Redacción El País
Contra reloj, Cabildo Abierto está llamando a la militancia a redoblar los esfuerzos para alcanzar las 270.000 firmas que precisa para hacer un plebiscito -al que llamó “Por una deuda justa”- para generar cambios en el sistema financiero. En este refuerzo de la campaña, ayer se informó que el intendente de Durazno,el nacionalista Carmelo Vidalín, apoya la iniciativa.

El líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, pidió a la militancia “reforzar” las actividades para “darle al pueblo uruguayo la oportunidad de que se debata” el tema durante la campaña, y marcó ayer en su audición semanal que alcanzar el plebiscito es una “prioridad” hasta el 27 de abril -que es el día en que se vence el plazo para presentar las firmas ante la Corte Electoral.

En una línea similar, la senadora Irene Moreira pidió -en un video que difundió ayer en X (antes Twitter)- “redoblar el esfuerzo”. Y añadió: “Sé que hicieron muchísimo”, pero esta es la “recta final”.

Por su parte, Manini Ríos informó que les resta conseguir “unas 100.000 firmas” para alcanzar el objetivo. Al mismo tiempo apuntó que perciben un “recrudecimiento de la hostilidad” hacia Cabildo Abierto, lo que relacionan con la etapa final de recolección de firmas.

“Hay intereses que se sienten tocados, por primera vez cuestionados en voz alta. Se acostumbraron durante muchísimo tiempo a hacer lo que quisieran y sin que nadie chistara”, apuntó el senador.

Foto: Juan Manuel Ramos

El apoyo de Vidalín llama la atención porque es un histórico dirigente nacionalista. En ese sentido, en diálogo con El País, indicó: “Por encima de ser un buen blanco, que amo a mi partido y del que estoy orgulloso, primero soy uruguayo y duraznense”.

Además, recordó que en 2011, durante su tercer período como diputado, presentó un proyecto con fines parecidos a los que hoy impulsa Cabildo Abierto, ya que quería limitar las ganancias mediante préstamos y créditos con tarjeta. Por lo que comentó que con el apoyo al plebiscito no hace “nada nuevo” sino que reafirma la iniciativa que llevó al Parlamento hace 13 años.

También hizo hincapié en el comportamiento de las personas al decir que la “gente se ha vuelto demasiado consumista”. Y añadió: “Hay cosas que son mucho más importantes que la materia y son cosas que pasan por el espíritu, por el corazón, y que son mucho más valiosas”. Señaló Vidalín que “a veces compramos cosas que no podemos, que sabemos que no nos da, pero como vemos que el vecino compró, también compramos”.

Se plantea que el Parlamento controle el interés máximo que se le permite a los prestamistas, incluidas las tasas de interés, las moras, entre otros puntos. Además, se propone una tasa de interés máxima de 30% sobre los montos convertidos a UI provisoria hasta que se sancione una ley con los nuevos porcentajes.