El Poder Ejecutivo mira en dos frentes las horas finales para conocer la suerte que correrá en el Parlamento el proyecto de reformadel sistema previsional. Por un lado, se mantiene en vilo por la negativa de uno de sus socios a votar la iniciativa si no se contempla un reclamo considerado imposible de cumplir. Por el otro, seguir rebatiendo las afirmaciones de la oposición políticay sindical de que la reforma será perjudicial para la gran mayoría de los trabajadores que deberían jubilarse bajo el nuevo sistema.
"Ratificamos con total convicción que, a los 65 años, el nuevo régimen va a suponer la existencia de prestaciones jubilatorias mejores o iguales", aseguró el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, al comparecer el miércolespasado ante la comisión especial que analiza el tema en la Cámara de Diputados. Se trata de una realidad, insistió, basada en criterios estadísticos y proyecciones construidas con base en la evidencia empírica.
Mieres habló allí de una "decisión politica" en cuanto a que, efectivamente, había que aumentar la edad de retiro, pero sostuvo que, "comparadas como se deben comparar", jamás se puede determinar que habrá una caída en las futuras prestaciones.
Al respecto ratificó que la mitad de las jubilaciones, las más bajas, serán mejores que las actuales. También que para los sectores de ingresos más altos el hecho de continuar más años trabajando les representará un incremento del componente de ahorro individual, por lo que tendrían que alcanzar jubilaciones más altas comparadas con el sistema actual. "Vamos a seguir diciendo esto y lo defenderemos a capa y espada, porque estamos convencidos de que será así", dijo.
Allí el ministro apeló a un eslógan al que "se ha aferrado" la oposición política: "vas a tener que trabajar más y vas a ganar menos". Al respecto, Mieres dijo sin dudar: "La segunda parte de esa afirmación no es correcta". Eso será así, apuntó, también por una decisión política del gobierno.
Ante la comisión ,Mieres dijo coincidir con una afirmación realizada por el diputado frenteamplista Carlos Varela en relación a los resultados efectivos que tendrá la reforma. "El tiempo dirá quién tiene la razón", afirmó. "A esta altura, está claro cuáles son los datos que ha presentado el gobierno". El ministro se preguntó cuál sería alternativa a la extensión en la edad de retiro, en un país donde la gente vivirá cada vez más y donde las proyecciones demográficas indican que, para 2100, habrá apenas 2,8 millones de uruguayos.
Según las cifras aportadas ante la comisión, el promedio de edad de jubilaciones en Uruguay se ubica en los 63 años. A los 60 años, el tope mínimo actual, se retira el 40% de los hombres y la mitad de las mujeres.
Cabildo no se baja
El otro ojo del gobierno está puesto en el Parlamento. Mieres se reunió ayer jueves con su colega de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, y con el corredactor del proyecto de reforma, Rodolfo Saldain, para ajustar los detalles de la decena larga de modificaciones a la iniciativa, que serán enviadas el lunes al Poder Legislativo.
Ese será el "día D". Los partidos que integran la coalición de gobierno se reunirán para tomar una definición sobre la aprobación del proyecto, sobre la premisa de que, para el gobierno, el texto está cerrado a alteraciones de mayor tenor que las pautadas. El ministro de Trabajo lo dejó en claro este jueves. "La arquitectura del proyecto, que es lo que permite garantizar su sostenibilidad, es la que se planteó desde un principio", aclaró.
Cabildo Abierto insiste en que el acuerdo no está cerrado y sigue esgrimiendo otros reclamos, bajo el anuncio de que sus votos no estarán si no se contemplan.
"No hay ningún tipo de acuerdo por la reforma de la seguridad social", aclaró ayer el diputado Álvaro Perrone. "Seguimos reclamando cambios profundos y más tiempo de discusión". Lo que esperan los liderados por Guido Manini Ríos es conocer el alcance de las modificaciones que enviará el gobierno. Los "cambios profundos" se resumen a un aspecto concreto: reducir de 25 a 15 años el período de cálculo previsto en el proyecto para definir la tasa de reemplazo con la que se jubilaría una persona bajo el nuevo sistema.
Así lo puntualizó también este viernes a El País su correligionario Martín Sodano. "Es una lugar del que Cabildo no pretende moverse. De los 15 años, Cabildo no se baja". Sin este aspecto, insistió, su partido "hoy, 24 de marzo de 2023", no vota la reforma jubilatoria.
Los cabildantes dicen que el período previsto en el texto del gobierno es muy extenso, que perjudicará a aquellos trabajadores cuyos salarios han ido aumentando a lo largo del tiempo.
Desde el Partido Nacional y en diálogo con El País, el diputado Juan Martín Rodríguez les recordó a sus socios que lo que reclaman nunca estuvo en discusión. Desde que se planteó por primera vez esa reclamo en el Senado, remarcó el legislador, el gobierno aclaró que era inviable. "Modificar esa variable echaría por tierra la reforma", señaló Rodríguez. En su visión, "suena irreal" que Cabildo siga insistiendo en el tema.
Los blancos tienen en ese sentido toda una lista con los reclamos que Cabildo hizo desde que el proyecto de reforma jubilatoria ingresó al Parlamento y que, en su visión, fueron contemplados. Allí figuran, por ejemplo, una nueva redacción que dará “más garantías” a la habilitación para que las administradoras previsionales privadas (AFAP) puedan invertir sus fondos en el exterior. En Cabildo se lo considera demasiado riesgoso. En el oficialismo se le recuerda que eso ya es posible, según lo previsto en una ley de Rendición de Cuentas votada durante el gobierno de José Mujica.
En el oficialismo se considera que también se contempló a Cabildo en la revisión de los artículos referidos a los mecanismos que establecen automáticamente la extensión de la edad de retiro a partir de la evolución de la esperanza de vida de la población.
A la lista se suma la disposición a permitir que la Caja Notarial tenga un “período ventana” en el que se definirá si ingresa o no al sistema mixto, y la extensión a los oficiales de policía de la causa del fallecimiento o incapacidad total en acto de servicio que hoy existe en las Fuerzas Armadas.
El lunes, remarcó Rodríguez, será el día definitorio. El diputado nacionalista exhortó a sus socios a la reflexión en las horas que quedan para esa definición. "Cabildo Abierto sabrá lo que tiene que hacer", dijo.
Con todos los votos
Durante la última sesión de la comisión que analiza el tema en Diputados, Cabildo Abierto insistió en que la reforma debería ser votada por todos los partidos políticos. Allí el diputado Sodano ubicó a su formación "en el medio" de dos bandos que, dijo, se "tiran piedras". Sodano sostuvo en ese sentido su intención de "tender puentes de consensos" debido que, señaló, todos están convencidos de que una reforma es necesaria. "Puede que filosóficamente no coincidamos en esta reforma pero, si es una solución , tenemos que trabajar con la esperanza de construir algo en conjunto", dijo.