Montevideo hizo su entrada con una rosa roja en su mano, se dirigió rápidamente al estrado y confirmó de arranque lo que ya se sabía hace tiempo. “Quiero decirles que sí, que cuenten conmigo”, anunció la jefa comunal, que siempre sostuvo que fueron los 14 sectores que respaldan su postulación los que le piden que corra la carrera interna por la Presidencia.

Al inicio de un discurso que duró 23 minutos Cosse apeló a la emoción de la militancia. “Hoy más que nunca nuestro pueblo necesita respuestas”, dijo. Respuestas, apuntó, con hechos. Que apunten a las urgencias de hoy pero también a la “mañana siguiente y el porvenir”. Y en su opinión el único que puede darlas es el Frente Amplio.

Las críticas hacia la administración del presidente Luis Lacalle Pou ocuparon buena parte de su mensaje. “Este gobierno se preparó para sacar al Frente Amplio, pero no se preparó para gobernar”, señaló. Queda demostrado, expresó, en la “falta de rumbo” del presidente que, dijo, se ha vuelto “especialista” en pretextos. “Cuando no hay una respuesta para la gente, es culpa de los demás. Generalmente, del Antel Arena”, ironizó, en referencia a la obra emblemática que se asocia a sus gestión y que es señalada por el oficialismo por sobrecostos. El verdadero problema está en el “volante” que dirige el gobierno. Y ese rumbo “incierto e inestable”, aseguró, está llevando al país a “callejones sin salida”.

Cosse se refirió, sin nombrarlos, a varios escándalos que han afectado a esta administración en los últimos tiempos y que el Frente Amplio ha rechazado como lo relacionado con el excustodio Alejandro Astesiano, el narcotraficante Sebastián Marset y exsenador Gustavo Penadés. Cosse lo describió como un árbol “con muchos podridos”.

La precandidata advirtió que estos factores constituyen un “debilitamiento de las instituciones”, cuyas consecuencias, señaló, las pagará la población.

La intendenta de Montevideo afirmó que habrá que recuperar los “años de pérdida” que significó el gobierno de coalición, en diversos aspectos de la vida del país como salud, vivienda, y seguridad pública. “En los barrios la gente me empieza a hablar cada vez más de la seguridad”, dijo y agregó: “Me di cuenta que me lo plantean porque no tienen a quién planteárselo”.

Cosse también hizo referencia a la pobreza infantil como uno de los mayores desafíos que enfrenta el país y que tiene un correlato en amplios aspectos de la vida de la ciudadanía. “Hay una crisis de valores”, lamentó la intendenta.

Cosse optó allí por cambiar el eje con un pedido especial a sus militantes, con la mira puesta en los que en 2019 votaron al oficialismo. “Quiero pedirles que seamos firmes, pero que tengamos mucho respeto por quienes piensan diferente. Los que votaron a la coalición no son responsables de su fracaso”, manifestó.

Cosse envió un mensaje también a la interna frentista. Destacó el valor del programa de gobierno que será aprobado en diciembre por el Frente Amplio. También aprovechó para saludar a quienes serán sus rivales -Mario Bergara, Yamandú Orsi y Andrés Lima- que se encontraban en primera fila junto a otros dirigentes.

Y, si de tener una “mujer presidente” se trata, Cosse se preocupó en reivindicar su condición: es la única precandidata mujer del Frente Amplio y la única, junto a la nacionalista Laura Raffo, en tener aspiraciones serias de triunfo.

“Somos hijas de las mujeres que acompañaron a Artigas en el Éxodo”, dijo. “De las mujeres indígenas que peleaban en los ejércitos de la Banda Oriental”. También de las afrouruguayas y de las que hace un siglo reclamaban igualdad. “Soy nieta de una mujer rural”, contó. “La mayor de 12 hermanos y que no logró terminar la escuela, pero que todos los días me llevaba de la mano. Gracias a ella, llegué a la universidad”, indicó y agregó: “Gracias a ella, yo estoy hablando con ustedes acá”.

Cosse volvió al programa del Frente Amplio y dejó un aviso: “si vamos a tomarnos en serio la infancia y la pobreza infantil, vamos a tener que desplegar sistémicas políticas de igualdad. Porque cuando una mujer es asesinada o acosada por el solo hecho de ser mujer, hay una herida abierta en el cuerpo de la sociedad”.

Cosse también hizo mención a la necesidad de acciones contundentes que eliminen todo forma de discriminación hacia la mujer y lo remarcó con un ejemplo práctico. De lo contrario, sostuvo la intendenta capitalina, el país y la sociedad podrían estar impidiendo que “la niña, que un día será una señorita que encuentre la cura contra el cáncer, se desarrolle en nuestro país”. Se trata, insistió, en ir construyendo ciudadanía.

“Cuenten conmigo, compañeros y compañeras”, enfatizó Cosse, casi al final de su discurso y haciéndose espacio para especial pedido de disculpas hacia la militancia frenteamplista por la demora en, de cierta manera, oficializar que sería candidata cuando propios y extraños hace meses lo daban por hecho. “Quiero agradecerles la paciencia y la comprensión”, dijo. “Para mí era importante respetar también los tiempos del Frente Amplio”.

Ya despidiéndose, dejó un mensaje hacia 2024. “A prepararnos para gobernar”, dijo.

El discurso de Cosse estuvo precedido de la presentación de una producción audiovisual que intentó conectar los orígenes y la historia de Cosse con el propio periplo político de la precandidata. Comenzó con las legendarias imágenes de la campaña de 1971, siguió con el histórico discurso de Líber Seregni en 1984 en el balcón de Bulevar y Bulevar, para desembocar en el primer triunfo electoral de la izquierda en Montevideo, en 1989. El video pasó a allí a reflejar la llegada del Frente Amplio al gobierno en 2005, con Tabaré Vázquez y su “festejen uruguayos festejen, que la victoria es nuestra”. Allí empezó a aparecer Cosse, primero en su labor como presidente de Antel y luego como ministra de Industria, siempre en compañía de Vázquez o de su sucesor, José Mujica. Allí se destacaron una serie de obras emprendidas durante su gestión al frente de esos organismos, especialmente el Antel Arena.

Poco a poco, Cosse pasó a verse en solitario hasta llegar a su discurso en el balcón de la sede del Frente Amplio en 2020, tras el triunfo electoral que la puso a comandar la Intendencia de Montevideo. La producción finalizó con una frase, con el objetivo de recoger ese legado y proyectarlo hacia el futuro, ahora con Cosse como sucesora: “Hay que seguir”. Esas tres palabras quedaron fijas, varios, segundos, en negro sobre blanco mientras el audiovisual terminó.

En el acto hubo además un homenaje especial a Danilo Astori. La presentación de la precandidatura de Cosse estaba prevista para el viernes 10, pero se optó por diferirla siete días ante el fallecimiento del exvicepresidente y exministro de Economía, ocurrida precisamente ese día. También estaba previsto que fuera al aire libre, pero las advertencias de lluvias forzaron el cambio.