A falta de poco más de dos meses para que asuma el gobierno electo encabezado por Yamandú Orsi, abundan las especulaciones sobre cuál será su posicionamiento frente a los temas más relevantes de la agenda, y entre ellos la seguridad es de los que se lleva gran parte de las miradas. En este sentido, autoridades en ejercicio dijeron a El País que su expectativa es que se mantenga "cierta continuidad" con respecto a medidas que se han llevado adelante durante la actual gestión.
Desde su designación como ministro del Interior en noviembre de 2023, tras la renuncia del entonces jerarca Luis Alberto Heber, Nicolás Martinelli ha insistido en la "prevención y represión" del delito bajo la denominación de "enfoque dual".
"Es algo que parte de evidencia y de la academia (...) no solo es mano dura, aunque la represión claro que es una de las claves", dijo a los pocos meses de asumir en una entrevista con El País.
A partir de ese enfoque es que durante esta gestión se tomaron diversas medidas, que abarcaron desde la implementación de tecnología hasta la incorporación de ONG en un plan con el objetivo de bajar el nivel de violencia en los barrios.
En este marco fue que en 2023 se llevó adelante una mesa interpartidaria, liderada por el coordinador de Estrategia de Seguridad Integral y Preventiva de la cartera, Diego Sanjurjo, recientemente invitado por el futuro ministro, Carlos Negro, para formar parte de su equipo —ofrecimiento que en estas horas se encuentra analizando, y que cuenta con el visto bueno del futuro senador colorado Robert Silva, referente del sector al que pertenece Sanjurjo.
De esa instancia salieron 16 medidas, de las cuales 15 ya fueron puestas en marcha. “En algunas nosotros estamos de acuerdo y en otras no tanto”, dijo el jueves en rueda de prensa el secretario de Presidencia de Orsi, Alejandro Sánchez.
Consultadas fuentes del gobierno electo sobre medidas implementadas por la actual gestión, dijeron a El País que “es necesario sentarse a analizar” y que “hasta el momento no se tomaron resoluciones sobre nada en particular”.
"Cambiar todo sería un riesgo"
“No creo que vuelvan para atrás en todo lo que hicimos porque hay muchas cosas que vienen saliendo bien. Sería arrancar de nuevo en cero”, dijo Martinelli a El País tras ser consultado sobre la postura que considera que puede tomar la próxima gestión en materia de seguridad.
“Cambiar todo, al menos durante los primeros meses, sería un riesgo. Si los delitos vuelven a dispararse se vuelve difícil de revertir porque es más complicado corregir ante la subida”, agregó y señaló que “los resultados no solo dependen de un gobierno. “Por eso insisto con que deben ser políticas de Estado. Apuesto a la madurez política”, concluyó el jerarca.
Por su parte, Diego Sanjurjo dijo a El País que “hay que dejar de hacer cambios radicales”. “Hay que entender que la seguridad involucra tanto la represión como la prevención, y eso no lo hace un solo gobierno”, dijo reafirmando el concepto de enfoque dual.
“Hay políticas, como el libro blanco del sistema penitenciario, que es necesario que el Frente Amplio las abrace y las baje a tierra” dijo y señaló que “las medidas no tienen color político”. “Las cosas buenas que hizo el Frente nosotros las mantuvimos y reforzamos, como el caso del PADO o de la Policía Comunitaria Orientada a Problemas (PCOP), que era solo en Montevideo y la llevamos a nivel nacional”, finalizó.
Según Sanjurjo, el tema prioritario a abordar por el próximo gobierno debe ser el de las cárceles, debido a que las malas condiciones del sistema penitenciario “son una de las causas principales del delito”. También mencionó la necesidad de mejorar la coordinación entre organismos, principalmente en el área vinculada a la investigación de lavado de activos.
Entre las medidas destacadas por el propio Martinelli tras ser consultado por El País, hizo énfasis en la reapertura del Departamento de Homicidios, permitiendo que cada fiscal de esa materia tuviera un equipo propio con el que trabajar.
También hizo mención al libro blanco del sistema penitenciario, el programa barrios sin violencia, e incorporaciones en tecnología como el sistema de detección de disparos, los escáneres 3D o las cámaras con Inteligencia Artificial.
Invitación a Sanjurjo
Otro de los indicadores de continuidad en algunos métodos de trabajo, es la reunión que el futuro ministro del Interior y el actual coordinador de Estrategia de Seguridad Integral y Preventiva de la cartera mantuvieron el pasado jueves.
En el encuentro, Negro le ofreció a Sanjurjo continuar con su rol dentro del Ministerio, lo que está siendo evaluado por el dirigente del Partido Colorado, y todavía no se encuentra confirmado.
Tras la reunión, Robert Silva, referente del sector Crece —al que pertenece Sanjurjo— habló con él y dio el visto bueno, según contó en conversación con El País.
Por su parte, el senador electo y actual secretario general del partido, Andrés Ojeda, dijo este viernes en rueda de prensa que el hecho de "estén pensando en Diego (Sanjurjo) es una buena señal", y agradeció que lo haya llamado para informarle sobre la situación luego de haber tenido la reunión. "Sin ninguna duda que tiene aportes para hacer al país", concluyó.
Postura del futuro ministro
En sus declaraciones públicas desde que fue designado ministro del Interior para el próximo periodo, Carlos Negro apuntó que a su juicio hay “tres grandes ejes de problemas”. Estos son: la situación de las cárceles, la gran proliferación de armas y la criminalidad organizada.
Pero ¿cómo buscarán combatirlo? ¿qué medidas implementadas por este gobierno tendrán continuidad? Son preguntas cuya respuesta todavía no están definidas —habrá que esperar al primero de marzo para saberlo— porque involucran temáticas y experiencias que están aún bajo análisis, Pero, sin embargo, sí hay un eje de gestión que Negro confirmó que seguirá operando: el trabajo la Brigada de Homicidios que destacó Martinelli y que fue instalada en setiembre de 2023 . Ya desde su tiempo como fiscal de Homicidios, Negro destacó cómo la apertura de esta brigada había mejorado los índices de aclaración de los asesinatos en su fiscalía.
Esta nueva brigada buscó que los fiscales de homicidios trabajaran siempre con el mismo grupo de policías especializados.
La brigada “va a seguir actuando y va a potenciar su actividad porque ha tenido resultados tangibles, por lo tanto, las políticas que han dado resultados son políticas que hay que tomar y profundizar”, dijo el futuro ministro a pocos días de haber sido designado.
En esa oportunidad, Negro también mencionó que el libro blanco para las cárceles formulado a pedido del actual Ministerio del Interior va a ser tomando en cuenta por la administración siguiente para así "diseñar con estos insumos las futuras políticas públicas”.
Una medida implementada por este gobierno y que su continuidad está bajo análisis es el modelo de interruptores de violencia (Cure Violence) por el que varias ONG funcionan como mediadoras en conflictos barriales para evitar homicidios. Desde el futuro gobierno indicaron que analizarán sus resultados para resolver si continuará.
Hace casi un año, en diciembre de 2023, Negro se mostró esperanzado con este proyecto. “Desde las fiscalías de Homicidios en particular, lo vimos con muy buenos ojos porque es un cambio en la perspectiva para abordar estos problemas”, dijo en una entrevista en Canal 10. Lamentó, en ese caso, que el proyecto fuera a tener “menos rédito electoral, porque es muy difícil medir lo que no ocurre”.
Llamado a jerarcas
Además del ofrecimiento a Diego Sanjurjo, jerarcas policiales de la actual gestión han recibido llamados, según confirmó a la prensa el ministro Nicolás Martinelli.
“Hay varias personas que creo que van a continuar porque se están haciendo las cosas bien”, dijo y mencionó al actual jefe de Canelones, Víctor Trezza, como uno de los que podría seguir.
El senador electo por el FA, Felipe Carballo, dijo hace algunos meses que le gustaría tener en sus filas al actual director de la Policía Nacional, José Azambuya.
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