Redacción El País
El senador colorado Adrián Peña le dio ayer estado parlamentario a la propuesta que el comisionado Juan Miguel Petit presentó para modificar las decisiones en torno a la prisión domiciliaria. La propuesta, la cuarta que está en discusión, es la única que reúne las mayorías necesarias para ser aprobada. Pone en manos del juez la decisión de conceder, caso a caso y a partir de informes técnicos, este beneficio, que no será concedido en forma preceptiva más allá de la edad del interesado. El análisis no se basará tampoco en los delitos cometidos, sino en las circunstancias de cada persona en particular. Para ello establece seis causales. “Sobre esta base es que vamos a negociar”, dijo Peña a El País. El nuevo proyecto también recibe el apoyo del Frente Amplio, según confirmó el senador Charles Carrera.
Por sí solos, colorados y frenteamplistas cuentan con los votos para su aprobación sin más trámite en el Senado, pero la intención es sumar al acuerdo a otras fuerzas políticas. En particular al Partido Nacional, que acaba de presentar otro proyecto hace pocas semanas. Cabildo Abierto sigue aferrado al suyo propio, que establecía la prisión domiciliaria en forma preceptiva para los mayores de 65 años y que, según sus detractores, estaba dirigida a beneficiar a los presos de la cárcel de Domingo Arena.
Un proyecto con seis causales
El nuevo texto prevé prisión domiciliaria en casos de graves problemas de salud o de discapacidad severa, de madres a partir del quinto mes de embarazo o en el primer año de lactancia, o cuando esté a cargo de un niño menor o con discapacidad. También a mayores de 65 años, cuando la prisión atente contra su salud o su dignidad.