Redacción El País
El secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, se pronunció este miércoles sobre la reciente imputación por 22 delitos sexuales del exsenador nacionalista Gustavo Penadés. Planteó que "son días dolorosos", pero rechazó la postura de la oposición al plantear que existió un encubrimiento estatal de una "investigación paralela" a manos de efectivos policiales.

"Hay que separar lo que puede pasar a veces que son policías corruptos que se apartan de la norma y del uniforme azul, de lo que juran a cuando empiezan a actuar al salir de la Escuela Policial. Se apartan de eso y cometen algún acto de ilegalidad, eso no es la institución policial", sostuvo el secretario de Presidencia este miércoles en rueda de prensa, y agradeció que "la institución policial" siga estando "sólida".

"Yo no le puedo aceptar al Frente Amplio decir que el aparato del Estado estuvo para cubrir cosas o para hacer una investigación paralela, que pudo haber un oficial corrupto sí, puede ser, parece que lo hubo", planteó. "Si lo hubo que los procesen, que los formalicen y que les apliquen todas las penas necesarias".

Para Delgado, no se trata de un hecho "imputable a Luis Alberto Heber", ya que a quién le debe caer el peso de la ley es a los policías corruptos que, en este caso "la propia Policía" descubrió.

Consultado sobre si este hecho podría condicionar el panorama político, el secretario de Presidencia fue firme: "no es el momento de andar con la calculadora política", ya que sostuvo que se trata de un tema "dolorosamente histórico" que prefiere tomar con calma. Negó además que estos hechos puedan alterar la próxima campaña electoral ya que no involucra a los partidos políticos.

"Si empezamos en la campaña a hablar de conductas personales nos vamos a parecer a otro tipo de país que no queremos en Uruguay", dijo. Pero en cambio, en el país "la justicia tiene independencia y actúa con independencia donde nadie es más que nadie acá", concluyó.