El Ministerio de Desarrollo Social (Mides) cursó en las últimas horas una invitación formal a todos los legisladores que integran las comisiones de Población y Desarrollo del Senado y de la Cámara de Diputados, para que puedan conocer de primera mano cómo se está implementado el nuevo Plan de Alimentación Territorial (PAT), que esa secretaría comenzó a implementar con el objetivo de fortalecer y expandir el sistema de comedores en las áreas más necesitas de la zona metropolitana.
Se trata, en la práctica, de una invitación para que los legisladores puedan ir a "degustar" los alimentos que se están distribuyendo a través de alguno de los 25 "puntos ágiles" que conforman la columna vertebral del nuevo programa. Todo esto en el regreso del viejo debate que el oficialismo y la oposición mantienen desde hace varios años sobre sus respectivas visiones en torno a las políticas sociales y que tuvo un nuevo capítulo este miércoles cuando el ministro Martín Lema concurrió al Parlamento a dar detalles de este nuevo plan.
Se trata de que los alimentos sean entregados en forma congelada, para que los usuarios los calienten en sus propios hogares. "No hay nada más digno para las personas que tengan alimentación para comer en su casa con sus afectos, sus familiares", resaltó el ministro y explicó que el plato puede calentarse a baño María y es entregado en viandas.
Los platos pesan de 420 a 500 gramos y tienen unas 800 calorías, lo que según el ministerio no solo satisface las necesidades calóricas y nutricionales, sino que también "les da sentido de saciedad" a los beneficiarios. En cuanto al "menú", fueron probadas más de 90 variedades, de las que 70 fueron aceptadas en las empresas que resultaron adjudicatarias para encargarse del plan.
Tres veces por semana habrá carnes rojas, dos veces por semana será el turno de pollo o pescado y otras dos veces arroz o pasta. En cada preparación habrá verduras variadas, y cada plato irá acompañado de un pan.
Incluyendo los gastos asociados a la logística del plan, el costo de cada plato para el Mides será de $ 139 en los centros fijos y de $ 220 en los centros móviles.
Los "puntos móviles" consisten en realidad en vehículos que permitirán una mayor cobertura y alcance en el suministro. En concreto, según cifras oficiales, a través del nuevo plan podrán entregarse unas 10 mil viandas por día. Las empresas adjudicatarias deberán poner el transporte y la cadena de frío.
Durante la sesión el Frente Amplio marcó algunas interrogantes sobre la efectividad del plan. La senadora Sandra Lazo dijo entender que, a través de "ollas populares" -a las que el Mides dejó de apoyar para implementar el nuevo programa- "cubrían un margen bastante más amplio de población". Lazo se preguntó de qué manera se asignan las viandas y con qué criterios.
En el Mides, en cambio, se dice que a través del PAT se distribuyen más alimentos. Son 10 mil viandas frente menos de 8 mil porciones diarias que se entregaban a través de las "ollas". También aludió una serie de denuncias que apuntan a personas iban a retirar alimentación pero no la precisaban, o que incluso vendían las porciones que recibían.
INDA "desmantelado"
En el Parlamento Lema dijo haber heredado un INDA "desmantelado" y con graves problemas de gestión, sin las condiciones adecuadas para cumplir con su cometido. Según dijo, en todo el país el instituto contaba con cuatro nutricionistas. Hoy, son 15. Los depósitos del organismo, apuntó, se llovían e inundaban.
El plan permitió pasar de cuatro a 25 los centros de entrega de alimentos en el área metropolitana, los siete días de la semana.
Según Lema, el PAT también sirvió para contar con información. En julio del año pasado un estudio señaló por primera vez dónde estaban las principales adversidades en materia alimentaria. Fue a partir de 8.264 casos, medidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE) . Un trabajo que, indicó, le permitió al ministerio "entrar al área chica" en cuanto a la gestión y a acciones más eficientes. Esa muestra indicó que la zona metropolitana y el noreste del país representan los mayores desafíos.
Antes de la pandemia, el Sistema Nacional de Comedores atendía a menos de 8 mil personas. Según el Mides se pasó a 18 mil en mayo de 2020, a apenas dos meses de decretada la emergencia sanitaria. El "pico" llegó en agosto de ese año, con 25 mil usuarios.