NUEVA DEFINICIÓN
"Hemos tenido una reunión con el grupo promotor del proyecto para comunicarles esto porque ellos de alguna forma dependen de estas autorizaciones", dijo Luis Oreggioni.
"Como nosotros damos una visión negativa, entendemos que el proyecto no va a seguir adelante y no se va a presentar", aseguró esta tarde el director de Planificación de la Intendencia de Montevideo (IMM), Luis Oreggioni, sobre el proyecto "MVD 360", que preveía instalar una isla con puertos y lotes con viviendas y comercios frente a la rambla de Punta Gorda.
"Haciendo un balance global, entendemos que es un proyecto que no es viable para la ciudad de Montevideo. Básicamente porque concentra en una única inversión, en un único lugar del territorio montevideano y costero una enorme cantidad de metros cuadrados no solo de viviendas, sino también de oficinas y comercios", aseguró el jerarca en rueda de prensa consignada por TV Ciudad y el periodista Leonardo Sarro.
El proyecto preveía una inversión de US$ 2.300 millones a lo largo de 10 años, que se estimaba, llevaría toda la construcción. Una primera etapa implicaban obras de infraestructura con una inversión de US$ 250 millones a lo largo de "cuatro años".
"Si bien la creación de la isla es un espacio costero nacional, está concebido completamente como un proyecto montevideano, y depende de las aprobaciones departamentales. En los hechos, hemos tenido una reunión con el grupo promotor del proyecto para comunicarles esto porque ellos de alguna forma dependen de estas autorizaciones", añadió el jerarca.
Oreggioni planteó que esta inversión —que ya tuvo el visto bueno de Presidencia— está "concentrada en este lugar en formato de isla genera, confronta y afecta procesos que tienen que ver con la vida de la centralidad montevideana, particularmente del Centro y Ciudad Vieja por los cuales la Intendencia de Montevideo está apostando muy fuerte".
El director de la comuna capitalina, que además es arquitecto, indicó que "un desarrollo privado, de esta escala, en la costa sería totalmente novedoso y de alguna forma nos genera algunas preocupaciones en cuanto a los impactos para Montevideo". Esto en referencia al "posible riesgo de que esta inversión se logre concretar".
Al mismo tiempo, dijo que "hay consideraciones ambientales que todavía no han sido tomadas en cuenta", y enfatizó: "Tenemos suficiente costa, área central y muchos lugares adonde una inversión privada puede ir generando equilibrios territoriales". Y aseguró: "Tenemos muchos lugares donde la inversión privada va a encontrar lugares".
Ignacio Muñoz, integrante del grupo impulsor del emprendimiento, había indicado a El País el 20 de mayo que la idea era desarrollar este plan en 36 hectáreas de terreno sobre la franja costera, a 450 metros de la costa unidos a la rambla por un puente. Detrás del proyecto están "empresarios y profesionales uruguayos" de varios ámbitos, había agregado.
El proyecto de Jirkel S.A fue considerado el 9 de mayo por una resolución firmada por Lacalle Pou de "sumo interés para la Administración ya que contribuirá a la jerarquización de la ciudad en general y de la rambla montevideana en particular, así como amplía la oferta portuaria de la ciudad conectándola aún más con la región".
La iniciativa privada se presentó en octubre pasado en el Ministerio de Transporte, luego fue dirigida a Presidencia, donde se "estimó pertinente"—dice textual la resolución— y desde entonces comenzó la etapa en que deben presentar el estudio de "factibilidad económica", había indicado a El País el subsecretario de Transporte, Juan José Olaizola.