Redacción El País
Los periódicos realineamientos internos en los partidos tradicionales a lo largo de la historia cambiaron los nombres de los grupos, aunque por lo general se mantenían los apellidos: entre los colorados abundaron los sectores terminados en “batllista” y entre los blancos, por supuesto, los que incluían el término “nacionalista”. Una de las denominaciones más originales, aunque no por iniciativa de sus integrantes, fue la “Ubedoxia”.
Así llamó el ingenio popular al acuerdo entre la Unión Blanca Democrática (UBD), encabezada por Daniel Fernández Crespo, y el grupo liderado por Eduardo Víctor Haedo, conocido como “herrerismo ortodoxo”, que terminaría alzándose con el triunfo en las elecciones nacional de 1962.
La UBD había nacido en 1956, cuando se completó el proceso de regreso al lema de los sectores antiherreristas, que en la década de 1930 se habían integrado en el Partido Nacional Independiente. Reconstrucción Blanca de Washington Beltrán, el Movimiento Popular Nacionalista de Fernández Crespo y otros grupos formaron esa unión, cuyo eslogan tuvo gran repercusión: “O gana la UBD o todo sigue como está”.
Los primeros resultados de las elecciones de 1958 daban ventaja a la UBD, pero la victoria terminó siendo del “eje herrero ruralista” de Luis Alberto de Herrera y Benito Nardone, gracias a “los votos del campo”, como los identificó Nardone. Tempranas desavenencias entre ambos marcaron al nuevo gobierno. Poco después, el fallecimiento del veterano líder representó un impacto adicional, que se tradujo en reagrupamientos diversos en el seno del Partido Nacional.
El principal fue el que surgió de un grupo de dirigentes que habían estado cerca de Herrera, como Haedo, los hermanos Alberto y Mario Heber Usher y Luis Giannattasio, y conformaban el “herrerismo ortodoxo”, que acordaron ir junto a la UBD a las elecciones de 1962.
El resto del herrerismo permaneció junto a Martín Echegoyen, “número dos” del fallecido líder. El acuerdo con el ruralismo de Benito Nardone se mantuvo, aunque “Chico Tazo” había perdido respaldos y popularidad.
El Partido Nacional ganó las elecciones de 1962, realizadas el 25 de noviembre, aunque la ventaja de 120.000 votos sobre el Partido Colorado de 1958 se redujo a 24.000. La “Ubedoxia” derrotó con amplitud al Herrerismo en la interna y encabezó el gobierno colegiado.
El Consejo Nacional de Gobierno que asumió el 1° de marzo de 1963 estaba integrado por Daniel Fernández Crespo, Washington Beltrán, Carlos M. Penadés y Héctor Lorenzo y Losada por la UBD; Luis Giannattasio y Alberto Heber por el herrerismo ortodoxo, en la mayoría blanca. Por la minoría colorada ingresaron los quincistas Alberto Abdala y Amílcar Vasconcellos, además de Oscar Gestido por la Unión Colorada y Batllista.
La UBD, y con ella la Ubedoxia, se desarmó antes de las elecciones de 1966. La muerte de Fernández Crespo en 1964 determinó nuevos cambios en la interna de los blancos.