Redacción El País
La exfiscal Gabriel Fossati, hoy dirigente del Partido Nacional, aseguró que debido a las divulgaciones de chats en el marco del caso de Alejandro Astesiano, no recomienda a nadie entregar el teléfono celular para que forme parte de una pesquisa. En ese marco, afirmó que si se lo solicitaran a ella, rompería el aparato.

"Yo si fuera presidente de la República, con todo lo que está pasando, le aconsejo no dé su teléfono. A ustedes -dijo mirando a los periodistas- les aconsejo no den su teléfono. A partir de esto, si mañana me vienen a buscar mi teléfono, yo lo piso y lo rompo bien".

En diálogo con el programa Arriba Gente (Canal 10), Fossati dijo que quienes filtran las conversaciones "están arruinando vidas y nadie se hace responsable".

Además, aseguró que "es muy fácil investigar dónde estuvo la filtración", y pidió que se implemente un sistema para hacer la trazabilidad de todos los documentos que forman parte de los expedientes.

"Hay un sistema, en el mundo, de marcas cuando se entrega documentación. Puede ser que salga un poco de plata, pero si uno analiza lo que se asegura, que es la intimidad de los ciudadanos uruguayos, pagar un poquito de plata para entregar todas las copias con marcas es lo mínimo", expresó.

Foto: Juan Manuel Ramos/El País

Fossati, que hoy integra el Partido Nacional y adhiere a la precandidatura de Laura Raffo, estuvo encargada de la primera parte de la investigación del caso Astesiano, hasta que fue separada.

Durante su etapa de investigación, la fiscal decidió excluir los chats entre Astesiano y el presidente Luis Lacalle Pou alegando cuestiones de investidura del primer mandatario.

Sin embargo, en las últimas horas se conoció un intercambio entre Lacalle Pou y Astesiano producto de una captura de pantalla que el excustodio tenía en su teléfono y le envió a un jerarca policial.

Esa captura muestra que el presidente estaba en conocimiento de una investigación que organizó el antiguo encargado de la seguridad presidencial sobre un comercio de Ciudad Vieja al que acudió Marcelo Abdala, presidente del Pit-Cnt, el día que protagonizó, alcoholizado, un siniestro de tránsito.

La intención era saber si ese comercio era en realidad una boca de drogas, hipótesis que se descartó luego de la investigación.