Avanzar a una democracia directa y con justicia social, con una propuesta de reforma constitucional que permitirá al pueblo ser parte activa del cambio. Esas fueron las dos grandes premisas sobre las que se basará a partir de ahora la campaña impulsada por el PIT-CNT y varias organizaciones sociales para reformar el sistema de la seguridad social.

Se trata de un apreciable cambio en la estrategia que pasará a priorizar la necesidad de que se logren las firmas para habilitar la consulta popular y que allí la ciudadanía se exprese. Con ello se dejará a un lado el foco puesto en el contenido y lo que pretende modificar es la propuesta.

“Hoy hay que buscar la firma”, dijo a El País el secretario general de Fucvam, Gustavo González, uno de los referentes de la campaña, quien apeló a la “reserva moral” del pueblo para que a través de la habilitación al plebiscito se dé un debate al que “no hay que tenerle miedo”.

Tras dos meses de campaña, los números oficiales indicaron en diciembre que hasta ese entonces se habían recogido unas 66 mil firmas. Aún lejos de las 270.000 necesarias para que se someta a votación en las próximas elecciones nacionales en octubre.

En la primera semana de febrero habrá una nueva actualización. Será luego de que culmine el “operativo retorno” de las papeletas ya firmadas, que además deberán ser verificadas.

A poco más de tres meses de la fecha límite, pautada para el 27 abril, los promotores de la reforma dicen tener números “alentadores” que les permiten augurar que habrá plebiscito.

“Vemos una gran disposición a firmar”, afirmó González. Su optimismo se vio reforzado ayer luego de que la consultora Factum divulgara su última encuesta en VTV donde se aseguró que el 36% de los uruguayos “firmará seguro”, mientras que el 25% “probablemente lo haga”.

Además, otro 18 % dijo tener dudas acerca de si firmar o no. En suma, según la muestra, seis de cada 10 personas se muestran “propensas” a firmar para habilitar el plebiscito. “Tan equivocados no estábamos”, sostuvo González.

Para el titular de Fucvam en febrero comenzará una “etapa fuerte” de la campaña. Bajo la misma premisa, se procurará “explotar” las actividades vinculadas al carnaval para seguir recolectando firmas, además de aprovechar todas las concentraciones populares.

Además se realizará inversión en volantes y en publicidad tradicional. Todo eso sin dejar de lado “boca a boca” porque, precisó González, “no sobra el dinero”. A eso se le agregarán más puestos fijos y “brigadas” que recorrerán los barrios.

En cuando al contenido, la campaña mantendrá su centro en tres aspectos que se quieren incluir en la Constitución: “Acceso a la jubilación con 60 años de edad y 30 de trabajo, eliminar las AFAP y aumentar la jubilación mínima al salario mínimo nacional”.

González remarcó que entre las firmas recolectadas y la proyección que muestra la encuesta “no hay ninguna duda de que esta es una campaña auténticamente del campo popular”. Y recordó la oposición del oficialismo político y de algunos “sectores importantes” del Frente Amplio a la reforma. “A veces el debate parlamentario no alcanza, cuando son leyes que abarcan a todos los uruguayos”, concluyó el dirigente.

Bajo la premisa “meté una, es la reforma de la gente”, un jingle que se viene difundiendo a través de las redes, pide firmar para así “tener garantías cuando estés jubilado y que tus aportes estén bien cuidados”. También se apela directamente a la solidaridad. “Dale una mano al que gana dos mangos”, se afirma.