La bancada de senadores del Frente Amplio (FA) presentó un proyecto de ley que sube de 16 a 18 años la edad mínima para contraer matrimonio bajo el argumento de que, “de acuerdo a los informes técnicos de los organismos que forman parte del Programa Mundial para Poner Fin al Matrimonio Infantil del Fondo de Población de las Naciones Unidas (ONU) y Unicef, el matrimonio infantil y uniones tempranas son tanto causa como consecuencia del embarazo temprano y de la violencia sexual y de género”. Además, alertan que “se vincula directamente con problemáticas como la deserción escolar, la mortalidad materna, la transmisión intergeneracional de la pobreza y en general la limitación a las oportunidades de vida de las niñas y adolescentes”.

Teniendo en cuenta que la Convención sobre los Derechos del Niño “entiende por niño todo ser humano menor de 18 años de edad”, los legisladores recuerdan en la exposición de motivos del proyecto que “en Uruguay, y de acuerdo a lo establecido en la Ley 19.075 del 2013, se establece que la edad mínima para contraer matrimonio es 16 años”, y “si bien esto fue un avance a la anterior legislación que determinaba que para las mujeres la edad mínima eran 12 años y para los varones 14 años, aún falta recorrer el camino para establecer que la edad mínima para contraer matrimonio es 18 años sin distinción de sexo y establecer la normativa de las excepciones”.

El Código Civil estipula hoy excepciones para el matrimonio sin límite de edad, mientras que la iniciativa presentada ayer por el FA en la comisión de Derechos Humanos y equidad de género las avala “en aquellos casos en los que un juez lo autorice por motivos fundados, y solo para personas mayores de 16 años”.

El senador Guillermo Domenech de Cabildo Abierto planteó en comisión que se trata de “un proyecto absurdo y antinatural”.

“De acuerdo a la evolución de nuestra sociedad, los jóvenes tienen cada vez más temprano relaciones sexuales. Eso determina que naturalmente en algún momento se puedan concebir nuevas vidas; tengo la convicción de que esos niños merecen crecer en un ambiente familiar, y el matrimonio es el embrión de la familia. Además, por otro lado, se podrá elevar la edad de matrimonio, pero ¿cómo se hace para impedir por ejemplo las relaciones sexuales? ¿Cómo se hace para impedir o prohibir el concubinato?”, se preguntó en diálogo con El País.

“Hay una campaña en contra del matrimonio, porque lo que se busca es evitar la formación de familia, preocupados por el incremento de la población mundial. Se pretenden imponer dogmas como el control de la natalidad y el cambio climático de una manera totalitaria; y entre los mecanismos para bajar la población mundial está la esterilización de la América Hispana y África, y todos los posibles obstáculos al matrimonio”, dijo. Además, criticó “una especie de dictadura mundialista que se pretende imponer en este y otros temas”. Y alertó: “Contra ella se va a levantar el pueblo de Uruguay”.