Celebrando los 100 Años de El País
Savater, Pagni y Cabot debatirán el miércoles en el centenario de El País.
En menos de lo que demora en cambiar la luz del semáforo, en promedio, en el mundo se mandan unos 342 mil tuits, se suben 120 horas de video a YouTube, se envían 204 millones de emails y 132 mil mensajes de Whatsapp. Y en ese "bombardeo" de información cabe de todo.
Este escenario, asociado a la irrupción tecnológica y que tiene sus consecuencias en las relaciones humanas, parece caminar de la mano de otro fenómeno: el descreimiento en la democracia. Según el Latinobarómetro, las redes sociales se han convertido para un tercio de la población de la región en su principal fuente de comunicación política, y ese corrimiento en la manera de informarse coincide con la pérdida de confianza en las instituciones públicas y en los partidos políticos —solo uno de cada cuatro uruguayos confía en ellos.
En este cambio de paradigma —o en tiempos de Internet para decirlo más sencillo— el periodismo viene siendo uno de los más cascoteados. "Que las noticias falsas, que lo leí en Facebook, que los periodistas hacen campaña, que…".
Pero tres hombres de medios, de esos que con sus investigaciones y artículos han provocado verdaderos sacudones, coinciden en que el "periodismo de calidad es la mejor respuesta a los desafíos" que supone la era de internet.
El filósofo español Fernando Savater y los periodistas argentinos, Carlos Pagni y Diego Cabot, se reunirán en Uruguay, el miércoles, para reflexionar sobre la importancia actual del periodismo. Lo harán en el marco de los festejos del centenario de El País. Eso sí: no será un encuentro de "periodismo para periodistas", sino que promete ser un espacio de debate sobre el mundo en que nos movemos —o el que nos mueve.
Una cita para dejar agendada
El Sofitel Casino Carrasco será la sede el miércoles para el debate entre Fernando Savater, Carlos Pagni y Diego Cabot. El encuentro, titulado "El periodismo de calidad como respuesta a los desafíos en la era de internet", comenzará a las 18:30 horas y estará moderado por el director de El País, Martín Aguirre.
La profesión.
Unos cuadernos, la confianza en las fuentes, la astucia de un periodista, el respaldo y la credibilidad de un medio pusieron a algunos de los empresarios y políticos argentinos más influyentes detrás de las rejas. O mejor dicho, develaron un entramado de corrupción para que luego la Justicia hiciera su trabajo.
El periodista Diego Cabot había recibido los cuadernos con las cifras de las coimas del kirchnerismo el 8 de enero. Se las había dado una fuente de confianza, un conocido de Oscar Centeno, el exchofer de Roberto Baratta (la mano derecha del ministro de Planificación Federal Julio De Vido desde donde se orquestó la corrupción).
Cabot se pasó investigando y uniendo cabos durante más de seis meses hasta que publicó las primeras líneas en el diario argentino La Nación. Pero ese periplo no estuvo exento de ansiedad. El propio periodista recordó que el mismo día en que recibió los cuadernos y los puso en una bolsa, le demoró "un montón" llegar hasta el diario porque "todo el tiempo frenaba" para leerlos.
El periodista pudo haber publicado las fotocopias de los originales al día siguiente, también pudo haber ido a la Justicia a hacer la denuncia. Pero prefirió el camino más largo y fiel: hacer periodismo de calidad. Eso, según coincidieron los expertos que analizaron el caso, "no lo suple las cadenas de las redes sociales, la investigación de un fiscal o una charla en televisión al estilo boliche".
Pagni, quien comparte redacción con Cabot, fue uno de los defensores acérrimos de esta investigación y del periodismo bien hecho. En una de sus columnas recordó que un ministro del presidente Mauricio Macri, a raíz de la crisis económica y la publicación de los cuadernos, le había dicho: "Si no hay pan, que haya circo". Y en lugar de callar, el periodismo lo puso en evidencia.
Pero la discusión entre el buen y mal periodismo no es nueva, ni nace con internet. El filósofo Savater había dicho hace once años que el periodismo "ha alcanzado una amplitud y magnitud inmensas, sobre todo con la incorporación de nuevas tecnologías, y dentro de ahí hay de todo.... como en las grandes obras de Shakespeare, hay de todo, confluyen la gloria y la hez".
Tres referentes en Montevideo.
Dicen que es la síntesis de Nietzsche, Cioran y Spinoza. Pero el español Fernando Savater tiene vida propia. Es uno de los filósofos influyentes y filosos.
Mucho antes de recibir los cuadernos sobre "los K", el periodista Diego Cabot dio clases de periodismo: en la universidad y en sus notas en La Nación.
El lector ante todo. En eso se basan las columnas del periodista Carlos Pagni en La Nación, quien suele demostrar que solo se casa con la verdad.