Redacción El País
El futuro subsecretario del Ministerio de Salud Pública, Leonel Briozzo, defendió este martes sus dichos sobre que la ley de interrupción voluntaria del embarazo trajo “felicidad pública”, expresión que le valió una serie de críticas desde el Partido Nacional.

Briozzo aseguró que antes de la normativa el aborto era una de las principales causas de muerte de las mujeres en Uruguay, y que a partir de la normativa instrumentada en 2012 se buscó que la intervención médica fuera segura, accesible e infrecuente, objetivos que, según dijo, se lograron en todos los casos.

En diálogo con Desayunos Informales (Teledoce), mencionó que un aborto seguro refiere a "que las mujeres no arriesgaran su vida al tener que hacerlo". Que fuera accesible es "que las mujeres allí donde estuvieran, si precisaban acceder a un aborto, lo tuvieran". Con respecto a la caracterización de infrecuente, refiere a "que el número de abortos se disminuyera con el correr del tiempo, y que fuera controlado".

"Esos tres objetivos se lograron. Somos uno de los países con menor tasa de abortos cada mil mujeres de entre 15 y 44 años", expresó y agregó que a "ley ha cumplido su objetivo".

Foto: Ignacio Sánchez

Mencionó que "esta es una buena ley para las mujeres" pero también "para las infancias" porque "antes cuando una mujer moría por un aborto en muchísimos casos dejaba hijos a su cargo huérfanos, y esos hijos aumentaban proporcionalmente el riesgo de muerte", y por tanto "aumentaba el riesgo de la mortalidad infantil". Finalmente, dijo que la ley es beneficiosa "para la sociedad toda".

"Desde mi punto de vista trajo una descompresión de esta situación que antes generaba terror, que le puede ocurrir a cualquier mujer en cualquier entorno pero mucho más en los entornos más desfavorecidos. Por tanto lleva un alivio social", expresó.

"Mi única intención con el razonamiento de la felicidad pública es que, como decía Artigas, los más infelices sean los más privilegiados", y que "la felicidad pública no es la suma de la felicidad privada sino evitar el sufrimiento innecesario", apuntó.

Briozzo expresó, por otro lado, que le han dicho "muchas barbaridades" por su concepto. "Esto no va en contra de la espiritualidad de nadie, yo provengo de una familia católica, respeto totalmente la espiritualidad religiosa de todas las religiones y entiendo las concepciones diferentes que puede haber de esto. Lo que no acepto es el fundamentalismo religioso de que porque yo tengo una convicción religiosa te la voy a imponer a vos, que pensás distinto", consideró.

El futuro subsecretario mencionó que "esa es la base del odio", y concluyó: "Somos un país laico y tenemos que seguir siéndolo".