Redacción El País
El secretario de la Presidencia y futuro precandidato del Partido Nacional, Álvaro Delgado, arremetió ayer contra el Frente Amplio por no desmarcarse del plebiscito que promueve el Pit-Cnt para anular la reforma jubilatoria, actitud que atribuyó a una “interna importante” de la coalición de izquierda.

En un acto de presentación de la agrupación blanca Compromiso Montevideo (del diputado Gerardo Amarilla), Delgado comenzó cuestionando a esa fuerza política por haberse “dedicado a oponerse” en lugar de presentar alternativas en los distintos temas de la gestión de Luis Lacalle Pou. Y entonces apuntó a su decisión -comunicada esta semana por su presidente, Fernando Pereira- de dar “libertad de acción” a los sectores y bases frenteamplistas en la campaña de recolección de firmas en que ya se está embarcando la central sindical para reformar la Constitución y dejar sin efecto la reforma previsional.

Eso, dijo Delgado, fue un “acto de irresponsabilidad política” por parte del Frente Amplio, en contraste con la “responsabilidad política” que a su criterio sí tuvo el gobierno al impulsar la ley que, entre otros cambios, fijó la edad mínima jubilatoria en 65 años para las próximas generaciones.

El jerarca apuntó, sobre todo, al hecho de que la consulta popular de la central obrera plantea, además de fijar en 60 la edad mínima de retiro y atar las jubilaciones más bajas a la evolución del salario mínimo, la eliminación de las AFAP, lo cual supone, para el oficialismo, la “expropiación” del ahorro de miles de uruguayos, hoy estimado en US$ 22 mil millones.

El Frente Amplio, dijo Delgado en este sentido, debería “plantarse como partido político que aspira a gobernar y decirle a la gente que la plata de los uruguayos no se toca, que es sagrada”.

Por lo demás, el dirigente blanco defendió al gobierno y declaró que “la mayoría de las cosas están mucho mejor que antes” de 2020.