Redacción El País
Fernando Pereira ratificó este jueves sus dichos acerca de la posible intervención de su teléfono celular y dijo que si Interpol lo llamara a raíz de la denuncia que hizo un diputado del Partido Nacional, no tendría problema en comparecer.
En diálogo con El País, el presidente del Frente Amplio señaló que dio "bastantes elementos" como para que "cualquier uruguayo tenga dudas sobre su seguridad” y repasó la denuncia de espionaje a los senadores Charles Carrera y Mario Bergara -por el que fue formalizado el gerente de Vertical Skies-, la investigación por utilización por parte de dos policías del sistema denominado El Guardián y el presunto seguimiento a los denunciantes de Gustavo Penadés señalado por la fiscal Alicia Ghione, entre otros.
“Ni siquiera dije que lo tengo pinchado, dije que tengo derecho a pensar que lo podría tener”, expresó Pereira. “Usaron El Guardián cuando el ministro (Luis Alberto Heber) dijo que era imposible usar; siguieron a los chiquilines que denunciaron abusos sexuales del exsenador Penadés; le pararon un patrullero a contramano a la denunciante Romina Papasso; hicieron actuar gente de Inteligencia, al exdirector del Comcar (Carlos Taroco), en la creación de un flujograma; siguieron a dos senadores de la República. ¿Cómo es que no tengo elementos para pensar que puedo tener problemas de interceptación?”, preguntó.
En este contexto, dijo que alguien del Ministerio del Interior ya le tendría que haber garantizado que no tiene su teléfono intervenido. “¿Se precisa una denuncia para que te digan eso? ¿De verdad la burocracia es así?”, se preguntó ante la denuncia que planteó en Interpol el diputado del Partido Nacional Diego Echeverría. De todas formas, defendió el derecho del diputado a radicar una denuncia. “Y si Interpol me llama, iré. ¿Qué problema voy a tener? Problema es el teléfono de (Alejandro) Astesiano, no el mio”.
En ese sentido, cargó contra los dirigentes del Partido Nacional que se molestaron por las declaraciones que brindó a Doble Click (FM Del Sol), donde insinuó que podría tener el teléfono intervenido. “El enojo que tienen es irracional”, dijo y agregó: “El tema importante que tuvimos en el Senado es un monstruo que abusó como mínimo de 10 menores”.
“¿Cuál es el tema importante? ¿Una pelea mía con Pablo Iturralde (el presidente del directorio blanco)? No, no tiene ningún valor”, dijo y agregó que “lo que tiene valor es que hubo niños abusados durante décadas por un senador y pasó por debajo del radar de todos, y sobre todo de su partido”.
“El hecho es que tuvimos un senador que abusó de menores, no se sabe de cuántos. Diez se animaron a denunciar, pero imagínese lo difícil que es para un menor denunciar a un poderoso si luego lo van a seguir, lo van a hostigar, le van a parar un patrullero en contra, el presidente (Luis Lacalle Pou) y el ministro van a decir que le creen al victimario. Varios senadores de la República al principio del juicio dijeron que le creían al victimario. Ellos le tienen que pedir disculpas a la sociedad, no yo”, sentenció.
Pereira recibió respaldos y críticas
El presidente del Frente Amplio fue respaldado por algunos de sus correligionarios, como el senador Carrera, quien escribió en su cuenta de X (antes Twitter) que “no parece lógico que al oficialismo le sorprenda” la declaración de Pereira, y que “la situación es seria y la calidad democrática de nuestro país se ha deteriorado gravemente en los últimos años”.
“No lo ve quien no quiere verlo, o quien decide, ‘convenientemente’, hacerse el distraído”, lanzó.
Pero Pereira también ha recibido una serie de críticas de parte de dirigentes blancos como la del senador Sebastián Da Silva, quien expresó: “De tanto dar manija se ve que la manija le pinchó la cabeza”. Y agregó que “ es una barbaridad” que “se autoperciba con el teléfono pinchado”.
También Nicolás Martinelli, director general del Ministerio del Interior, escribió en su cuenta de X (antes Twitter) que “si no hay una orden de un juez y no cometió ningún ilícito, Pereira debería estar tranquilo”.