La primera medida que tomó el gobierno nacional cuando la última pandemia llegó a Uruguay fue el cierre de los espacios públicos, con el único objetivo de detener la propagación del por entonces novedoso coronavirus, que hacía estragos en todo el planeta. Eso ocurrió el 13 de marzo de 2020, aunque luego hubo reaperturas y flexibilizaciones varias conforme las autoridades entendían que las condiciones sanitarias mejoraban como para dar algo de oxígeno a la economía.

Porque uno de los impactos más notorios de la emergencia declarada tras la llegada del covid-19 fue ese: el económico. Empresas que tuvieron que cerrar, trabajadores que fueron al seguro de paro o que vieron mermados seriamente los ingresos.

Los funcionarios públicos corrieron otra suerte. Porque salvo por un impuesto que se aplicó durante dos meses a aquellos que cobraban salarios altos para abastecer un fondo de emergencia -y para lo cual aportaron el 20% de su sueldo-, siguieron recibiendo sus ingresos básicos, trabajando remoto o esperando en sus casas la reapertura de las oficinas.

Sin embargo, hubo algunas excepciones. Por ejemplo, la de los 55 funcionarios de la Intendencia de Montevideo (IMM) que trabajan en el casino municipal Parque Hotel.

De acuerdo a la respuesta a un pedido de acceso a la información pública que El País tramitó ante la IMM, estos funcionarios cobraron, además de sus salarios, horas extras, incluso mientras el casino estuvo cerrado producto de la emergencia sanitaria.

De hecho, tanto en 2020 como en 2021, años en que -como ya se verá en detalle- el casino Parque Hotel estuvo gran parte del tiempo sin funcionar u operando al 50% de sus capacidades, sus empleados cobraron, en total, $ 214.256 el primer año y $ 284.722 el segundo. Fueron 668 horas extras cobradas en 2020 y 798 en 2021.

Esto mismo se puede visualizar si se analiza mes a mes y se coteja con las fechas de cierre de todos los casinos.

Tres días después de que el Poder Ejecutivo comunicara las medidas adoptadas el 13 de marzo de 2020, la IMM emitió una resolución en la que a texto expreso definió “mantener el cierre al público del Casino Parque Hotel”. En ese marzo, no obstante, ya se habían abonado 77 horas extras, la misma cantidad que se pagó el mes anterior, cuando todo funcionaba con normalidad.

En abril se volvieron a pagar horas extras, un total de 42, y se dejó de abonar durante mayo y junio, para volver a hacerlo a partir de julio, cuando se pagaron 39.

En agosto el gobierno dispuso una flexibilización de los cierres, y el casino municipal, según recuerda Walter Páez, directivo de la Asociación Nacional de funcionarios de Casinos del Estado, trabajó con “el 40% de las máquinas disponibles”, y sin utilizarse los llamados juegos de paño.

Parque Hotel operó entonces en esas condiciones hasta el 2 de diciembre de 2020, fecha en que volvió a cerrar sus puertas hasta el 15 de julio del 2021, como está explicitado en una resolución de la IMM del 9 de agosto de ese año, en donde se reconoce que las actividades de este casino estuvieron cerradas “hasta el mes de julio del presente año, salvo un corto periodo en el segundo semestre del año 2020”, y que “dada la actual situación sanitaria” se resolvía reabrirlo “a partir del 15 de julio del 2021 operando al 50% de su capacidad”.

Y en esos meses se constató lo mismo: pagos de horas extras que, sumadas, son más de 500. Porque se abonaron 77 en diciembre de 2020, 77 en enero de 2021 -casi la misma cantidad que en enero de 2020, cuando no había pandemia y se habían abonado 83 horas-, 43 en el febrero siguiente, 30 en marzo, 69 en abril, 69 en mayo, 69 en junio y 64 en julio -mes en que el casino funcionó recién a partir de la segunda quincena.

Foto: Leonardo Mainé

¿Cómo se explica? Para tratar de entenderlo, El País buscó contrastar estos datos con las autoridades competentes de la IMM, que bien podían ser Gustavo Cabrera, director de Desarrollo Económico de la comuna, o Gerardo Lorbeer, director de Casinos Municipales, pero no fue posible.

Desde el departamento de comunicación se ofrecieron en cambio algunos posibles motivos que a su criterio podrían explicar estos pagos. Uno de ellos pasaría por la “reducción de funcionarios” en esta área producto de traslados y jubilaciones, algo que ahora se estaría en proceso de remediar con incorporaciones de personal “para dar adecuada respuesta a las necesidades, sin tener que recurrir a mecanismos como extensiones horarias y horas extras”. Y específicamente sobre las horas extras abonadas durante el cierre del Parque Hotel en ocho meses de 2020 y 2021, se respondió que eso ocurrió porque “los funcionarios estaban trabajando adentro en tareas de mantenimiento”. “Fueron horas realizadas por dos funcionarios de mantenimiento y la guardia de seguridad, que siguió yendo, y personal de limpieza. Se aprovechó a hacer ciertas cosas a fondo en mantenimiento, como limpieza de ductos, fumigación y arreglo mobiliario”.

Pero Páez no recuerda eso. “Algún funcionario puede ser que las haya hecho para instalar separadores con acrílicos entre las máquinas, para marcar la distancia”, aseguró a El País el dirigente gremial, que además tiene otra interpretación sobre este asunto. Primero, que “las horas extras para suplir carencias del personal”, mermado desde hace años en un contexto de “pérdida de ingresos desde hace 32 años” (ver recuadro), se crearon “en noviembre del año pasado, y se aplicaron para 10 personas”. De modo que no explica las horas pagadas en pandemia. Y para esto último, la interpretación de Páez es que lo que en el balance de la IMM figura como horas extras en realidad serían el pago en aplicación de una cláusula de un convenio firmado en 2018, que disponía que en los casos en que los funcionarios “se vieran impedidos de continuar generando el derecho a cobrar propina” por motivos ajenos, “sus ingresos serán incrementados por una Partida Especial equivalente al 50% de la Compensación Permanente a la Persona”. Así se dispuso en 2013, cuando se efectuó una mudanza, y así cree Páez que ocurrió durante la pandemia.

La Junta de Transparencia y Ética Pública (Jutep) recibió meses atrás una denuncia anónima que también apuntó al pago de horas extras a funcionarios del casino municipal en tiempos en que se encontraba cerrado. Según indicaron a El País fuentes del organismo, el planteo ingresó el 29 de julio, al filo del inicio del período en que la ley no permite que la Jutep intervenga en temas electorales cuando hay comicios. El directorio espera ahora que la IMM brinde su descargo con información sobre este tema.

Foto: Archivo El País