Redacción El País
El futuro prosecretario de Presidencia en el gobierno de Yamandú Orsi, Jorge Díaz, planteó que "no es razonable pensar que los delitos violentos como las rapiñas bajan y el homicidio se mantiene", tras conocerse las cifras de delitos de 2024 presentadas por la actual administración.
Las cifras de delitos del año pasado muestran que las denuncias de rapiñas cayeron 22%, las de hurtos 5,7% y los homicidios están en una “meseta”, aunque respecto de 2023 hubo 1% menos, como adelantó El País.
Al ser consultado sobre si estas cifras muestran un panorama alentador para la próxima administración, Díaz respondió que no y que "la situación es compleja" porque existen delitos que no se denuncian, dijo en diálogo con Doble Click (Del Sol FM).
"Estas son cifras de denuncias y la metodología o la forma de analizar la realidad en materia de seguridad es a través de encuestas de victimización", defendió Díaz.
Apuntó a que existe "lo que se conoce como una cifra negra" que son "delitos que no se denuncian por diferentes razones" y que "la perspectiva de la no aclaración del delito es uno de los factores principales por el cual la gente deja de denunciar y si no se incentivan las denuncias también se deja de denunciar".
"Puede haber una posibilidad de cifra negra por un lado y de subregistro por otro, pero no es una metodología clara", sentenció.
El exfiscal de Corte explicó que hay una diferencia entre estos delitos y el "delito testigo" que es el delito de homicidio: "Porque el muerto está ahí, no se pueden subregistrar los homicidios, hay un dato de la realidad".
"El delito testigo es el homicidio, no es razonable pensar que los delitos violentos como las rapiñas bajan y el homicidio se mantiene", dijo Díaz y aclaró que si bien los asesinatos pueden "tener múltiples causas", generalmente se producen en contextos violentos e insistió: "Cuando la violencia aumenta, no es razonable pensar que los demás delitos bajan, sobre todo los delitos violentos".
Además del cambio en la manera de medir, Díaz señaló que "mientras la seguridad sea una especie de botín político por el cual los partidos se disputan, y estemos comparando mis muertos con tus muertos, la realidad no va a cambiar".
Designación del fiscal de Corte
Para Díaz, el gobierno electo tendrá "una oportunidad histórica" ya que en el próximo quinquenio quedarán vacantes los cinco puestos en la Suprema Corte de Justicia y algo similar ocurrirá en el Tribunal de lo Contencioso Administrativo.
"La información objetiva es que hay que renovar prácticamente la totalidad de los dos principales tribunales de Justicia del país" y "en ese contexto está el fiscal de Corte y el adjunto". Para Díaz, la única solución es "sentarse a negociar y hablar".
Pese a que se abstuvo de dar nombres, dijo tener "la apertura mental" para reunirse "con algunos o con todos los dirigentes de los partidos con representación en el Senado" para encontrar a una persona que tenga el mayor respaldo posible.
Defendió que la designación de un fiscal de Corte está en los programas de gobierno de los tres principales partidos (Frente Amplio, Partido Nacional y Partido Colorado) por lo que no conseguirlo sería un reflejo de que "algo no está funcionando bien en la democracia".