Redacción El País
Pese a que este jueves Carlos Albisu renunció a su cargo como presidente de la delegación uruguaya en la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande en medio de una polémica surgida por contrataciones directas, en especial de militantes del oficialismo, el Frente Amplio (FA) y Cabido Abierto (CA) mantienen en pie la interpelación que votaron por este tema.
Los ministros de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, y de Relaciones Exteriores, Francisco Bustillo, deberán ir al Parlamento a dar explicaciones sobre el destino de los fondos que se adjudicaban a la CTM. Es que, a entender del FA, promotor de la interpelación, en esa institución hay indicios de clientelismo.
El miembro interpelante, el diputado frenteamplista Nicolás Viera, dijo que pretenden seguir “en igualdad de condiciones con la interpelación”, que está pactada para el 3 de octubre. Es que “con esta renuncia arriba de la mesa” se confirma, a entender del FA, que “se consumaron irregularidades en la gestión de la delegación uruguaya de Salto Grande”.
Además, para Viera “la responsabilidad en este caso no es solo de Albisu, para empezar es del presidente de la república (Luis Lacalle Pou) que nombra los integrantes de la delegación uruguaya”.
Afirmó que necesario “revisar todos los contratos que ingresaron de manera directa”. “Queremos saber cuál es el alcance del contralor que hace el Ministerio de Economía y Finanzas de los recursos públicos y cuál es la responsabilidad política del Ministerio de Relaciones Exteriores”, añadió.
En tanto, del lado de CA quien opinó fue el líder, el senador Guido Manini Ríos, quien dijo en rueda de prensa que “es importante” que Albisu “haya dado el paso al costado”, pero “ahora habrá que ver qué pasa con los distintos asuntos que llevaron a esta situación”, según consignó Subrayado.
Por ejemplo, preguntó “qué pasa con los 11 ediles contratados por Salto Grande”, cuyas vinculaciones “despiertan al menos las dudas en la opinión pública”. “Yo pienso que el tema de fondo no está solucionado”, sentenció.