Uruguay se ha transformado en los últimos años en un país dual desde el punto de vista demográfico. Más de medio millón de uruguayos viven hoy en algún país extranjero. Al mismo tiempo, en la última década y media más de 120 mil migrantes han elegido a nuestro para vivir. Por otra parte, los resultados finales del Censo 2023, publicados recientemente, indicaron que, por primera vez en un siglo, aumentó el número de personas residentes en Uruguay que nacieron en otro país.

De estos, más del 70% vive hoy en el área metropolitana de Montevideo. Así lo resaltó un informe, presentado este viernes, con los datos preliminares del proyecto “La inmigración en el área metropolitana en el Uruguay: inserción laboral e integración social”.

La iniciativa es promovida en conjunto por las intendencias de Montevideo, Canelones y San José. Está en ejecución, y cuenta con aportes y asistencia de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y el Departamento de Inmigración del gobierno de Canadá. Su objetivo es, precisamente, favorecer la inserción laboral y la integración social de los migrantes en el área metropolitana uruguaya.

El proyecto tiene dos componentes. Por un lado, generar datos e información relevante y de calidad que permita conocer mejor la problemática y mejorar así el diseño de las políticas públicas destinadas a las personas migrantes que viven o llegaron recientemente a esa zona. Por otro, elaborar una “estrategia metropolitana” destinada al abordaje en conjunto, por parte de las tres intendencias, de la situación de estas personas, con un énfasis especial en el enfoque de género y el sistema de cuidados.

Entre sus líneas principales está caracterizar a la población migrante en función de sus características demográficas, de la historia antes de su llegada a Uruguay, y además describir y analizar las dificultades que limitan sus vidas. También, indagar sobre su convivencia con los uruguayos.

A los efectos de alcanzar estos objetivos, las tres comunas formaron recientemente un Comité de Seguimiento y Ejecución del proyecto. A los efectos, se contrató a la consultora Nómade y a la Universidad Claeh para desarrollar las instancias previstas de diagnóstico y construcción de la estrategia. Para eso se contactaron a migrantes provenientes de Cuba, Venezuela, República Dominicana, Brasil, Colombia, Argentina y Bolivia. Se concurrió, además, a zonas como “el barrio de los dominicanos”, en Colón, o a la localidad de Santa Rosa, en Canelones, donde se concentra buena parte de la comunidad cubana.

Además de los factores económicos, buena parte de las respuestas de los recién llegados pasan por la tranquilidad que les ofrece Uruguay.

“Es demasiado seguro en comparación con otros países”, destacó para el informe un inmigrante colombiano, que resaltó que “nunca ha existido una sensación de intranquilidad. Es una cuestión totalmente diferente”.

Otro inmigrante, en este caso venezolano, que recorrió varios países de la región, decidió asentarse en Uruguay porque quiso “un país en el que se sintiera tranquilidad, donde tuviéramos un poquito más de calidad de vida”.

Foto: Estefanía Leal/Archivo El País.

Pero también el informe reveló los principales desafíos que enfrentan estas personas a su llegada, las que centran sus preocupaciones. En primer lugar, el acceso a la vivienda y un empleo, junto a la inserción social, la educación, y la obtención de la documentación rápida para su residencia.

Entre las principales demandas y expectativas, se cuentan la estabilidad laboral, la reválida de títulos y la reunificación familiar. En un segundo escalón, se ubican la obtención de la ciudadanía uruguaya y la mejora en su situación económica. Los responsables del informe mencionaron durante su presentación un dato llamativo: hubo migrantes que dijeron percibir que los uruguayos, cada vez más, los ven como “competidores” en el acceso al empleo.

Los datos del Censo 2023 indicaron que, entre 2000 y 2011, se observó un aumento en el volumen de migrantes extranjeros de unas 13 mil personas. Entre 2011 y 2023, el incremento fue de 57 mil personas. En estos últimos doce años, la mayoría de los extranjeros que llegaron a Uruguay procedieron de Venezuela, Argentina, y Cuba.

En concreto, en términos cuantitativos, viven hoy en Uruguay 31.894 argentinos, 16.115 venezolanos, 11.838 cubanos, 10.731 brasileños, 8.187 españoles y 3.085 estadounidenses, entre las principales nacionalidades.

En materia de emigración uruguaya, el informe anexado al Censo 2023 indicó, en base a registros de población, censos y encuestas en los principales destinos -España, Italia, Estados Unidos y América del Sur- que se observa entre 2021 y 2023 una primera “fase de desaceleración” del flujo hacia otros países que comenzó a fines del 2000 por motivos fundamentalmente económicos. Esto se suma a un significativo aumento de uruguayos que retornaron al país.

Según estos datos, a partir de 2017 ese flujo de salida se reactivó, con una interrupción por la pandemia. A su vez, las condiciones económicas en los países limítrofes -en particular Argentina- implicaron una disminución de la propensión emigratoria de uruguayos hacia la región.

De estas “señales no exactas”, según el INE es posible inferir que la emigración entre 2011 y 2023 fue menor a la observada en el anterior período intercensal, lo que posibilitó que -en términos migratorios- el saldo de Uruguay sea nulo.

En el caso de España, la Estadística Continua de Población de ese país indicó que el año pasado vivían allí 86.620 personas nacidas en Uruguay. Fueron unas tres mil más que las que residían en esa nación en 2022 y representa, según los datos oficiales, el máximo registrado desde el año 2012. Son, por ejemplo, 13 mil personas más que en 2013.