Nuevo estudio
En los países en que más ha habido un “choque” con los extranjeros, más allá de la xenofobia, los inmigrantes representan más del 15% de la población activa, cifra muy distinta a la registrada en Uruguay.
Dos de cada tres inmigrantes recientes están empleados. Pero en comparación a la cantidad de trabajadores uruguayos son tan pocos que apenas representan el 2,5% de los ocupados en el país.
“Las cifras derriban totalmente el mito” de que los extranjeros vienen a quitar los trabajos, dijo Marcos Rivero, gerente comercial de Unión Capital AFAP, empresa que realizó un estudio de la temática junto al Instituto de Economía de UdelaR y a Equipos Consultores.
“La cifra de los inmigrantes activos es apenas 0,3 puntos mayor a la de cinco años antes: quiere decir que cada 1.000 empleos en Uruguay, solamente tres están ocupados por inmigrantes y antes lo ocupaban nativos”, explicó Rivero.
En los países en que más ha habido un “choque” con los extranjeros, más allá de la xenofobia, los inmigrantes representan más del 15% de la población activa, cifra muy distinta a la registrada en Uruguay.
El estudio reconoce que hay un aumento de la inmigración. De hecho este año se tramitaron 14.348 residencias, cuando el año pasado habían sido 13.086, según cifras de la Dirección General para Asuntos Consulares y Vinculación. ¿Por qué si los extranjeros no son tantos pareciera que sí lo son?
“Ahora los inmigrantes están en los servicios, en especial en el comercio y restaurantes, con más exposición ante el común de la población”, señaló Rivero. El 27% de lo inmigrantes extranjeros recientes que están empleados, lo están en servicios comunales, sociales y personales (como el cuidado a adultos mayores), y otro 27% lo está en comercio, restaurantes y hoteles. A su vez, hubo un crecimiento en la representación en el transporte, en especial en las aplicaciones como Uber.
En las olas inmigratorias de hace diez años, por ejemplo, había muchas mujeres trabajando en el servicio doméstico. Esas son “tareas de poca exposición, porque solo tiene contacto con el trabajador la familia empleadora”. Por tanto, si bien aumentó la cantidad de extranjeros, “es más cuestión de percepción que de datos reales”, dijo el gerente.
Otra característica que reafirma el estudio es que los inmigrantes recientes son más formados que sus pares uruguayos. En promedio, los extranjeros tienen 13 años de estudio y los locales llegan a diez.