El presidente del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), Guillermo Fossati, le pidió este miércoles la renuncia a la directora de INAU en Rocha, Élida Bentancor, la que fue presentada en esta misma jornada.

Trabajadores de esa dependencia estatal habían denunciado en una carta dirigida a las autoridades de INAU una serie de hechos que configuran acoso laboral y además negligencia en el servicio de protección a niños, niñas y adolescentes, lo que vinculan a un abuso sexual infantil.

“La renuncia se la pedimos hoy y ya fue recibida”, informó Fossati a El País tras un encuentro vía Zoom con Bentancor y el vicepresidente de INAU, Aldo Velázquez. El presidente de INAU explicó que su pedido de renuncia responde a “una acumulación de episodios y situaciones”, y agregó que “lejos de imaginar que hay una luz al final del túnel, lo que se veía era oscuridad; por lo tanto, correspondía tomar la decisión”.

El directorio de INAU se reunirá este jueves para tratar la renuncia presentada. Fossati (Partido Nacional), Aldo Velázquez (Cabildo Abierto) y la directora de INAU en representación del Frente Amplio, Natalia Argenzio, deberán definir quién asume el cargo.

El cargo de dirección departamental de INAU es de confianza política y Bentancor solía recordar su vínculo con el Partido Nacional.

En una carta enviada a Fossati el 3 de julio, funcionarios de INAU Rocha denunciaron acoso y amenazas contra trabajadores. “No es posible conciliación alguna debido a la magnitud de los hechos que aquí se denuncian”, advertían. INAU abrió una investigación para determinar si hubo acoso laboral.

Luego, el 15 de agosto, durante la interpelación al ministro de Desarrollo Social, Alejandro Sciarra, por la vulneración de los derechos de niñas, niños y adolescentes que están a cargo de INAU, el senador frenteamplista Aníbal Pereyra, exintendente de Rocha, denunció la situación que se estaba planteando en el departamento y pidió la renuncia de Bentancor.

A su vez, este miércoles, el programa Nada que perder (radio M24) difundió audios en los que se escucha a la directora de INAU de Rocha menospreciando al Poder Judicial, la Fiscalía y la Institución Nacional de Derechos Humanos, y descalificando a trabajadores.

“Vienen los Derechos Humanos y gestiona; viene el Poder Judicial, gestiona; viene la Fiscalía y mandonea. No, a mí no me van a mandonear. Yo voy a gestionar el INAU; que ellos gestionen la Fiscalía y los derechos humanos. Acá no se está violando ningún derecho humano. Acá se está enseñando a los chiquilines a respetar a los mayores y a respetar el protocolo que hay en el hogar (de amparo). Y si no puede estar en este hogar, bueno, que lo regresen”, dice en una de las conversaciones privadas que fue difundida.

Foto: Estefanía Leal

En la carta enviada por trabajadores al presidente de INAU, se relatan abusos sufridos por una menor de edad que, según los funcionarios, debía estar bajo el amparo de INAU, una recomendación desatendida por la jerarca. “Se informó a la dirección departamental que la situación se venía trabajando desde hace tiempo y no se veían cambios positivos de cuidado: el padre de las niñas falleció y la madre no era protectora debido, entre otras cosas, a sus dificultades en salud mental”, expresaron.

“En entrevista con una de las niñas en el servicio Centro de Estudio y Derivación (CED) surge el relato de abuso sexual infantil y la negación por parte de la madre de la situación, a lo que se evalúa desde el equipo que la mejor opción de protección para los niños era la institucionalización. Por protocolo, se debe dar aviso inmediato a la Dirección de Proyectos y Servicios; al no poder comunicarnos telefónicamente se llama a la asistente territorial para que diera aviso a la directora departamental sobre la posibilidad de ingreso debido a la gravísima situación. Enseguida llamó la directora departamental ordenando que no se realizara la denuncia solicitando internación, manifestando ‘solo estás para internar’, haciendo referencia a la directora del CED”, sostuvieron los funcionarios.

A su vez, agregaron que la directora ordenó que “que saquen al hombre alegando ‘total, ya no la van a violar más’”, con lo que, para los firmantes de la carta, Bentancor “minimizó la situación de riesgo global de la familia y desestimó las valoraciones realizadas por el equipo”.

“Espero que me hayas entendido; no internación”, le dijo a la directora del CED, según relatan los funcionarios.

Los trabajadores denunciaron la situación “pidiendo medidas de protección al juzgado, el hombre fue preso, pero las niñas quedaron con la madre, lo que derivó después en que esta misma niña viviera una nueva situación de abuso sexual infantil por parte de otro agresor”.

Sostienen, también, que luego de que se concretara este segundo abuso, Bentancor amenazó a la directora de Proyectos y Servicios, quien había renunciado al cargo. “No voy a quedarme con tu herencia maldita”, le dijo la jerarca que renunció este miércoles a su subalterna, según el relato de los trabajadores.