Redacción El País
El exintendente de Soriano, Guillermo Besozzi, afirmó ayer que no incurrió en siete delitos de corrupción pública como lo estableció la fiscal Stella Alciaturi en su pedido de formalización. (Ver nota aparte). Además de una investigación penal en su contra, enfrenta una prisión domiciliaria durante 180 días con el uso de una tobillera electrónica.
Acompañado por parte de su familia y sus abogados, el exjefe comunal mercedario dio una conferencia de prensa de casi una hora donde consideró que la causa penal tiene un trasfondo político. En dos ocasiones Besozzi mencionó al prosecretario de la Presidencia de la República y ex Fiscal de Corte, Jorge Díaz.
El nacionalista, además, recordó que mantuvo una reciente conversación con el presidente de la República, Yamandú Orsi, a quien conoce desde que éste integraba el gabinete del entonces intendente canario, Marcos Carámbula (Frente Amplio).
“Orsi entiende la situación porque fue intendente. Le dije que hablara con Jorge Díaz porque sabe mucha cosa del funcionamiento de la Fiscalía”, afirmó Besozzi a Orsi, según relató el exintendente de Soriano en la conferencia de prensa en su domicilio.
El dirigente nacionalista dijo que se siente “un preso político”. Agregó, a su vez, que hay personas que “están en la política” y “quieren dañar” a los que tratan de hacer el bien.
A continuación, dijo con voz compungida: “Si querían hacerme doler y hacerme sentir el fierro, lo lograron. No sé bien cómo surge todo esto. No sé bien cómo termina todo esto. Solo sé que soy inocente”.
Y añadió: “No toqué nada para mí; no gestioné nada a cambio de nada”.
Tras recordar que hace 26 años que se dedica a la actividad política, Besozzi repitió en varios tramos de su conferencia de prensa que la disputa electoral con el Frente Amplio tiñe la formalización en su contra, porque se efectivizó después de tres años de investigación y a 55 días de las elecciones.
Según el dirigente blanco, la fiscal Alciaturi “se va de Soriano después de tirar esta pedrada” al ser trasladada para el balneario canario de Atlántida, lo que en ámbitos judiciales se entiende como un ascenso porque se acercó a Montevideo.
“Si en este país se mezcla lo judicial a lo político habrá una crisis institucional. Hay que trabajar sobre esto o van a terminar presos desde el presidente de la República, que no tiene fueros, para abajo. No es una amenaza lo que digo porque soy un paisano que siempre quiso colaborar y ayudar”, afirmó.
Tras advertir que no tenía vergüenza de llevar una tobillera “en la pata”, Besozzi volvió a insistir en el trasfondo político detrás del caso porque al jefe de Policía de Soriano lo cambiaron dos días antes de ser detenido y llevado a la Fiscalía.
“Porque a mí no me citaron. Vino la Policía y me llevaron. De todas formas, destaco el trato recibido por los policías”, agregó.
También recordó que recibió un informe de la Mesa Política del Frente Amplio donde se aludía a su posible detención. “Al día siguiente, a las 7 de la mañana, me detuvieron (...) La Justicia dirá si soy culpable. Yo creo que no soy culpable de nada. Sí de una situación política”, expresó Besozzi en alusión al accionar de dirigentes del Frente Amplio para erosionar su candidatura a la Intendencia de Soriano.
Reiteró que siempre colaboró con personas necesitadas “siempre dentro de la ley y de la norma”. Y añadió: “Solo sé que soy inocente; no toqué nada ajeno. No agarré nada para mí”.
Dejó en claro que mantendrá su candidatura a la intendencia y que hará política desde la casa.
“Sucesivos y crecientes” adelantos
Para el pedido de formalización de Besozzi y otros seis jerarcas, la fiscal Stella Alciaturi describió 15 hechos en una audiencia el jueves de noche que duró varias horas.
Uno de los episodios, según el relato de Alciaturi que publicó días atrás El País, es que el entonces intendente autorizó “sucesivos y crecientes” adelantos de dinero al gremio de trabajadores para que “saldara deudas correspondientes a cheques sin fondos y librados contra cuenta suspendida”, incluso cuando esos adelantos superaban la recaudación y existían denuncias de que no se usaba para su fin.
Por otra parte, en la audiencia se planteó que funcionarios declararon “que las contrataciones van en proporción directa a las contribuciones realizadas” a la campaña política. Según un testigo, un empresario que poseía una máquina arrendada por la comuna aportaba a la campaña para tener más contrataciones.
También -según se indicó en la audiencia- hubo comunicaciones en las que el intendente y otros jerarcas solicitaban contribuciones dentro de la intendencia para financiar a la agrupación. Además de que se indaga si utilizaban maquinaria de la comuna para que particulares la llevaran para hacer tareas propias.

Tobillera
En el tramo de las preguntas, un periodista insistió sobre si detrás de su encarcelamiento se encontraba la figura de Jorge Díaz.
“Eso no lo puedo decir porque no me consta. Sí digo que hay cosas que llaman la atención. Lo que no es bueno es que la gente piense que el sistema político y el judicial perdió credibilidad”, respondió Besozzi.
Tras advertir que todavía no sabía muy bien por qué llevaba una tobillera electrónica, Besozzi afirmó que sigue creyendo en la Justicia aunque no le “gusta” lo que le “pasó”.
En otro tramo de su discurso, el candidato para las departamentales volvió a sugerir un móvil político detrás de su formalización al señalar que la Fiscalía “siempre está con temas relacionados con el Partido Nacional”.
“Hubo (por parte de la fiscal Alciaturi) ofrecimientos de juicios abreviados. Todos los detenidos bancaron porque saben que este intendente y su equipo pueden tener errores, pero no nos llevamos un mango de nada”, sostuvo.
Al final de la conferencia de prensa, Besozzi anunció que sus abogados apelarán la formalización de la investigación y pedirán el cese de las medidas de arresto domiciliario por 180 días con uso de tobillera.
El Partido Nacional trata el caso
La comisión de Asuntos Políticos del Partido Nacional se reunirá este lunes para tratar el caso de Besozzi. Varios de los blancos han salido en defensa del exintendente y atacado a la Fiscalía, siendo uno de ellos Álvaro Delgado: “La detención era innecesaria y por tanto se tornó en una medida excesiva y por eso mismo, cuestionable, no solo jurídicamente sino también políticamente”.
