Redacción El País
Desde chica milita en el Partido Nacional y viene de una familia con tradición política en Artigas. Pero en los últimos 10 años Valentina dos Santos Caram, condenada el miércoles en la noche, se ha convertido en una figura clave en la política artiguense. Tanto que en las recientes elecciones internas la lista 2525, que lidera junto al intendente Pablo Caram, consiguió más del 70% de los votos de los blancos en el departamento.

Tras un proceso abreviado con el fiscal departamental Federico Rodrìguez, Valentina dos Santos fue condenada como autora penalmente responsable de un delito de usurpación de funciones con seis meses de prisión, que se sustituyen por libertad a prueba, con dos meses de tareas comunitarias durante dos horas a la semana. Se entiende que asumió indebidamente funciones públicas que no le correspondían, en el marco de la causa de otorgamiento irregular de horas extras en la Intendencia de Artigas.

En la acusación, el fiscal –en referencia al otorgamiento de horas extras- dice que las “resoluciones emanadas por la acusada no se trataban de meras recomendaciones, asesoramientos, consejos, sugerencias o advertencias, sino que eran lisa y llanamente decisiones ejecutivas de relevancia, usurpando en consecuencia, la función de Intendenta”.

Tiene 39 años y un hijo. Es abogada y técnica agropecuaria. Su tío por línea materna es el intendente Caram, también condenado esta semana por la omisión de denunciar penalmente un delito, y por línea paterna el recordado y popular dirigente artíguense Alma Dos Santos. Este era medio hermano del padre de Valentina, el productor rural y comerciante Jorge dos Santos, presidente de la Departamental del Partido Nacional y responsable de solventar buena parte de la campaña electoral de los Caram y de Valentina en los últimos dos períodos.

Foto: @alecaramds.

“Ella es la que corta el bacalao”, dicen en Artigas. Valentina Dos Santos fue directora general de la intendencia en el período pasado (2015-2020) y en este período asumió la banca de diputada pero siguió muy presente en la política artíguense.

Muchos aseguran que era la intendenta “en las sombras” en este segundo período, iniciado en 2020, y que se ocupaba de buena parte de las decisiones, como la de pedir horas extras o dar trabajo. Valentina lideró el ranking de faltas en el Parlamento, ya que estaba más presente en Artigas que en los temas legislativos capitalinos, muy lejanos para sus intereses.

Esta semana presentó renuncia a la banca de diputada con intención de asumir este viernes en forma interina el cargo de intendente, algo que estaba previsto desde antes, ya que Caram preveía iniciar la campaña para ser diputado.

De todos modos, no está claro que eso vaya a suceder ya que los constitucionalistas interpretan que no puede ocupar cargos públicos durante los seis meses que dure la pena.

Un perfil a fondo de la dirigente artíguense será publicado este fin de semana en la sección Qué Pasa de El País.