AFINAN PROPUESTA
Manini adelantó que tienen propuestas “para mejorar”, porque entiende que el plan tiene una “serie de falencias”; Sanguinetti marcó tres ajustes que deberían hacerse.
A un mes de que el presidente Luis Lacalle Pou presentara el anteproyecto de la reforma de la seguridad social a los socios de la coalición, los partidos empezaron a afinar sus pedidos de modificaciones al articulado.
El líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, le planteará hoy al mandatario las objeciones de su partido. Ya adelantó ayer que tienen propuestas “para mejorar”, porque entiende que el plan tiene una “serie de falencias”. Por otra parte, el secretario general del Partido Colorado, Julio María Sanguinetti, marcó tres ajustes que deberían hacerse, al mismo tiempo que aclaró que continúan analizando el documento.
Manini Ríos, consultado por el programa radial Doble Click (Del Sol) sobre qué hará su partido si no se toman los cambios que plantean, respondió: “Hay puntos que son realmente muy importantes y, si no se recogen, no tendrá nuestro apoyo, por supuesto”. Pero luego matizó: “Todo esto va a tener un proceso parlamentario y seguramente podrá haber mejoras en nuestra propuesta. No es tampoco ‘blanco o negro’, y ‘si esto no me lo llevás...’, pero creemos que nuestra propuesta va en el sentido de mejorar este anteproyecto”.
En el Partido Colorado, como dijo Sanguinetti, todavía continúan analizando el anteproyecto del gobierno. Pero, tal como anunció el sábado pasado el expresidente y actual secretario general, la postura es de apoyo a la propuesta del Poder Ejecutivo en “líneas generales”, lo cual no significa que no haya varios ajustes y planteos a proponer.
En diálogo con El País, Sanguinetti aseguró que pese a que ya están identificados algunos problemas del texto, con el paso de las horas esas observaciones van a ser afinadas. “No hemos dado todavía una opinión definitiva -precisó el secretario general de los colorados- porque nos falta información sobre los números”.
Pero sí hay al menos tres puntos, continuó Sanguinetti, en los que se presentan ciertos reparos. El primero de ellos refiere al nuevo sistema de pensiones por viudez que el gobierno busca instalar y que ya generó críticas tanto en Cabildo Abierto como en el Partido Independiente, en el entendido de que podría ser más beneficioso con los afectados.
En concreto, lo que propondrán los colorados es que la edad mínima para recibir esa pensión debería situarse “al menos en 50 años”, cuando el texto actual marca como piso “la edad normal de jubilación (65 años) o más” para recibirla toda la vida, a partir de que haya pasado el régimen de transición -pues mientras dure el período transitorio, de unos 20 años, el beneficio alcanzará a los que tengan al menos 55 años. El límite actual, evaluaron los colorados, “es demasiado elevado”.
Como un segundo punto, agregó Sanguinetti, su partido busca que “no se achate demasiado la pirámide jubilatoria”, de manera de buscar “un equilibrio con el sector más intermedio” de la estructura. “La colcha es una sola -explicó el exmandatario-. Uno la puede estirar un poco más para un lado o para el otro. El principio de solidaridad es importante, pero hay un principio de equilibrio en el que hay que encontrar una correlación”.
Como tercer punto, concluyó, los colorados plantearán “la necesidad de introducir modificaciones para algunos sectores especiales, como en el caso de los policías”, cuyo régimen jubilatorio también sufrirá cambios importantes. “Todo esto está, de todos modos, en curso de análisis”, dijo Sanguinetti.
Por otro lado, ante la consulta acerca de cuál sería la posición del Partido Colorado en caso de no tener suerte con estos planteos, el líder de Batllistas dijo que su partido “trabaja constructivamente en busca de soluciones”.
“No es nuestro modo insinuar un rechazo categórico”, aseguró, distanciándose de las declaraciones que hizo Manini Ríos ayer de mañana.
Por otra parte, Cabildo Abierto, según declaró ayer su líder, cree que se realizan “cambios en las bonificaciones que no tienen mucho sentido”, y se refirió a una reducción a la policía ejecutiva. Además, entiende que no se respetó la recomendación que realizó la Comisión de Expertos en Seguridad Social -creada por el gobierno para que presentara una propuesta de reforma- sobre “cuándo tiene que estar efectivizada la transformación”.
Por otro lado, fuentes del Partido Independiente indicaron que ven con “buenos ojos” el anteproyecto que llegó desde Poder Ejecutivo, y que están “alineados”. No obstante, marcaron que tienen diferencias con lo dispuesto en la reforma para las pensiones de sobrevivencia e incapacidad. “Hay una reducción importante de los montos pensionarios y de los caudales”, añadieron.
La apertura a los cambios es algo que el presidente Lacalle Pou dejó siempre en claro. El 31 de julio, de hecho, cuando fue hasta la sede del Frente Amplio para entregar el texto a Fernando Pereira, dijo en rueda de prensa que se aceptará toda modificación “en tanto y en cuanto no pierda coherencia o sustancia el proyecto”. “Nosotros vamos a tratar de tener la base más amplia de acuerdos políticos sin desvirtuar” la iniciativa, reafirmó.
Después de la rendición
La discusión parlamentaria comenzará en la Cámara de Senadores, pero esto no será inmediato, pues en este momento se encuentran casi 100% abocados al proyecto de Rendición de Cuentas. Allí quedan grandes temas por solucionar, como la eventual compensación económica por la eliminación del adicional del Fondo de Solidaridad y qué harán con la Ley de Medios, ya que la propuesta de derogación que envió el Poder Ejecutivo no tuvo éxito en Diputados. La situación, naturalmente, postergará el abordaje del proyecto de la reforma previsional al menos hasta octubre, cuando ya esté aprobada la norma presupuestal.
El tratamiento parlamentario de la reforma se hará en el marco de una comisión especial, tal como ocurrió antes con la Ley de Urgente Consideración (LUC).