Redacción El País
El gobierno encabezado por el presidente Luis Lacalle Pou dio ayer un paso más en su apoyo a la presión de la comunidad internacional para que sea atendida la crítica situación de Venezuela tras las elecciones del pasado domingo.

A las ya reiteradas declaraciones del mandatario remarcando que el gobierno de Nicolás Maduro -proclamado ganador por el chavismo con el 52% de los votos- “es una dictadura” se sumó el mensaje del canciller Omar Paganini quien, a través de su cuenta de la red social X, sostuvo que “para Uruguay, Edmundo González Urrutia obtuvo la mayoría”. Es que para el Poder Ejecutivo es claro que el candidato de la oposición venezolana superó en votos a Maduro y por ello ya no aguarda por una divulgación de actas -que a varios días de los comicios siguen sin presentarse- y pide que “la voluntad del pueblo sea respetada”. Minutos después, Lacalle Pou compartió la publicación.

Y a partir de este punto, los dirigentes nacionalistas comenzaron a respaldar la posición del presidente. El candidato a presidente de los blancos, Álvaro Delgado, publicó en su cuenta de X que para él no caben dudas “de que la voluntad del pueblo venezolano es que Edmundo González sea su presidente” y que “sus votos deben ser respetados”. “Nos enorgullece que nuestro país esté del lado correcto de la historia, que es siempre del lado de la democracia”, escribió también.

Mientras tanto, en el Directorio nacionalista el dirigente Santiago Gutiérrez planteó que el partido de gobierno debería pronunciarse en la misma línea que Lacalle Pou, y hasta el momento recibió el apoyo del resto de los integrantes de este órgano partidario.

Por su parte, en diálogo con El País, la vicepresidenta Beatriz Argimón dijo que “Uruguay ha transitado el camino que las democracias tienen que transitar”. “Frente a lo que ha sido un proceso electoral viciado desde el principio, y no habiéndose conocido los datos, salvo los que otorgó fehacientemente la oposición, sin lugar a dudas que el presidente electo en Venezuela es el candidato de la oposición”, remarcó la presidenta de la Asamblea General.

En redes sociales, algo más temprano en la jornada de ayer, se manifestaron otros nacionalistas en la misma dirección. “Del lado correcto de la historia”, destacó por ejemplo el senador Sebastián Da Silva al repostear el mensaje del canciller Paganini. Y en la misma red social se pronunció el exministro Javier García, quien subrayó que González Urrutia “ganó la elección”, que esa es “la única realidad” y que “mientras tanto, el dictador Maduro comenzó con lo que prometió: un baño de sangre”, en alusión a la docena de muertes que se han producido en el país caribeño producto de la represión policial a los manifestantes.

Al mismo tiempo, un grupo de 29 exjefes de Estado de España y Latinoamérica, entre los que se encuentra el expresidente Luis Alberto Lacalle Herrera, pidió a los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Colombia, Gustavo Petro, que reconozcan a González Urrutia como el presidente electo de Venezuela. Además, exigen a Lula y Petro que entiendan que, de admitirse este precedente, se fijará un ejemplo que afectará a todas las democracias de la región.

En filas opositoras, en cambio, los posicionamientos no son tan contundentes. Días atrás el Frente Amplio evitó respaldar una moción aprobada por el Senado en la que se catalogó de “fraude electoral” lo ocurrido en los comicios de Venezuela.

Tras los nuevos pronunciamientos del gobierno, dirigentes frentistas volvieron a marcar distancia con la postura del Poder Ejecutivo y ratificaron su alineamiento con la posición expresada por Brasil, Colombia y México, los principales países conducidos por la izquierda en América Latina.

“Coincidimos con lo que se viene actuando desde Brasil, Colombia y México”, afirmó a El País el senador José Carlos Mahía (Asamblea Uruguay). “Ese es el camino a seguir”, agregó.

Ese camino, expresado en las últimas horas, implica un llamado al gobierno de Maduro a que avance “de forma expedita” y dé a conocer públicamente los datos desglosados de las mesas de votación desplegadas en las elecciones del pasado domingo y que, según el actual gobernante, confirmaron nuevamente su triunfo.

Consultado, el senador adelantó que “es probable” que la coalición de izquierda rediscuta en las próximas horas su posicionamiento.

Al respecto, en la interna de la oposición se recordó que ya se han comenzando a cumplir puntos que la izquierda uruguaya había pautado para fijar una postura. El Frente Amplio esperaba el pronunciamiento del Centro Carter, que ya se produjo y que cuestionó las condiciones de libertad en las que transcurrieron los comicios. Resta un informe similar por parte del Panel de Expertos Electorales de Naciones Unidas que estuvieron presentes el día de la elección, y que el propio CNE divulgue la totalidad de las actas con los datos desglosados por mesa electoral.

Fuentes frentistas indicaron a El País que la última decisión de Cancillería representa un apartamiento de la tradicional política que ha tenido el país en materia de relaciones internacionales, afín a la “doctrina Jiménez de Aréchaga”, en referencia al célebre jurista. Según esta doctrina, Uruguay reconoce Estados, no gobiernos. “Toda decisión tiene sus implicancias”, se alertó.

Foto: AFP

El Directorio emitió una declaración en la que reconocen la victoria de González Urrutia “como el legítimo presidente electo de la República Bolivariana de Venezuela”.

Allí los nacionalistas reiteran su rechazo “al proceso dictatorial que encabeza Nicolás Maduro” y a la postura que ha adoptado la oposición en Uruguay: “No debe existir en nuestro país fuerza democrática que permanezca complaciente ni omisa frente al autoritarismo de cualquier signo en nuestra América Latina”.