La Intendencia de Montevideo (IMM) remitió a la Junta Departamental un proyecto de decreto, en el que pide anuencia para aplicar un conjunto de medidas que impulsen un "modelo de desarrollo urbano sostenible" en la Ciudad Vieja, otorgándole a ese barrio el atributo de "área de promoción".
El objetivo no es otro que el planteado en el Programa Late Ciudad Vieja, presentado en febrero de este año, que supone "una inversión en espacio público y un esfuerzo en la recuperación de la vida urbana, social y barrial" de la zona. Allí se lo describe como un "barrio diverso, con fuerte impronta en vivienda cooperativa", en un territorio "apto en infraestructura y que ha llegado a sostener el triple de la población que hoy lo habita". Lo que busca es la radicación de nueva población con medidas que aseguren la inclusión, fundamentalmente a partir del acceso a viviendas cooperativas. Busca ser atractivo, sobre todo, para la población joven, aquella que "promueve la movilidad sustentable" y que "valora vivir en el casco histórico".
Estas nuevas medidas, que se presentarán este viernes, "fueron un compromiso de (Carolina) Cosse", le recordaron a El País fuentes de la administración, en referencia a la hoy candidata a vicepresidenta por el Frente Amplio y que, como intendenta, había sido la que había encabezado la presentación del Plan.
Buena parte son de carácter tributario y arquitectónico y prevén una serie de exoneraciones y excepciones con respecto a los inmuebles allí ubicados. Entre ellos la exoneración total de la Contribución Inmobiliaria y la Tasa General Departamental, por un plazo de 120 meses, a las "obras nuevas" y de "rehabilitación integral" que allí se realicen. Los mismos beneficios regirán para los casos de rehabilitación parcial, de fachada y de ampliación en los 18 meses siguientes a la aprobación del decreto.
Otra exoneración prevista, por 60 meses, será el Adicional Mercantil a todos los comercios que existan en la zona y a los nuevos que inicien actividades en los 18 meses siguientes a la vigencia del decreto. Para la IMM, la reactivación del barrio vuelve necesario estimular la actividad comercial e impulsar la actividad económica local, sobre todo en las calles peatonales. Un ejemplo claro, la recientemente refaccionada Colón.
Según los datos de la administración el 40% de los padrones de esa calle presentan "condiciones indeseadas para la vida urbana", con predios baldíos, vacíos o utilizados como depósito. "Esto implica una vida de vereda inexistente, con los problemas que esto conlleva en la interacción social, en la calidad ambiental y en la seguridad", se afirma. Así, se indica que los beneficios fiscales, además de ser un incentivo, se vuelven "instrumentos que favorecen la ordenación y el planeamiento del territorio". Se busca sobre todo fortalecer la actividad en las plantas bajas, atraer allí a población residente y local y mejorar la percepción de seguridad del barrio.
Si las construcciones proyectadas o concretadas cumplen los criterios del Modelo de Sustentabilidad Ambiental de Vivienda (Suamvi), las exoneraciones de contribución y tasa general se extenderán por 36 meses más.
El "área de promoción" abarcará la zona definida como "Ciudad Vieja" por el Digesto Departamental, tomando como límites exteriores las ramblas 25 de Agosto, Juan Monteverde, Francia y Gran Bretaña.
Una vez obtenido el aval de la intendencia, los interesados tendrán seis meses para presentar el permiso de construcción correspondiente. Obtenido ese permiso, dispondrán de ocho meses para el inicio de la obra.
Más altura en Reconquista y basta de estacionamientos
A los efectos, todos los proyectos comprendidos en la acera norte de la calle Reconquista, entre Guaraní y Bartolomé Mitre, podrán construir hasta 19 metros de altura. La altura vigente para esa zona hoy es de 16,50 metros. En los hechos, se tratará de la habilitación para construir un piso adicional habitable.
Al respecto, la transformación en curso de Reconquista, en el tramo que va de Treinta y Tres a Guaraní, incluye la creación de un parque urbano lineal. Con nueva nueva relación vereda-calzada, según la IMM "permite pensar" en esa calle como "una oportunidad para densificarse y recibir más población residente".
Por otra parte, todos estos proyectos, a excepción de los comprendidos en la zona denominada Portón de San Pedro, en la zona de la Diagonal Fabini y la Rambla Portuaria, quedarán eximidos de la exigencia de provisión de sitios de estacionamiento. Para el caso en que se construyan cooperativas de vivienda, también queda sin efecto la exigencia de construir sitios de estacionamiento siempre que las cooperativas no sobrepasen las 50 unidades.
La IMM afirma al respecto que los hogares de la Ciudad Vieja que poseen un vehículo no supera el 33% cuando en otras zonas, como Pocitos, alcanza el 60%. A su vez, en el barrio histórico hay hoy 43 garages y edificios de estacionamiento, con un total de 3.560 cocheras. Fuera de los horarios laborales, 3.210 de esos lugares quedan sin ocupar. " ¿Para qué construir más cocheras para residencia?", se pregunta la intendencia. Esa capacidad ociosa, se indica, podría dar lugar para estacionar a unas 8 mil viviendas. La no exigencia de nuevos sitios para futuras viviendas apunta, además, a "desincentivar" el uso del auto particular en el centro histórico.
Por otra parte, se indica que en este barrio las cocheras se resuelven, por lo general, en la planta baja, lo que genera que quede "ciega a la vida urbana". El plan considera que una mayor presencia de vecinos en las veredas y plantas bajas de los espacios urbanos genera ambientes más activos y vibrantes lo que, a su vez, deriva en una mejor seguridad, el desarrollo del comercio local y de la calidad de vida en general.