En el Frente Amplio hay coincidencia de que al Poder Ejecutivo le va a costar despegarse, si es que puede, de la crisis desatada por las revelaciones de Carolina Ache en torno al caso de Sebastián Marset. Un proceso que, de aquí en más, centrará el accionar político de la oposición. Sin embargo, el camino es discutido y la posibilidad de realizar unamovilización “masiva y popular” que pueda dirigir y orientar el descontento, que, se afirma, tiene gran parte de la población ante un escándalo que puso a la defensiva al gobierno no, reúne muchos adeptos.

Por ello naufragó una moción que presentó el Partido Socialista que pretendía, de aquí a una semana, convocar a una gran movilización popular y anunciarla en forma inmediata. Los socialistas entienden que la corrupción política “campea” en América Latina, en países en donde la población concluye que “todos”, izquierda y derecha, “son iguales”. Y por ello, se requiere demostrar que en Uruguay eso no ocurre, a la vez que subrayan que el Frente Amplio es el que debe canalizar ese “descontento popular” que, a su entender, el caso Marset generó.

El planteo no encontró eco en la interna frentista. “No están dadas las condiciones para realizar una movilización masiva”, dijo este lunes Fernando Pereira en la sesión de la Mesa Política Nacional. El mismo convencimiento tiene la mayoría de los dirigentes, que dejaron en solitario al PS en su postura. La discusión se dio sin saber que, pocas horas después, el Pit-Cnt decidiría convocar a una “gran movilización ciudadana”, justamente, bajo la premisa de “defender la democracia y contra la corrupción”.

Por lo pronto, el Frente Amplio acordó el pasado domingo, tras la última reunión del Secretariado Ejecutivo, “salir a pintar muros” marcando su postura sobre el tema. También colocar pasacalles y pegotines. Todo lo que colabore con la idea de que el gobierno “tiene que explicar” los puntos oscuros que, a su entender, persisten en el proceso. “Tomamos la iniciativa, pero la fuerza política debe tomar esto con cautela y analizar los pasos a dar”, advirtió Pereira, según supo El País.” Si vamos a una movilización, debemos trabajarla con, por lo menos, tres semanas previas”, afirmó e insistió: “Hoy no estamos en condiciones de asegurar una buena participación”.

Con todo, el Frente Amplio no descarta la idea. A instancias del Partido Comunista, la fuerza política seguirá considerando el tema en las próximas semanas. Pereira remarcó que en el Frente Amplio hay un plan político, que incluye un cronograma de actividades ya definidas. Así, la movilización que pretende Pereira es que los legisladores se pongan a disposición para efectuar una gira por todo el país. La idea es realizar “pequeños actos” con militancia y en los que se pueda invitar a vecinos para informar del tema. Lo que se pretende es, otra vez, “colocar la idea” de que el gobierno sigue teniendo mucho que explicar, con la perspectiva de que esta “crisis política” va a durar en el tiempo.

En ese contexto, a partir de la próxima semana se harán reuniones abiertas en las distintas coordinadoras de Montevideo, las zonales de Canelones. El domingo 19 las coordinadoras L y M realizarán un acto en el que estarán presentes los cuatro precandidatos presidenciales. Por lo pronto, el Frente Amplio dice contar con el asesoramiento de varios abogados penalistas, que aseguraron que en el proceso existen por lo menos varios “hechos de apariencia delictiva” a marcar.

El principal: si el presidente Luis Lacalle Pou estaba al tanto de la “destrucción” de evidencia que, según el testimonio de la exsubsecretaria Ache ante Fiscalía, realizó el asesor presidencial Roberto Lafluf. La izquierda insistirá además en determinar si la propia entrega del pasaporte a Marset no resultó ilícita desde el punto de vista de su procedimiento.

El Frente Amplio sigue desde la semana pasada en “sesión permanente” y ayer intentó, sin éxito, promover la discusión del caso Marset como “asunto político” en ambas cámaras del Poder Legislativo. Los votos de la coalición de gobierno bloquearon el intento de la fuerza opositora y su planteó no fue analizado en el Parlamento.