EL Poder Ejecutivo envió al Parlamento el pedido de venia para acreditar al exintendente de Tacuarembó, Eber Da Rosa, como el nuevo embajador uruguayo ante Venezuela.
Para fundamentar la designación del exjefe comunal en esa sede diplomática, el pedido del gobierno hace referencia a la “capacidad y eficiencia” que Da Rosa ha puesto de manifiesto “ en las actividades desarrolladas a lo largo de su carrera profesional” lo que, a juicio del gobierno, constituye un “factor evidente de idoneidad” para las responsabilidades que le tocará asumir.
Su designación significará al retorno a Caracas del primer represente uruguayo del máximo nivel diplomático desde 2015, cuando el entonces embajador Carlos Pacheco regresó a Montevideo. Desde entonces la misión ante la República Bolivariana de Venezuela ha estado encabezada por encargados de negocios.
Da Rosa ya recibió el beneplácito del gobierno de Nicolás Maduro, aunque su nombramiento ya generó rispideces con el chavismo. A mediados de noviembre del año pasado y luego de conocerse su decisión el presidente Luis Lacalle Pou descartó que el hecho se fuera a traducir como un cambio en el posicionamiento del Poder Ejecutivo hacia Venezuela.
“Está claro que es una dictadura” señaló el presidente en rueda de prensa durante una visita a Dolores. “Yo no cambio, si no cambia Maduro yo no voy a cambiar de opinión”, precisó.
Su comentario generó la respuesta del número dos del gobierno venezolano, Diosdado Cabello, que se expresó a través de su programa de radio. “Uno no entiende a ese presidente”, dijo en referencia a Lacalle Pou. “No lo entienden, porque él designa a un embajador y después sale diciendo que Nicolás (Maduro) es un dictador.
"¿Hermano, cómo le explica eso a su gente?", cuestionó Cabello, que añadió: "Quién lo obliga a que designe embajador aquí en Venezuela. No hace falta", concluyó el jerarca chavista.