INTERNA EN CABILDO ABIERTO

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"Y sin embargo se mueve”, escribió este juevesDaniel Salinasal darle un cierre a la carta abierta que redactó luego del fallo judicial que suspendió la vacunación a los niños, muy a su pesar.

Esa famosa frase de Galileo Galilei que recordó el ministro cabildante bien podría citarse también para describir la agitada vida interna que de a poco va surgiendo en Cabildo Abierto, un partido que pese a su corta vida e inexperiencia política ya ha sido decisivo en discusiones profundas de la coalición de gobierno. Es que los 11 votos que suman sus diputados y los tres de sus senadores pesan. Y porque por más divisiones internas que tenga, el grupo actuó casi siempre como bloque y porque forzó al oficialismo a dar debates sobre los más variados temas.

Ahora bien, está claro que esto no implica que algunos de sus dirigentes no busquen marcar su propio perfil, armar o consolidar sus incipientes agrupaciones y dejar traslucir ciertas críticas con la conducción oficial de un colectivo signado por el protagonismo de su líder Guido Manini Ríos, que con su impronta militar conduce Cabildo Abierto desde su génesis.

Entonces hoy surgen voces como la de la diputada Elsa Capillera, referente de la agrupación que lleva por nombre Purificación, y que no tiene pelos en la lengua para decir que ya son varios los “encontronazos” con Manini por “falta de información” relativa a decisiones importantes que toma el partido. ¿Cuáles? La designación, por ejemplo, de Alejandra de Mello -la viuda del exministro de Defensa del Frente Amplio Eleuterio Fenández Huidobro- en el Ministerio de Vivienda como asesora del Plan Juntos.

“A nosotros no nos informaron que alguien tan cercano al Frente Amplio había llegado a Cabildo. Nos enteramos de eso por la prensa y hubo muchos militantes radicales que me llamaron para preguntarme y les tuve que decir la verdad -dijo Capillera-: que a mí no me participan en nada y que ese es un reclamo que ya le hice a Manini”.

La referente de esta agrupación -que busca tener alcance nacional y para eso se encuentra recorriendo varios departamentos- aseguró que también reclama que la mesa política del partido sesiona con poca frecuencia.

El malestar de Capillera por la designación de De Mello en lugar de algún militante de su grupo se hizo público a mediados de mayo, cuando el semanario Búsqueda difundió un audio que la diputada había enviado a un grupo de WhatsApp en el que hizo una suerte de catarsis. “Soy (la referente de) la lista más votada de Montevideo y (Manini) le da un cargo a gente que no sabés de dónde viene”, dijo en aquel momento. Ahora, en diálogo El País, reveló que luego de este episodio tuvo una conversación con Manini en la que aprovechó para marcar su enojo. “Ahí le dije que enterarme de estas cosas por la prensa es algo que no me gusta”, dijo.

El malestar de Capillera, así como su aspiración de formar un sector de cara a 2024, también es común en otros dirigentes, por lo que no es un caso aislado.

Uno de ellos es el diputado Sebastián Cal, que en la interna cabildante transmitió el “disgusto” que tiene con Manini por permitir que ingresaran al partido “exmilitantes del Frente Amplio”. Fuentes de la bancada cabildante aseguraron que, en concreto, el legislador ha marcado su rechazo a que se designara como director departamental del INAU en Maldonado -departamento del diputado- a Eduardo Rodas, otro de pasado freneamplista como exjerarca del Mides. El distanciamiento de Cal por esta y otras situaciones del estilo lo ha llevado, incluso, a tener conversaciones con dirigentes del Partido Nacional que se interesaron por su futuro político.

Consultado al respecto por El País, el legislador respondió que al momento sigue en el partido, que “aún es muy pronto para tomar decisiones” y que no está dispuesto a “precipitarse”.

Como sea, y siempre y cuando su destino siga siendo cabildante, Cal es parte de un proyecto de agrupación nacional tramado junto con los diputados Álvaro Perrone y Silvana Pérez Bonavita. Además de una misma forma de pensar, tienen en común a Salinas como figura política predilecta, por lo que proyectan una agrupación con el ministro como referente. “Lo definitorio para nosotros -señaló Perrone- es saber qué pasará con Salinas en 2024”, algo que entre otras cosa dependerá de la suerte que tenga su candidatura a presidente la Organización Panamericana de la Salud. “Pero si está -agregó-, es alguien con el que tenemos mucha afinidad, sin dudas, así que tendríamos que conversar”, agregó.

Fuera de las críticas internas pero con proyecto propio aparece el diputado Eduardo Lust, que desde hace tiempo habla de su Movimiento Constitucional Ambientalista. Es, tal vez, el sector que tiene más avanzada su orgánica, pues ya proyecta para octubre su propio congreso en el que está previsto que participen unas 150 personas.

Todo esto, es mirado con relativa preocupación por parte de la cúpula de Cabildo. Relativa porque en el congreso realizado el 8 de mayo en Las Piedras (Canelones), el partido avaló justamente la conformación de agrupaciones nacionales, aunque todavía falta la redacción del estatuto con los requisitos formales. Pero en los hechos se dio luz verde a que el partido inicie esta etapa, en la que también está jugando un rol importante la ministra Moreira, que ha introducido cambios en el personal de confianza que la acompaña en la cartera, con miras a reforzar también su propio proyecto político.

Lo que sí inquieta es que esta intenciones de marcar perfiles no dejen secuelas o conspire contra la “armonía” que Manini pretende que siga existiendo en su colectividad.