ESTE MIÉRCOLES

La idea inicial era seguir el trámite parlamentario por internet desde la Torre Ejecutiva. Pero ayer en la tarde el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, descolocó a sus asesores, y sorprendió, incluso, a sus correligionarios blancos cuando llegó sin aviso al Palacio Legislativo. “Vamos pa’l Palacio”, le comentó a sus compañeros de trabajo del Piso 11.

Es que el jefe de Estado buscó dar una clara señal de respaldo a su bancada parlamentaria de senadores. En la llamada “cámara alta”, su compañera de fórmula Beatriz Argimón, presidía la discusión para aprobar la ley de urgente consideración.

El proyecto es el “buque insignia” del gobierno de Lacalle Pou. El equipo del líder blanco lo ha trabajado desde el arranque de la campaña electoral, y se convirtió en el centro de la confrontación con el Frente Amplio.

El presidente de la República se sentó en las barras del Senado para escuchar una parte del debate. El blanco Sergio Botana dijo: "Quiero saludar la presencia del presidente en esta sala, con naturalidad sin formalismos. Creo que es un gesto de enorme valor”.

Un rato después les dijo a sus asesores y equipo de custodias para ir hasta la Cámara de Representantes.

“Ojo que vamos llenos”, bromeó al subir al ascensor de camino a la Cámara Diputados. “Y si nos caemos, tenemos a un periodista”, agregó y le recomendó a un fotógrafo cortarse el pelo que ya lo llevaba demasiado largo.

Así de distendida fue la visita del mandatario. Pero en sala mantuvo atención a las exposiciones.

Al llegar a la Cámara de Diputados se dio una escena bien particular. Allí se desarrollaba la primera interpelación a cuatro ministros de su gobierno. El partido que la impulsó no fue de la oposición, sino que fue Cabildo Abierto que integra la coalición que lidera Lacalle Pou.

Eduardo Lust fue el miembro interpelante. Frente a él, el presidente Lacalle Pou lo seguía atentamente. En la otra ala, el líder del partido, Guido Manini Ríos, también seguía la sesión. Pues su diputado estaba interpelando no solo a cuatro ministros, sino que uno de los convocados era su esposa: Irene Moreira.

Ni bien terminó la exposición del diputado Lust, la Cámara pasó a un cuarto intermedio. Era el turno de los ministros de dar las explicaciones. Lacalle Pou se reunió con los cuatro en la sala de la bancada partidaria, fuera de la Cámara. Tres eran blancos: Luis Alberto Heber, Omar paganini y Azucena Arbeleche. La cuarta era Moreira, que responde a Cabildo Abierto.

Luego de unos minutos de la “charla técnica”, la ministra de Vivienda y Medio Ambiente volvió a sala. Allí la esperaba su esposo, Manini Ríos, quien la saludó con un beso y conversaron un rato con otros asesores preparando su disertación. Es decir, las respuestas a las preguntas que el propio diputado cabildante había planteado.

El presidente se quedó un rato escuchando la explicación de la ministra de Economía. Su presencia fue también un respaldo, no solo a la bancada de diputados, sino a los integrantes de su gabinete, en la primera interpelación que debió afrontar su gobierno.

“¿Se puede resumir en la palabra apoyo su presencia acá?”, le preguntó una periodista. Ante esto, Lacalle Pou respondió: “Sí. Aproveché y fui a la LUC también”.

El hecho no tiene antecedentes en el nuevo período democrático que se inició en 1985. Las visitas de los presidentes al Palacio Legislativo son contadas con los dedos de una mano. Básicamente, la asistencia de los presidentes de la República al Parlamento se reducen a presencias en actos conmemorativos u homenajes. Pero no en sesiones donde las cámaras están discutiendo leyes.