Las claves elección: la remontada en el PN, la sorpresa en el FA, una coalición distinta y el arribo de Salle

Delgado apunta a unir el bloque hoy, coalición de izquierda recorrerá todo el país buscando una remontada como la de 2019 y Partido Colorado apunta a ser un socio que "cogobierne".

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Orsi y Delgado
Orsi y Delgado
Foto: archivo El País

Pese a una campaña que muchos tacharon, por lo menos, de anodina, los resultados de las elecciones de ayer dejaron sobre la mesa varias sorpresas: un Frente Amplio menos fortalecido de lo que esperaban sus militantes (y también señalaban los sondeos), una coalición que arranca con confianza la carrera hacia el balotaje y cambios importantes en cuanto a la correlación de fuerzas en el Parlamento. Aquí algunas claves de lo que nos dejó la elección.

1. El Partido Nacional no cayó en la intención de voto como pronosticaban las encuestas

En sus últimos pronósticos en la noche del pasado jueves, Cifra le dio al Partido Nacional 25%, Factum 25,1%, Equipos 24,8% y Opción 24%. Finalmente consiguió, con más del 99% de los votos escrutados por la Corte Electoral a esta hora, 26,77%. Es cierto, el número está dentro del margen de error de las consultoras, pero también es verdad que está bastante recostado sobre el margen superior.

En la tarde de ayer, incluso, los trackings que se manejaban presentaban un escenario de total paridad con el Frente Amplio, cuando la coalición unida logró superar a la oposición por más de tres puntos. 

Tres cosas para decir en cuanto a esta aparente mejora —si damos por válido lo expresado por los sondeos, que incluso llegaron a colocar a Delgado muy cerca del aspirante colorado Andrés Ojeda— en la intención de voto del Partido Nacional:

Primero: Que pese a los abucheos el día de la interna, y de lo que pensaron muchos analista y periodistas —preguntamos hasta el cansancio sobre esto en las últimas semanas—, la estrategia de Delgado de elegir a Valeria Ripoll como compañera de fórmula no parece haber tenido un costo tan importante, al menos en cantidad de votos.

Segundo: Que lo pronosticado antes de la elección, en cuanto a que el Partido Nacional votaría menos de los que obtuvo, marcó el tono de la jornada. Tras conocerse los resultados el búnker blanco fue una fiesta y Delgado se mostró como el gran ganador de la noche.

Tercero: Que pese a que el resultado fue mejor al previsto, hay un par de cosas a tener en cuenta. El Partido Nacional votó menos con Delgado que lo que logró con el hoy presidente Luis Lacalle Pou hace cinco años. El mandatario había conseguido el 28,62%. En bancas esto es, por ejemplo, un senador menos, un costo importante si se tiene en cuenta que la coalición unida no consiguió la mayoría parlamentaria en ninguna de las cámaras, y que incluso el Senado estará controlado por el Frente Amplio. Si ganara Delgado y Ripoll además de vicepresidenta se convirtiera en la senadora número 31, el oficialismo se quedaría con 15 plazas y la oposición con 16.

Festejo de Álvaro Delgado y Valeria Ripoll
Festejo de Álvaro Delgado y Valeria Ripoll.
Foto: Natalia Rovira.

2. El Frente Amplio creció, pero no lo que se esperaba

La coalición de izquierda obtuvo, según los últimos datos, un 43,94%. En 2019, Daniel Martínez consiguió un 39,01%, o sea que fueron casi cinco puntos más. También es cierto que para el balotaje la fórmula Martínez-Graciela Villar llegó al 49,01%, unos cinco puntos por encima que los obtenidos ayer por Yamandú Orsi y Carolina Cosse.

El Frente Amplio esperaba más —incluso en la tarde de ayer algunos sondeos internos de la coalición de izquierda señalaban que estaba cerca del 48%. No obstante, cuando la fórmula salió a hablar en el escenario montado sobre el NH Columbia —donde hubo un clima de desazón y militantes que no pudieron contender el llanto— aún no estaba claro que iban a obtener la banca número 16 en el Senado, al tiempo que estaba latente la posibilidad de que la coalición se quedará con 50 en Diputados. 

Con las horas, entonces, el clima interno empezó a ser más optimista que el que fue en la noche de ayer, cuando Orsi reconoció incluso que los militantes esperaban una mejor votación—también entusiasmado por lo que habían dado las encuestas. Lo que sabemos es que, por estas horas, el Frente Amplio ya tomó algunas decisiones rumbo al balotaje:

Primero: Orsi saldrá más al ruedo, luego de una campaña en la que dio pocas entrevistas y participó de pocos eventos junto a los otros precandidatos.

Segundo: Se buscará que la militancia salga a recorrer de punta a punta el país, en busca de una remontada parecida a la de 2019.

Tercero: Se afinará el discurso de la fórmula, para rebatir algo que dijo Delgado en la noche de ayer. El nacionalista sostuvo que era el único que podía garantizar gobernabilidad. Desde la coalición de izquierda se entiende que, en realidad, Orsi está en mejores condiciones para gobernar, por tener mayoría en una cámara y por haber mostrado en Canelones que puede negociar con la oposición —lo hizo para lograr sacar un fideicomiso.

Yamandú Orsi y Carolina Cosse
Yamandú Orsi y Carolina Cosse.
Foto: Ignacio Sánchez.

3. Cambió la correlación de fuerza de los socios de la coalición republicana

La meta de la campaña de Ojeda era lograr la mejor votación del Partido Colorado tras la crisis de 2002, pero no lo consiguió. Esa marca queda en manos de Pedro Bordaberry que obtuvo un 17,02% en 2009. El joven candidato quedó un punto por debajo, bastante, de todos modos, si se compara con el 12,8% de Ernesto Talvi en 2019 y con lo que los sondeos marcaban meses atrás.

Incluso, lo cierto es que los colorados, con esta votación, con el derrumbe de Cabildo Abierto y la pobre performance del Partido Independiente, se posiciona con holgura como el socio principal del Partido Nacional en el bloque. Tanto así que Ojeda hablaba ayer de una coalición “cogobernada”, cosa que no cayó bien en los socios minoritarios. 

Más allá del Partido Colorado, tres cosas podemos decir de los otros socios de la coalición.

Primero: que la caída de Cabildo Abierto fue estrepitosa. En una reciente entrevista con El País, el publicista Francisco Vernazza vaticinaba esto y advertía que el problema estaba en que Guido Manini Ríos ya no podía “vender” el combate a la inseguridad como una novedad —entre otras cosas porque este era un tema clave ya para todos los candidatos.

Con los datos sobre la mesa, podemos decir que Cabildo Abierto no entra al Senado y consigue tan solo dos bancas en Diputados. Manini Ríos dijo ayer durante su discurso que la responsabilidad de la caída era suya, entre otras cosas por no saber administrar diferencias internas dentro del partido. No obstante, es previsible que casos como el que determinó la salida del Ministerio de Vivienda de su esposa, Irene Moreira, por la entrega irregular de soluciones habitacionales y tras un pedido de renuncia del presidente Lacalle Pou, hayan tenido también algún tipo de incidencia.

Segundo: el Partido Independiente no logró crecer nada. Una vez más, la fuerza del exministro de Trabajo, Pablo Mieres, logró tan solo una banca en la Cámara de Diputados, que esta vez será ocupada por Gerardo Sotelo. No obstante, en el Partido Nacional se ha valorado mucho su capacidad de gestión y es esperable que ocupe un lugar clave en caso de ganar una vez más la coalición.

Tercero: En comparación con la foto de hace cinco años, que no se pudo sacar de forma tan inmediata como la de ayer, la imagen de la coalición tenía un socio menos en el escenario. Faltó el Partido de la Gente que no se presentó a esta elección. No obstante, detrás de Delgado en la Plaza Varela, además de los representantes colorados, cabildantes e independientes, se sumó una nueva figura: el excabildante Eduardo Lust, del Partido Constitucionalista Ambientalista. El apoyo, sin embargo, va a ser más bien testimonial, puesto que Lust no consiguió entrar al Parlamento, logrando menos del 0,5% de los votos. Con esta paridad, sin embargo, ningún sufragio es despreciable.

Delgado apunta a unir a todo el bloque hoy, ya empezando a trabajar en el "Compromiso por el país 2", con la idea de que este pueda ser firmado dentro de pocas horas.

Delgado: el candidato del Partido Nacional logró rápidamente la foto junto a todos los postulantes de la coalición.
Delgado: el candidato del Partido Nacional logró rápidamente la foto junto a todos los postulantes de la coalición.
Foto: Darwin Borrelli.

4. Un distinto

Por último, al mapa electoral nacional se suma un nuevo actor, Gustavo Salle, que aunque no consiguió entrar al Senado, sí logró quedarse con dos bancas en la cámara baja. Por estas horas, en ninguno de los bloques se ve a Salle como un potencial socio.

De cara al balotaje, el excéntrico abogado y líder del nuevo partido Identidad Soberana, ya llamó a anular el voto. Y marcó el tono de lo que será su papel en el Palacio Legislativo: "Tenemos dos diputados en la cueva de los vende-patria, estamos cambiando la historia, llegó Identidad Soberana al Parlamento", declaró ayer tras conocerse los primeros resultados.

Primera vuelta. Gustavo Salle en una noche de euforia.
Primera vuelta. Gustavo Salle en una noche de euforia.
Foto: Darwin Borrelli.

Tras la extensa jornada de ayer, faltan tan solo cuatro semanas para que se devele quién será el nuevo presidente. Apenas un mes en el que la efervescencia electoral promete ser mucho más intensa que hasta el pasado domingo.

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