Redacción El País
El diputado del Partido Nacional Juan Martín Rodríguez afirmó que es necesario que el Parlamento empiece a pensar en la construcción de una nueva casa para su funcionamiento y que el Palacio Legislativo quede únicamente para situaciones puntuales.
“Ha llegado la hora de que el Parlamento empiece a pensar de manera consciente y responsable el destino de los recursos necesarios para el debido cuidado de esta casa”, dijo precisamente en una sesión parlamentaria, que fue previa a la de la interpelación de este miércoles. Allí recordó que en 2025 “el Palacio Legislativo cumplirá 100 años y seguramente sea objeto de celebración” por lo que ese edificio “significa como patrimonio material e inmaterial” de Uruguay.
Y si bien consideró que “no es el momento”, en su opinión “el Parlamento tiene que empezar a pensar las próximas décadas de este edificio”. “No queremos ser testigos en dos, tres o cuatro décadas de una situación que implique el cierre de este edificio por la propia evolución histórica y la falta de mantenimiento”, señaló.
En ocasión de tratar el Presupuesto de la Cámara de @DiputadosUY, expresamos la necesidad que el Poder Legislativo inicie un proceso de estudio y evaluación para la construcción de un nuevo edificio, al cual se traslade el diario funcionamiento administrativo y parlamentario,… pic.twitter.com/aZFl4pL5Mv
— Juan M. Rodríguez 7️⃣1️⃣ (@_RodriguezJuan_) July 19, 2023
“En otros países los poderes legislativos han dejado estas casas para circunstancias históricas o puntuales, la asunción del presidente de la república o momentos que lo ameritan, y han construido otros edificios tal vez más funcionales para el debido funcionamiento de todos los días”, aseguró Rodríguez.
Para el diputado, este es “un compromiso que todos los actores del sistema político” deben “asumir”, porque “es una erogación costosa pero mucho más costoso sería que dentro de algunas décadas este palacio no pueda seguir funcionando”.
En una rueda de prensa que dio este miércoles, Rodríguez afirmó que hay “una serie de estudios arquitectónicos” que indican “la necesidad de adoptar medidas” para el “mantenimiento” del Parlamento, y que hay que tener en cuenta “que el palacio está ubicado en uno de los puntos de mayor tráfico de la ciudad”, lo que genera consecuencias “en la base estructural del edificio”.