ELECCIONES

José Mujica, expresidente y eventual ministro de Ganadería si gana el oficialismo, dijo este jueves en "Informativo Sarandí" que ha "salido a chancletear, a juntarle votos (a Daniel Martínez)", pero aclaró que "donde a uno no lo invitan no es diplomático ir".

Consultado sobre si el candidato del Frente Amplio "se cortó solo" en la campaña, respondió: "Si Martínez estuvo solo es por sus convicciones".

"Cada vez que nos pidieron estar, estuvimos. Ahora, si no nos pidieron, no estuvimos, obvio. Donde a uno no lo invitan no es diplomático ir", agregó.

"En algún momento a las vacas sagradas hay que carnearlas, porque están viejas. Eso lo sabe cualquier tambero aunque la vaca dé 40 litros", sumó.

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Por otra parte Mujica opinó sobre Guido Manini Ríos, líder de Cabildo Abierto: "Es un hombre inteligente pero tiene un matiz muy conservador que le está haciendo perder la posibilidad de ser un puente neutral".

"Hay una deuda que no está saldada y si aparece un milico de categoría que no plantee la rispidez, ayudaría a mejorar ese entendimiento hacia el futuro", sostuvo.

"Al general le ganó el partido la pata del viejo Partido Colorado conservador, no Batllista. Se dejó rodear de un esqueleto excesivamente reaccionario, pero es algo que está en proceso. Con el tiempo veremos las patas de la sota", añadió.

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Sobre qué resultado espera para el balotaje del próximo domingo ante el nacionalista Luis Lacalle Pou, dijo que está "complicado el partido, pero se dará lo que nos toque".

Consultado sobre si una caída puede generar resquebrajamientos en la interna del Frente Amplio, expresó: "Las derrotas son como la culpa: no las quiere nadie. Se empiezan a pasar facturas y eso solo sirve para destrozarse, se pierde objetividad". 

En ese sentido, Mujica remarcó que eso es "un vicio de las izquierdas" que "dan un valor preponderante a las ideas, mientras que las derechas lo hacen con los intereses".

Respecto a si un triunfo de la oposición puede derivar en una crisis similar a la Argentina, señaló: "Alguna gente puede pensar eso, pero Uruguay tiene sus características propias. Es suavemente ondulado. Nunca se queda quieto, pero se va a los extremos".

Anoche, en el acto de cierre de campaña, Martínez alertó por riesgo de "terminar como Argentina".