El presidente Luis Lacalle Pou aceptó la invitación personal que le realizó su homólogo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y el próximo mes viajará a ese país para participar de un “retiro” de mandatarios del continente con el objetivo de “reflexionar”, según el brasileño, sobre los procesos de integración regional. Así lo confirmó ayer en rueda de prensa el canciller Francisco Bustillo, al indicar que la respuesta acababa de ser cursada desde Montevideo.

El encuentro tendrá lugar el 30 de mayo, probablemente en Brasilia, sede del gobierno norteño. Allí Lacalle Pou se hará presente para “intercambiar inquietudes” sobre la “nueva arquitectura” de la integración en la región, indicó Bustillo.

El presidente brasileño explora, entre otras, la posibilidad de relanzar la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur).

Bustillo también realizó algunos comentarios sobre la decisión de China de avanzar en un posible Tratado de Libre Comercio (TLC), pero con todos los países de la región. En la reciente visita que el canciller hizo a ese país el gobierno chino le transmitió “interés” de eventualmente firmar este acuerdo, pero también -como informó días atrás El País- se le señaló que las negociaciones no serían de país a país, sino que se aspiraba a un pacto más amplio que contenga a todo el bloque del Mercosur.

De hecho, la administración de Xi Jinping observa con “expectativa” los movimientos de Lula, quien también viajó a China por estos días a reunirse con el propio jefe de Estado de ese país, y entre ambos ya se inició una “buena relación”.

“China fue clara en cuanto a que la relación con Uruguay le importa y mucho, y que en definitiva tiene intenciones de avanzar en un TLC”, precisó Bustillo.

Según el canciller, en el gigante asiático se destacó la posición firme de Uruguay y su voluntad de avanzar en el acuerdo. “Estamos en un compás de espera en cuanto a la inquietud de Lula de que al Mercosur le interesa un acuerdo comercial con China”, agregó el jerarca del gobierno.

Más allá de la postura china, el ministro de Relaciones Exteriores aseguró que la estrategia del gobierno sigue siendo la misma: intentar abrirse al mundo.

“Para Uruguay es mucho mejor siempre sentarse en cualquier mesa de negociación acompañado de Argentina y Brasil”, afirmó.

Bustillo le restó importancia a las críticas que surgieron desde el Frente Amplio. La oposición habló del “fracaso” del gobierno en las negociaciones por un TLC y anunció que convocará al ministro para que dé las explicaciones correspondientes en el Parlamento.

“Es parte del juego político” dijo el canciller, que estimó que la convocatoria será una “muy buena oportunidad” para relatar frente al Poder Legislativo el “éxito” de la política exterior que se está llevando adelante.

El llamado a una cumbre regional por parte de Lula da Silva se produce luego de semanas de fuerte tensión entre el brasileño y la Casa Blanca, que lo acusó de repetir “como un loro” la propaganda de Rusia y de China durante su reciente visita a Pekín, en la que le pidió a Estados Unidos que dejara de “incentivar” la guerra en Ucrania.

Lula viene sosteniendo, en las últimas semanas, una postura contraria a Estados Unidos en lo referente a la invasión ordenada por Vladimir Putin a Ucrania. Su viaje a China y sus expresiones sobre “dos partes” en conflicto en Ucrania motivaron la incomodidad de Washington.

Tanto Brasil como Argentina -cuyo presidente, Alberto Fernández, también confirmó su presencia en la cumbre- intentan reflotar la Unasur, frenada durante las presidencias de Jair Bolsonaro y Mauricio Macri, y que hoy no tiene ni siquiera sede, ya que la anterior, en Quito, fue desmantelada. Bolivia y Venezuela también son miembros, aunque falten países importantes en esa lista, como Chile y Colombia. Uruguay abandonó la Celac el 10 de marzo de 2020, a 10 días de la asunción del nuevo gobierno de coalición.

En la última cumbre de la Celac, en enero pasado en Buenos Aires, el tema de la Unasur se puso sobre la mesa. Lacalle Pou, que alguna vez ha criticado la gran cantidad de organismos internacionales que se generan en la región y que pese a estos sea difícil lograr algunos acuerdos, sostuvo en esa instancia: “¿No será momento de sincerar estas relaciones y que desde la Celac se impulse una zona de libre comercio desde México hasta el sur de América del Sur?”. No obtuvo respuesta de parte de sus socios.

Los detalles de la convocatoria a Bustillo serán definidos en la próxima reunión de la bancada frenteamplista, confirmó a El País el senador Daniel Caggiani (MPP). El legislador dijo que las novedades en torno al acuerdo confirman el posicionamiento que la oposición venía manteniendo sobre el tema, en torno a la necesidad de ir avanzando de manera gradual y, sobre todo, en conjunto con el resto del Mercosur.

“Lacalle Pou jugó a doble o nada y se terminó tirando a una piscina que no tenía agua”, señaló Caggiani el jueves en rueda de prensa. A su juicio, la dirección que tomó el gobierno en este tema terminó por perjudicar los intereses del país. El senador consideró que en política exterior se debe ir con más cautela, a paso más tranquilo y firme. Sobre todo, expresó, si se trata de China, uno de los países más importantes del mundo y de los principales importadores de productos uruguayos.