Redacción El País
Jorge Pedreira Brum, pescador y fletero, desapareció en junio de 1978 en Argentina, Buenos Aires, en el trayecto desde su vivienda a la estación de ferrocarriles Paso del Rey. Salió de su domicilio para acompañar a un amigo que lo había visitado y no se lo vio más. Unos 45 años después, se logró identificar el lugar de entierro del uruguayo en el cementerio de Grand Bourg, como NN, en el sector denominado tierra gratuita. Así se informó ayer en una conferencia de prensa de la Asociación de Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos.
Pedreira Brum tenía 56 años al momento de su muerte. Tenía dos hijos, e integraba el Partido Comunista del Uruguay (PCU). La investigación pudo determinar que la Policía, en la época, buscó disimular por dos veces las verdaderas causas de la muerte, a partir de sendos certificados de defunción apócrifos, así como también ocultándose a la familia del destino del cuerpo.
En las partidas de defunción -se explicó anoche en una conferencia de prensa- se sugiere que el fallecimiento se dio por un accidente de ferrocarril, pero una indica que se dio en el kilómetro 25 y otra en el 30, y una dice que el hecho ocurrió el día 6 y otra el 8 de junio. En ese marco, un equipo de investigación de la Institución Nacional de Derechos Humanos constató que no hubo ningún siniestro en la línea Belgrano entre el 1° y 21 de junio de 1978, ni se halló un cadáver en esos puntos de la vía ni en ninguna otra parte del recorrido.
El cuerpo de Pedreira Brum apareció en la misma zona en la que, en 1984, se habían exhumado más de 120 cuerpos por orden judicial. Familiares reparó que, en su momento, hubo un mal manejo de esos cadáveres. Hasta el momento, solo se lograron identificar nueve personas. Por cómo se manejaron los restos, además, implicó que en 1987 se ordenara su reinhumación no en forma individual, y hasta ahora permanecen en un osario común, añadieron desde la organización.
Por su parte, el hijo de Pedreira Brum, Enrique, contó que vivían “muy pobremente” en Buenos Aires, y que un día, cuando regresó de trabajar, se encontró con que su padre no estaba en la casa. “Era una noche que hacía un frío impresionante, en pleno junio”, y “ahí empezó la historia y la búsqueda”. Al día siguiente, agarró su bicicleta para ir a la comisaria a hacer la denuncia.
“Mi padre, quiero aclarar, era un trabajador”, comentó visiblemente emocionado. “Y de muy niño -continuó Enrique-, según contaban en la familia, mi viejo a los siete u ocho años vendía barro en Pan de Azúcar. Después, con el tiempo, se mudaron a Piriápolis (…) Mi padre fue fletero, vendedor de fruta, pescador… por si cabe alguna duda, era un obrero. No era ningún oligarca ni terrorista ni nada por el estilo que se mereciera el final que tuvo”.
Y añadió: “Nosotros no estábamos militando en ese momento. Las cosas tienen que ser claras y justas. Algún pequeño contacto tenía con el Partido Comunista argentino pero nada más. Pero no mi padre porque estaba enfermo”.
Nació en pan de azúcar y vivió en Piriápolis
Jorge Pedreira Brum militó en el Partido Comunista del Uruguay (PCU) y es señalado como víctima del terrorismo de Estado en Argentina durante la última dictadura militar, que se inició en 1976 y concluyó en 1983.
Nació en 1921 en Pan de Azúcar, Maldonado. Después se mudó a Piriápolis, ciudad del mismo departamento. Más tar-de, emigró con su familia a Buenos Aires, donde ocurrió la desaparición forzosa.
A principios de junio de 1978, salió de su casa en Paso del Rey (Moreno) para acompañar a un amigo al Ferrocarril Sarmiento, según la información aportada por la web Sitio de la Memoria. Y luego fue enterrado como “NN o Pedreira Brum” en el cementerio de Grand Bourg.
Hasta ahora desconocían cuál era el paradero exacto del cuerpo de Pedreira Brum, a unos 45 años de su muerte.