COLETAZOS DEL PARO GENERAL
Unos 300 no pudieron abrir sus puertas ayer, en el marco del paro del Pit-Cnt
La consigna fue la de un paro general de 24 horas “con el pueblo, en contra de la desigualdad”. El Pit-Cnt convocó a esta medida ayer e hizo una serie de reclamos al Poder Ejecutivo. No obstante, más allá de las reivindicaciones de la central obrera, el gobierno puso el foco en la atención de los comedores escolares, porque la Federación Uruguaya de Magisterio (FUM) resolvió no disponer más guardias gremiales los días de paro, lo que implica no entregar platos de comida a los alumnos que forman parte del Programa de Alimentación Escolar.
Sin embargo, “la enorme mayoría” de los comedores funcionó con normalidad en la jornada de ayer, después de que la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) tomara medidas para atender la alimentación de los niños y jóvenes, según dijo el presidente del Consejo Directivo Central (Codicen), Robert Silva.
Basándose en datos de anteriores jornadas de paro, la administración estimó que unos 300 comedores no abrieron sus puertas ayer. De todos modos, la ANEP prevé divulgar el dato exacto en los próximos días, después de hacer un relevamiento en todos los centros educativos del país.
Silva explicó en rueda de prensa que en Uruguay hay 2.200 comedores en escuelas públicas. Además, indicó que más de 175 liceos y centros de la Universidad del Trabajo (UTU) dependen del programa de alimentación de Primaria.
Silva dijo que la decisión de los sindicatos docentes de no dejar guardias gremiales “es una triste noticia para muchísimos niños”, al tiempo que destacó las “medidas paliativas” que adoptó el gobierno para no desatender los comedores.
En esta oportunidad, Primaria habilitó que los centros educativos compraran menús de emergencia y recibieran -en aquellos comedores que estuvieran abiertos- a alumnos de otras escuelas.
De todos modos, el gobierno estudia otras respuestas ante el probable escenario de que los maestros no hagan más guardias gremiales, y también ante la posibilidad de que en medio del conflicto en la educación por el rechazo a la reforma, haya más paros en los próximos días o semanas.
Una de ellas la adelantó el ministro de Defensa, Javier García, en la red social Twitter: que las Fuerzas Armadas se encarguen de la elaboración y la entrega de viandas ante una medida gremial. Silva confirmó en rueda de prensa que esta podría ser una de las “alianzas estratégicas” que el Poder Ejecutivo implemente.
La atención de los comedores escolares en los días de paro se convirtió en un tema de discusión recurrente entre los sindicatos docentes y las autoridades de este Codicen, encabezado por Silva. Los gremios consideran que la atención de los comedores es responsabilidad de las autoridades y, como argumento, señalan que hay una cantidad de días del año que por distintas razones los niños no reciben una vianda, como cuando hay feriados nacionales. En línea con este planteo, como se había resuelto en anteriores oportunidades, ayer no se dispuso de una guardia gremial.
Además de que consideran que la responsabilidad última es del gobierno nacional, los sindicatos docentes argumentan que la disposición de guardias gremiales implicaría limitar los derechos sindicales de trabajadores. El Pit-Cnt había resuelto que la decisión al respecto fuera adoptada por la Federación Uruguaya de Magisterio - Trabajadores de la Educación Primaria (Fum-Tep), y el sábado pasado, en una votación dividida, se decantó por la opción de no establecer guardias en los comedores.
Varios jerarcas se mostraron en contra de esta medida. Por ejemplo, el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, tachó la decisión de “lamentable” y cuestionó que los docentes la “justificaran como si fuera una gran medida”. “Debería generarles un poquito de pudor”, dijo a El País.
En la misma línea se expresó la vicepresidenta Beatriz Argimón, que en rueda de prensa expresó “sorpresa” por la decisión del gremio, por una determinación que, a su juicio, “es difícil de entender”. La jerarca agregó que esto “marca un antes y un después” en el relacionamiento con el gobierno y que debe llamar la atención, “especialmente” porque fue adoptada por “sectores que reivindican la alimentación” de escolares en contexto crítico.
Repercusiones
El Pit-Cnt hace una evaluación positiva del paro, definido por el Secretariado Ejecutivo de la central sindical a mediados de agosto. El presidente Marcelo Abdala afirmó en rueda de prensa que “mucho más de un millón” se sumó ayer a la medida, incluso trabajadores que no están vinculados al movimiento sindical. Si bien no hay un porcentaje estimado de cuántas personas se plegaron, la secretaria general del Pit-Cnt, Elbia Pereira, dijo a El País que “la adhesión fue muy importante”.
El gobierno, en tanto, descartó que el paro tuviera tanto respaldo como estima el Pit-Cnt. Mieres señaló que el cálculo de Abdala es “absolutamente antojadizo”. Por el contrario, el gobierno estima que en esta oportunidad se adhirió la misma cantidad de personas que en los otros paros generales convocados por el Pit-Cnt en los últimos años. “No hay ningún elemento que me permita decir que este paro es diferente a otros”, apuntó el secretario de Estado.
De acuerdo a un relevamiento de la consultora Equipos, en el pasado paro general de setiembre de 2021, 72% de los trabajadores fue a trabajar.
El próximo martes, el Secretariado Ejecutivo del Pit-Cnt hará un balance y espera que el Poder Ejecutivo responda a los reclamos. No se descarta adoptar más medidas, pero estarán supeditadas a cómo evolucione el diálogo.
“Esperamos que haya una reacción. El pueblo se está movilizando y del otro lado quienes tienen la responsabilidad tienen sus oídos tapados. Podemos ponernos de acuerdo o no, podrá haber condiciones o no, pero esperamos cambios. No es el Pit-Cnt el que los está pidiendo, es la gente”, subrayó Pereira.
Mieres, por su parte, descartó que el gobierno responda de inmediato: “Fue una plataforma política para cuestionar al gobierno, nada más”, expresó.
Prevén movilizaciones
La secretaria general del Pit-Cnt, Elbia Pereira, contó a El País que prevén manifestarse y movilizarse en contra del proyecto de ley para reformar la negociación colectiva, que a partir de octubre se discutirá en el plenario de la Cámara de Diputados. También el Frente Amplio se opone a estos cambios propuestos por el Poder Ejecutivo, que ya se discutieron en la Comisión de Legislación del Trabajo y Seguridad Social de la Cámara de Representantes.
El gobierno sostiene que la base del proyecto son las sugerencias de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y que el fallecido expresidente Tabaré Vázquez, en 2019, remitió al Parlamento un proyecto de ley que incluía la gran mayoría de los planteos.
La proclama y las críticas del gobierno por el “palo en la rueda”
La proclama del paro incluyó varios temas y fue acompañada por concentraciones en 16 departamentos. El Pit-Cnt reclamó al Poder Ejecutivo más puestos laborales, que aumente el salario real y el salario mínimo nacional, que incremente las jubilaciones y las pensiones, y que implemente una “reforma de la seguridad social integral, solidaria y digna”.
La central sindical se manifestó “en defensa” de la educación pública y de las empresas estatales. Además, pidió más presupuesto para la Universidad de la República e inversión en vivienda. En la proclama también solicitó al gobierno que “relance” el Sistema Nacional de Cuidados y que “atienda la emergencia carcelaria y el aumento de la violencia social”.
El secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, cuestionó las verdaderas motivaciones del sindicato. “Aunque pongan el palo en la rueda, la rueda va a seguir girando”, escribió en la red social Twitter, donde señaló que el paro perjudicó a quienes “quieren estudiar y trabajar”.