Redacción El País
La falta de acuerdo en el Partido Nacional para resolver quién sustituirá a Gustavo Penadés como presidente del Parlamento del Mercosur (Parlasur) le valió a la coalición de gobierno la obligación de tener que debatir con el Frente Amplio en presencia de otros colegas de los países del bloque en un hecho que representó el punto alto de una sesión plenaria plagada de formalidades en ese deliberativo regional.

Penadés, acusado hasta ahora por ocho personas que lo señalan por haber abusado de ellas siendo menores de edad, solicitó a principio de este mes licencia en el Senado por 30 días. Esa licencia se replicó en el Parlasur, en este caso por 90 días.

Los blancos no pudieron resolver entre los dos nombres que se manejan en esa fuerza política como sustituto: el senador Sergio Botana y el diputado Mario Colman. La situación motivó a que, para salir del paso, los blancos propusieran al diputado Ruben Bacigalupe como vicepresidente adhoc, en carácter provisorio.

La disyuntiva tenía consecuencias a nivel regional. El kirchnerismo argentino sostuvo en sala que el dilema uruguayo "alteraba el orden del día", por que desde esa bancada se propuso un cuarto intermedio hasta que la delegación local resolviera la situación. "Las diferencias entre los uruguayos las vamos a debatir internamente", cortó en seco el senador nacionalista Sergio Botana. "Los uruguayos tenemos la buena costumbre de resolver nuestras cuestiones en la interna. Es una tradición", apuntó.

A los argentinos también le respondió el diputado colorado Conrado Rodríguez, que les recordó que la designación del sustituto de Penadés es una prerrogativa exclusiva de la delegación uruguaya.

El diputado frenteamplista Nicolás Viera mostró la preocupación de su partido ante una discusión de la que, aseguró, resultó excluido. "Se ha pasado por encima del reglamento en todas sus formas" señaló el legislador del MPP, al preguntarse "en qué parte" del Reglamento del Parlasur existe la figura de "vicepresidente adhoc".

"La coalición de gobierno acaba de remover al senador Gustavo Penadés de la presidencia del Parlamento del Mercosur", apuntó Vía Twitter su correligionaria Bettiana Díaz. "El papelón que estamos haciendo como Uruguay no tiene antecedentes", subrayó.

Viera, en tanto, optó por ser más moderado. El diputado no habló de que los blancos "removieron" a Penadés" sino que se refirió a una "sustitución", aunque insistió en que se trató de una decisión "unilateral" sin consulta a la bancada del Frente Amplio.

Más allá de las diferencias internas, la falta de un suplente para Penadés tenía consecuencias directas en el funcionamiento del Parlasur. Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay tienen cada uno un vicepresidente. Uno de ellos, se alterna cada año como presidente del cuerpo, cargo que por este año le corresponde a Montevideo. La ausencia de un representante uruguayo significaba un parate total de la Mesa Directiva del organismo, que no puede sesionar sin contar con la presencia de todos los países fundadores del bloque.

Según el resultado de las últimas elecciones nacionales , ese cargo le corresponde a la coalición de gobierno. Y, por acuerdo interno, se reserva a una representante del Partido Nacional.

A la vez que se procesaba el debate en torno a la situación de la vicepresidencia uruguaya, el Parlasur tomaba noticia de la renuncia del diputado uruguayo Gerardo Núñez. El legislador frenteamplista dejó su banca en la Cámara de Representantes a mediados de abril en acuerdo con el sector al que pertenece, el Partido Comunista.

Núñez dejó su banca pese que a la Justicia había archivado una acusación en su contra que había presentado su expareja por violencia de género. Al renunciar, automáticamente dejó de ser parte del Parlasur.

El Parlasur volvió a postergar la definición sobre la situación de otro de sus integrantes, el argentino Fabián "Pepín" Rodríguez Simón. El exasesor del expresidente Mauricio Macri vive en Uruguay desde 2020 y está considerado prófugo por la Justicia de su país, que pidió su extradición al tener pendiente un proceso por presuntos delitos de extorsión hacia los accionistas del Grupo Indalo, Cristóbal López y Fabián de Sousa, operadores de juego en la ciudad de Buenos Aires y propietarios de una red de medios entre los que se contaban C5N, Radio 10 y Ámbito Financiero.

Al igual que sucedió en otras ocasiones, no hubo quórum para tratarlo. Más allá de que existen dos "bibliotecas" en torno a si la condición de parlamentario del Mercosur otorga o no inmunidad, la expulsión de Rodríguez Simón viene siendo promovida por integrantes del kirchnerismo argentino. Lo cierto es que para hacerlo se necesita el voto afirmativo de 77 parlamentarios. En la sesión de este lunes, no había ni siquiera ese número de parlamentarios presentes.

En marzo de este año la Suprema Corte de Justicia rechazó el pedido de refugio de Rodríguez Simón, que ahora enfrenta el trámite de extradición en su contra llegado desde Buenos Aires.