El directorio de OSE adjudicó este miércoles el Proyecto Arazatí al Consorcio Aguas de Montevideo —promotor de la iniciativa—, integrado por las firmas uruguayas Saceem, Berkes, Ciemsa y Fast Industria e Comércio LTDA, de Brasil, informó Búsqueda y confirmó El País.

El consorcio realizará una inversión de alrededor de US$ 300 millones, lo que representa 16,5% más del estimado por OSE (US$ 253.200.000). En tanto, la firma estatal pagará casi US$ 900 millones, en 17,5 años, a razón de unos US$ 50 millones anuales.

La resolución de OSE señala que el "monto total contractual" es de 5.377.271.690 Unidades Indexadas (UI), más IVA, pagado en 17,5 años. Sin IVA, el monto llega $ 31.102.139.454, unos US$ 799.540.860, a valores de este miércoles del Banco Central.

El director de OSE por el Frente Amplio, Edgardo Ortuño, publicó en su cuenta de Twitter gráficos en los que da cuenta que la inversión del consorcio será tres veces menos a lo que deberá pagar la empresa estatal. El cálculo de inversión de US$ 304 millones surge de US$ 295 millones y US$ 9 millones de mantenimiento.

La cifra de US$ 890 millones por este proyecto, tal como adelantó tiempo atrás el director y el sindicato Ffose, se compone de US$ 798 millones del pago anual total por disponibilidad (US$ 45,6 millones anuales), sumado a US$ 88 millones de costos operativos y US$ 4,3 millones de expropiaciones y servidumbres de tierra.

Ortuño, además, apuntó a la "gestión privada" del proyecto y al precio final que pagará la empresa estatal. "El gobierno elige hacer Arazatí a un costo millonario, en soledad y debilitando OSE", indicó en su cuenta de Twitter. "Se requieren un conjunto de obras, recursos y acuerdos nacionales que lo sustenten", acotó.

Fuentes de OSE indicaron a El País que la inversión del consorcio ganador, de 16,5% por encima de lo proyectado, está "dentro del porcentaje aceptable" en la relación entre la oferta ganadora y el precio de oficina estimado, menor al 20%. Este porcentaje, agregaron, es tomado así por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Mundial (BM), entre otros organismos.

La operación del proyecto será de OSE. El consorcio va a financiar, construir y mantener la obra por el plazo estipulado. Fuentes del grupo ganador dijeron a El País que el precio en UI propuesto a OSE se ubica en este orden desde "hace un buen tiempo".

También plantearon que no se puede comparar el valor de una obra con un pago financiado, como ocurre como en proyectos de Participación Público Privada (PPP) en rutas, escuelas y otras áreas.

El proyecto, "supeditado a la intervención preventiva de legalidad del Tribunal de Cuentas (TCR)" y que se comenzará a construir una vez firmado el contrato, busca "reducir" la vulnerabilidad del abastecimiento de agua potable para el sistema metropolitano, que hasta ahora depende de la Usina de Aguas Corrientes, señaló OSE.

Otro de los objetivos de Arazatí es dotar a OSE de una nueva fuente de abastecimiento de agua bruta, con una capacidad de toma del Río de la Plata de hasta 300.000 m³ por día.

También incluirá una nueva planta potabilizadora con una capacidad de producción de hasta 200.000 m³ por día, un tercio del consumo diario actual. A su vez, podrá satisfacer hasta un 25% de la demanda máxima hacia el año 2045.

La obra sumará una tubería de aducción de 1.200 milímetros de diámetro para trasvasar hasta 200.000 m³ por día desde la planta de potabilización en el maragato Puerto Arazatí hasta un recalque en Melilla y los tanques de Cuchilla Pereira.

Una Comisión Asesora de Adjudicación de Licitaciones Especial, de OSE, estudió dos ofertas. La segunda, que no prosperó, fue la del Grupo Arazatí conformado por las empresas Teyma y la Compañía Electrotécnica Industrial (CEI). Dicha comisión concluyó su actuación con un informe "fundado en una propuesta de adjudicación a la oferta calificada de menor precio de comparación de ofertas".