LA RECTA FINAL
El precandidato Daniel Martínez del Frente Amplio respondió a críticas sobre las políticas económicas.
Daniel Martínez, precandidato presidencial por el Frente Amplio, salió al cruce de las últimas críticas que han llegado desde diferentes sectores de la oposición sobre la situación económica del país, y las calificó como “ruido”.
“Hay mucho ruido, mucha interferencia eléctrica. Todos los días nos despertamos y pareciera que acá está todo horrible, que Uruguay está por desaparecer del mapa de horrible que está”, dijo ayer domingo al participar del Plenario Nacional del Nuevo Espacio, en la sede Central del Frente Amplio.
Martínez arribó al lugar a las 17.11, y tras las palabras de Pablo Ferreri, subsecretario de Economía y Finanzas, y del líder del Nuevo Espacio, Rafael Michelini, a las 17.42 tomó la palabra para dirigirse a los presentes que colmaron el lugar.
Además de remarcar que Uruguay ha mejorado en su estabilidad macroeconómica y ha crecido económicamente, hizo especial énfasis en que ha distribuido la riqueza “como nunca en su vida”. Al respecto, dijo que esto lo diferencia de los otros partidos políticos que ya estuvieron en el poder.
Martínez relativizó las críticas colocando como argumentos ciertos logros que alcanzó el gobierno frenteamplista en estos 14 años.
“Tener siempre en el centro de nuestros esfuerzos a la gente nos da algo muy importante que es la humildad y nos diferencia de otros que tuvieron épocas de bonanza infinitamente superiores a las que tuvo Uruguay en estos años de gobierno del Frente Amplio.
“Aparecen millones para crear candidatos”
Sobre las críticas recientes a cómo se distribuye la riqueza, Daniel Martínez dijo estar dispuesto a “bancarse algún cuestionamiento para luchar por los problemas sociales y diferencias de oportunidades” y criticó “la construcción de candidatos en base a “millones”. “No crecimos, desarrollamos y acumulamos fuerza gracias capacidades financieras de muchos millones que aparecen por ahí para crear candidatos, lo hicimos porque tenemos gente entre la gente”.
En aquellas épocas nos decían que hay que esperar a que creciera la torta para después repartirla. Y no me la contaron, yo era dirigente del Pit-Cnt y escuché a un par de ministros de Economía blancos y colorados, y un par de ministros de Trabajo blancos y colorados, y un par de directores de la OPP (Oficina de Planeamiento y Presupuesto) blancos y colorados, diciéndonos, ‘muchachos, no se apuren, hay que esperar que la torta crezca para repartirla”, recordó.
“Que hagan ruido, que traten de demostrar que está todo mal porque que esté todo mal parece ser que la mortalidad infantil haya caído a menos de la mitad de lo que era, que cuando había menos de un 18% de los uruguayos con acceso a una computadora en 2005, hoy lo tienen todos los uruguayos.
Está todo mal que botijas de Toscas de Caraguatá, un pueblito chiquitito sobre la ruta 26 del lado de Tacuarembó, muy cerca de Cerro Largo, o en Migues, en Tala, estén viajando a Estados Unidos a ser premiados por su excelencia en Ciencias y en Robótica.
No está todo mal cuando hemos logrado que los puntos de partidas empiecen a igualarse con hechos concretos, con políticas que permiten que hijos de peones de estancias, pequeños comerciantes, o de trabajadores de fábricas puedan acceder y tener los mismos sueños de botijas de Pocitos y Carrasco. Y no queremos desmerecer a nadie sino que todos tengan posibilidades”, dijo.
En el debe.
Pero no todo fueron buenas para el partido de gobierno. El precandidato del Frente Amplio se tomó los últimos minutos de su presentación para reconocer que no todo está resuelto y llamó a reflexionar sobre problemas que aún “duelen” como los “bolsones de pobreza”, la deserción educativa y la inseguridad.
“Nos tiene que doler en el alma que en la primera infancia (0 a 6 años) la pobreza no sea de menos de un 8% que es el nivel nacional, sino que sea de un 17,2%, y eso significa que no tendrán la misma posibilidad que los que están afuera de esa franja, o que en el sector de 6 años a 12 años esté en un 15%. Nos tiene que doler en el alma que exista un 57% de adolescentes que empiezan la enseñanza media y no la terminan. Y la seguridad o de lo que ahora que está pasando, que tras crear 300.000 puestos de trabajo, más de 40.000 se perdieron”, puntualizó.