Propuesta que genera polémica
Ministro Rossi no descarta que el proyecto se pueda implementar en otra zona.
Pese a que diputados del Frente Amplio no estuvieron dispuestos a brindar sus votos para aprobar el proyecto portuario de Buquebus en el dique Mauá, en el gobierno la ilusión de que la ciudad de Montevideo tenga, al igual que Buenos Aires, su propia terminal de pasajeros, aún no se pierde.
El ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, dijo ayer en el almuerzo de la Asociación de Dirigentes de Marketing (ADM) que "el proyecto era bueno e importante para Montevideo", sin embargo, señaló que "no es el único lugar", para instalar eventualmente propuesta portuaria de la empresa Buquebus.
"La observación me pareció entender, era sobre si correspondía o no la enajenación de algunos padrones que no eran costeros porque independientemente de la ubicación que tuviera hoy, en el futuro iba a ser sustituido por un relleno que iba a constituir la nueva costa, además de las obras del muelle y las escolleras de protección", explicó el secretario de Estado al ser consultado por alguien que estaba presenciando la disertación. Para Rossi, se trataba de "un proyecto importante para Montevideo. Más allá de esos desencuentros, si se encuentra la forma de superar la resistencia de elegir y construir una nueva cosa para Montevideo, por supuesto que todos vamos a estar", apuntó.
Ayer, el propietario de Buquebus, Juan Carlos López Mena estuvo presente en el almuerzo. Al final de la presentación, mientras el ministro saludaba a uno de los asistentes, el empresario argentino subió al estrado y tras esperarlo varios segundos, accedió a una breve charla con el secretario de Estado. López Mena fue consultado por El País sobre si existen nuevas intenciones empresariales de concretar el proyecto en otro sitio, evitó realizar comentarios al respecto.
Rossi señaló que el predio del dique Mauá "no es el único lugar, pero es un lugar importante y a mi entender, era un lugar apto. Puede haber otros lugares, los estamos mirando", apuntó.
El gobierno aprobó en 2016 el proyecto portuario que incluye un moderno hotel, una construcción vidriada con forma de pirámide y numerosos estacionamientos. También incorpora el proyecto del "Museo del Tiempo", que no se ha podido concretar hasta el momento por falta de recursos. La nueva terminal marítima supondría el abandono por parte de la empresa de la vieja terminal portuaria, regenteada por la Administración Nacional de Puertos (ANP).
En el contacto con los medios de prensa, el ministro Rossi apuntó: "Otros lugares a estudio, no tengan duda que hay". Añadió que está planteada "la posibilidad de insistir con ese lugar en otras condiciones que resulten más favorable, yo creo que el proyecto es necesario y bueno por lo tanto, no es un problema de sacarme las ganas yo personalmente, es un problema de hacer lo que conviene a Montevideo".
Al ser consultado sobre si uno de los sitios que se analiza para instalar el proyecto es en Punta Carretas, Rossi contestó: "Bueno, vamos a esperar, si está a estudio, es porque no está decidido". La propuesta para el dique Mauá "no está descartada, ni está incorporada", enfatizó el ministro.
El proyecto no solo no contó con el apoyo político necesario en el propio oficialismo, sino que fue rechazado por varios vecinos.
El colectivo autodenominado "Por la Rambla Sur", integrado entre otros por el exdirector de Planificación Urbana de la Intendencia de Montevideo, Juan Pedro Urruzola, consideró que el proyecto "preocupa hondamente por su naturaleza y sus condiciones: se trata de permitir, en beneficio de un emprendimiento privado, la venta de bienes públicos de uso ciudadano, con calificación patrimonial y alto valor estratégico".
El proyecto cuenta con el respaldo del gobierno, pero no así de varios legisladores del Frente Amplio, que no lo acompañaron.