ENCUESTA ELECTORAL

A las ocho de la mañana del domingo 27 de setiembre, abrirán los circuitos electorales para los comicios departamentales. Son 2.694.371 los ciudadanos que están obligados a concurrir a las urnas ese día: con tapabocas, guardando la distancia y sin lamer el sobre para sellarlo. Pero la cuarta parte de los montevideanos desconoce que este mes hay elecciones, y seis de cada diez no saben el día exacto de este acto cívico.

El desinterés en la política, el desgaste de una elección nacional reñida, el macrocefalismo de Montevideo que le da más importancia al gobierno central que a los otros niveles de gobierno, y el contexto del COVID-19 -que obligó a posponer la fecha de votación y a reducir la inversión publicitaria- parecerían ser las causantes de este escenario de desconocimiento electoral que evidencia la última encuesta de la consultora Factum.

Tanto es así que, a mayor interés en la política, mayor conocimiento de la fecha de los sufragios. Mientras casi la mitad de los montevideanos (47%) muy interesados en la política afirman que el domingo 27 serán las elecciones, solo el 23% de los desinteresados conoce el día exacto.

Esas mismas diferencias se hacen notorias entre las clases sociales (los más ricos son los que conocen mejor la fecha), entre los municipios (aquellos de la costa sureste son los que más saben), y entre los sexos (las mujeres están más informadas).

Pero hay una variable que hace la diferencia más que las otras: la edad. Ocurre que en el sondeo de Factum, realizado a un mes de las elecciones y a cuyos resultados accedió en exclusiva El País, muestra una escalera en que a medida que se sube en los escalones de edad, también se incrementa el conocimiento.

“Dentro de poco va a haber elecciones departamentales, ¿conoce cuándo son?” Cuando la consultora hizo esa pregunta por teléfono fijo y celular, el 23% de los menores de 32 años respondió el 27 de setiembre. Entre los 33 y 47 años ese porcentaje ascendió al 34%. Entre los 48 y 60 años creció al 45%. Y entre los mayores de 61 años trepó al 62%.

Las teorías de Ciencias Políticas sugieren que, ante el desconocimiento, los candidatos más conocidos son los que se favorecen. Mucho más en una elección departamental que, hace varias ediciones, viene confirmando ser aliada de los incumbents (del inglés: aquel que ocupa la titularidad de un cargo). No en vano, desde 1989 hasta 2015, más de la mitad (52,9%) de los candidatos que aspiraban a una reelección la consiguieron.

Según un estudio de los cientistas políticos Antonio Cardarello y Martín Freigedo, tras la reforma electoral se acentuó aún más el éxito de quienes van por la reelección. Y eso, combinado con el desconocimiento de la marcha electoral, podría favorecer a uno de los 11 incumbents de esta elección del último domingo de setiembre.

La visibilidad y trayectoria de los candidatos es clave en los sectores menos informados, dijo el sociólogo Eduardo Bottinelli. Sin embargo, “el desconocimiento de la fecha de elección, a diferencia de las elecciones internas, no debería favorecer o perjudicar a nadie en particular, dado que el voto es obligatorio mientras que las internas son voluntarias y ahí sí puede tener un efecto”.

¿Será así? El 27 de setiembre se sabrá la respuesta.