El senador nacionalista Sergio Botana oficializó en el Parlamento su proyecto de ley que plantea modificar la vigente ley de Descentralización, uno de cuyos aspectos centrales pasa por que toda población de más de 1.000 habitantes deba, obligatoriamente, pasar a ser considerada un municipio. La iniciativa fue recibida por sus colegas como una "gran oportunidad" para debatir e incluir otros aspectos referidos al tercer nivel de gobierno.

El tema comenzó a ser debatido en la Comisión Especial de Asuntos Departamentales y Municipales. En el Frente Amplio, la senadora Sandra Lazo ratificó en la última sesión de ese ámbito el apoyo de su formación al espíritu del proyecto, en cuanto a la creación de municipios y el "fortalecimiento" de la descentralización. En el mismo sentido se pronunció el colorado Germán Coutinho, para el que el proyecto representa un "buen disparador" para replantear algunos aspectos que se pueden mejorar y corregir, además de incorporar otros elementos que no se habían incluido en leyes previas. Por ejemplo, en lo que refiere al pago por voto al alcalde, algo que sí existe en el resto de los ámbitos electorales.

En el último ciclo electoral a nivel nacional le pagó a cada partido el equivalente en unidades indexadas a US$ 10 por cada voto que recibió en octubre de 2019.

Coutinho reparó allí en que "todo aquel vecino" que presenta ese cargo deber hacerlo y contar con recursos sin ninguna contrapartida. "Este es el lugar y el disparador para analizar por qué tenemos un voto a la elección nacional, con un monto razonable e importante, pero por qué no se paga el voto municipal", reparó. "De verdad me parece que es correcto, bueno y debemos incluirlo", señaló Botana.

El senador colorado planteó además la posibilidad de buscar la "rentabilidad" de cargos como los concejales, que hasta hoy son honorarios. "Capaz que hay mucha diferencia en cuanto a que un alcalde cobre el salario que a veces cobra, contra sus compañeros que no cobran nada", señaló. Algo que, dijo, puede generar situaciones en donde estos últimos no sientan "el mismo compromiso" a la hora de trabajar por el municipio.

"Consideraría muy bueno dar esta discusión" expresó al respecto Botana, al recordar que esta posibilidad fue omitida en su momento por falta de consenso para alcanzar acuerdos generales. Allí recordó que, muchas veces, un concejal asume la responsabilidad de controlar cuantiosos recursos, lo que supone una tarea que excede a una "simple comisión de vecinos".

Actualmente hay 125 municipios en todo el territorio nacional, cada uno integrado por un alcalde y cinco concejales.

Botana señaló que su proyecto pretende clarificar y dar una definición clara de las competencias de los municipios, y así evitar "contiendas" con el intendente o, directamente, casos en que las comunas "no le dan" al municipio los elementos para pueda ejercerlas.

Con respecto a los recursos, se busca asegurar un "mínimo" de fondos departamentales y abrir la posibilidad de que los municipios cuenten con otro tipo de fondos que se vayan legislando en el futuro "si encontramos nuevas fuentes". También se plantea que el alcalde sea el ordenador de gastos sin tener que contar con el aval del concejo.

En materia electoral, el proyecto de Botana recoge una vieja propuesta del exintendente frenteamplista de Rocha, Aníbal Pereyra. Allí se propone que, al igual que intendentes y ediles concurran los candidatos a alcalde y sus respectivos suplentes y, que en la misma lista pero por separado, lo hagan los concejales. "Con esto evitaríamos circunstancias conocidas por todos en las que la Corte Electoral, de acuerdo a su criterio, es la que decide quién debe sustituir a un alcalde", señaló el senador. Como ejemplo, planteó lo sucedido en el Municipio CH de Montevideo, cuando tras la muerte de Andrés Abt quién lo sustituyó fue la tercera titular de su lista, Matilde Antía, y no el segundo, Álvaro Maynard, que había sido electo concejal. Se conserva la prohibición de votar "cruzado" candidatos de uno y otro ámbito.

El proyecto plantea la posibilidad de que el municipio pueda contar con funcionarios propios, pagados con sus propios recursos, que nunca podrán adquirir la calidad de funcionarios departamentales, salvo que la intendencia los absorba. Según Botana, el objetivo es que las alcaldías puedan contar con "alguna mano de obra propia" cuando sea necesaria, sin que esto signifique realizar nombramientos que luego terminan afectando las finanzas globales del departamento.

Por otra parte, el senador nacionalista apunta en su propuesta a resolver el viejo diferendo sobre las responsabilidades políticas de los municipios. Así, se establece que las juntas departamentales tendrán sobre las alcaldías los mismos controles que ejercen sobre las intendencias.